Macizo Central de Picos de Europa 2012 (I): Fuente De - Torre de la Palanca - Collado Jermoso
Año 2012. Participantes: Gaby, Justi y yo
Primera de las tres intensas y excelentes jornadas que dedicaríamos a dar un buen repaso al macizo central de los Picos de Europa, coronando varias de las cimas más interesantes de este macizo.
Los planes, en definitiva, son los siguientes:
- Día previo: Ir en coche hasta Espinama, donde pernoctaremos.
- Día 1: Llegar a Fuente De con el coche. Subir desde Fuente De al Refugio de Collado Jermoso por los Tornos de Liordes y las Colladinas, pero antes de llegar al refugio desviarnos a subir la Torre de la Palanca y volver a bajar al refugio. Si llegados al desvío hacia Torre de la Palanca flaquearan las fuerzas, entonces nos saltaríamos lo de subir a la Torre de la Palanca. Dormir en el refugio de Collado Jermoso
- Día 2: Salir del refugio de Collado Jermoso y subir a la Torre de Casiano de Prado. Continuar hasta hacer cumbre en el Llambrión. Bajar y dirigirse a la Horcada de Caín y a la Horcada de Don Carlos y desde ahí ir a hacer cumbre en Torrecerredo. Bajar de Torrecerredo y dirigirse al refugio de Vega Urriello donde pasaremos la noche.
- Día 3: Salir del refugio de Vega Urriello y subir por la canal de la Celada, subir a Collada Bonita y continuar hasta bajar por la Canal del Vidrio. Continuar y bordear Peña Olvidada para dirigirse hacia el teleférico de Fuente De, teniendo la opción de bajar por él o por la canal de la Jenduda, según las preferencias y circunstancias del momento, hasta el coche. Retorno en coche a Madrid.
No tenemos reserva en ningún refugio y llevamos material para vivaquear donde nos surja. Eso supone ir cargados con algo más de peso pero también permite que los planes los podamos retocar según lo vayamos viendo. Además llevaré un cordino de 30 metros y algún que otro mosquetón y cintajos porque preveo que podrían llegar a necesitarse en algunos puntos que pueden resultar conflictivos.
Llegando el puente en cuestión, las previsiones meteorológicas no son del todo buenas y dan lluvias. Algunos de los que se iban a venir desisten de hacerlo. Sin embargo, tengo la impresión de que el puente no va a ser tan malo como anuncian y, aunque llueva, la cantidad de agua no va a ser para tanto. Gaby, Justi y yo decidimos arriesgarnos y meternos en la aventura.
En este artículo relato el primero de los tres días, dejando los otros dos para posteriores artículos.
Datos:
Actividad: Montañismo; Zona: Picos de Europa
Cimas: Torre de la Palanca (2614m )
Dificultades:
Solo alguna trepada para llegar a la cima de la Torre de la Palanca, pero sin mucha dificultad. El recorrido completo tiene una cierta exigencia física.
Longitud total: 12,6 km; Desnivel acumulado positivo: 1960 m; Desnivel acumulado negativo: 970 mTiempos:
Nuestros tiempos sin prisas, a ritmos bastante tranquilos y frecuentes paradas (para hacer fotos, observar el paisaje, explorar sitios, picotear, beber, etc), fueron aproximadamente los siguientes:
- Fuente De-Vega de Liordes: unas 2 horas
- Vega de Liordes-Desvío hacia Torre de la Palanca: 1h45min
- Descanso largo y comida: 30min
- Desvío-Cima Torre de la Palanca: 1h30min
- Cima Torre de la Palanca-Desvío: 1h
- Desvío-Refugio de Collado Jermoso: 10min
Track:
Compuesto a base de tracks ajenos obtenidos de internet (pincha aquí para acceder al track en wikiloc).
Índice IBP: 164
Fecha: 12 de octubre de 2012
Compuesto a base de tracks ajenos obtenidos de internet (pincha aquí para acceder al track en wikiloc).
Índice IBP: 164
Fecha: 12 de octubre de 2012
Llegamos la noche anterior a unas horas un poco intempestivas a Espinama. Allí vivaqueamos a pierna suelta, aunque creo recordar que alguna traca a altas horas de madrugada no solo nos despierta a nosotros sino también a todos los perros del pueblo que se toman su tiempo para ir silenciando sus ladridos.
Nos despertamos no demasiado temprano, ya que consideramos que tendremos suficiente margen horario y consideramos más importante estar descansados, después de haber llegado anoche un poco tarde.
Recogiendo nuestro vivac |
Buenas vistas del pueblo de Espinama... y hacia donde nos dirigimos, plagado de nubes |
Una vez hemos recogido todo y desayunado nos acercamos a Fuente De, donde dejaremos el coche. Vemos que hay muchas nubes, pero confiamos en que el día aguante. Allí aparcamos y preparamos nuestra mochila. Son casi las 11 de la mañana cuando cerramos definitivamente el coche y echamos a andar.
Foto de partida en el aparcamiento de Fuente De |
Nos dirigimos a la subida hacia lo conocido como los Tornos de Liordes. Una primeras rampas ya nos hacen entrar en calor rápidamente.
El sendero sube con decisión. Pronto llegamos al punto donde el sendero se bifurca: una rama del sendero se dirige hacia la derecha, hacia la canal de la Jenduda, y la otra, por la que seguimos, continúa zigzagueando hacia arriba. Nos vamos metiendo en la canal.
Hemos sobrepasado el desvío hacia la canal de la Jenduda y nos adentramos en esta otra canal |
El sendero rebota a un lado y a otro en una anchura no muy amplia como si estuviera luchando para poder ganar altura en una pendiente bastante acusada. Es la zona conocida como los Tornos de Liordes. A veces haces paradas relámpago para recuperar la respiración y mirando abajo compruebas cómo rápidamente se gana altura. El aparcamiento de Fuente De lo vamos dejando abajo con una rapidez que sorprende.
Sorprende lo rápidamente que dejamos abajo el aparcamiento de Fuente De |
Subida acusada por la canal. Las nubes nos envuelven en algunos momentos y tramos |
La subida es muy empinada y el sendero zigzaguea constantemente |
Mirando hacia abajo vemos los incontables zigzags del sendero que vamos dejando atrás |
Hay mucha humedad. Las nubes nos envuelven en algunos momentos. Se nos forman gotas de agua, a modo de rocío, en pelo y ropa, pero no llega al punto de llover. Alternan momentos de neblina con momentos más despejados que son los que aprovechamos para hacer fotos.
Toda esta primera subida supone nada menos que unos 900 metros de desnivel positivo, pero al ser tan directa te la ventilas en poco más de hora y media.
Una vez superada, el terreno empieza a "relajarse" un poco y pierde pendiente rápidamente. Avanzamos hacia la vega de Liordes durante 1 kilómetro más, pero ya más en horizontal. Nosotros también nos relajamos y vamos explorando un poco la zona y el manantial aunque no necesitamos agua. La amplia Vega de Liordes se abre ante nosotros.
El terreno se vuelve más horizontal. Ya se intuye la Vega de Liordes... |
... que un poco más adelante ya se deja ver |
Vamos bordeando la Vega de Liordes por su derecha por sendero terroso muy agradecido por su comodidad y su poca pendiente.
Bordeando y saliendo de la Vega de Liordes sobre cómodo sendero terroso y de poca pendiente |
A la vez que abandobamos la Vega de Liordes, poco a poco el terreno vuelve a ir cogiendo pendiente. Nos vamos metiendo en las rocas de la derecha y el terreno se vuelve ahora rocoso.
Subimos un poco por las rocas de la derecha y el sendero se vuelve muy llamativo, ya que acabamos cogiendo una especie de vira colgada que le da mucha espectacularidad al recorrido. Disfrutamos mucho del paisaje, del entorno y del sendero en sí.
El recorrido transcurre ahora por una espectacular vira |
VIsta atrás para ver desde dónde me han hecho la foto anterior mis compañeros |
La vira es muy llamativa y vistosa. Las nubes aunque limiten la visibilidad también adornan el espectáculo |
Llega un momento que el sendero deja de estar colgado y se mete hacia la derecha. Entramos en una zona más terrosa y abandonamos el recorrido algo aéreo de antes, cambiándolo por terreno amplio.
El sendero se mete hacia la derecha. Enfrente podemos contemplar el primer collado |
Me llama la atención a la derecha que se puede contemplar toda la espectacular arista Torre Blanca-Tiro Tirso, que hicimos José y yo hace unos años... ¡qué recuerdos!
La arista Torre Blanca-Tiro Tirso |
Vista más a la derecha |
Empezamos la subida a las Colladinas. En sendero vuelve a hacer zig zags para ir subiendo, pero no se sube mal y la subida ahora no es muy larga. Además nos lo tomamos con mucha calma, ya que nos estamos hinchando a hacer fotos cada dos por tres con este paisaje.
Subiendo hacia las Colladinas mientras contemplamos absortos el paisaje... |
...y nos hinchamos a hacer fotos |
Enseguida coronamos el primer collado, a la vez que el pico que te encuentras casi de frente, a lo lejos, llama poderosamente la atención. Es el famoso Friero. No es un pico de gran altitud, comparado con el resto de picos del macizo central de Picos de Europa, pero resulta realmente llamativo por su estampa en un entorno sobre el que destaca. Es inevitable que se centren las miradas en él... enseguida comprendes por qué es tan conocido a pesar de no poseer una altitud destacable. Parece obligado hacer una parada aquí, simplemente para admirar el paisaje y fotografiarse tanto con el Friero como con el resto de orientaciones.
La visión del Friero enseguida te hace entender el por qué de su fama a pesar de no ser de los picos más altos del macizo |
Vista hacia atrás, de por dónde hemos llegado al collado |
Nos retratamos con el Friero de fondo |
A la vista tenemos el siguiente collado. Continuamos nuestro camino hacia él, observados por los rebecos que campan por aquí a sus anchas.
El siguiente collado, con rebecos a mitad de camino, en el lado derecho |
Una vez llegamos al siguiente collado ya podemos contemplar el refugio de Collado Jermoso. Bueno, el refugio realmente se llama de Diego Mella, que es el nombre de la aguja que está al noreste del refugio, pero yo creo que todo el mundo le conoce coloquialmente como refugio de Collado Jermoso. La verdad que el emplazamiento del refugio es algo especialmente llamativo y espectacular.
Ya tenemos a la vista el refugio |
Una foto de grupo con el autodisparador... que salta cuando el refugio parece querer esconderse tras las nubes |
Continuamos, pasamos el siguiente collado y enseguida llegamos al punto donde tendríamos que desviarnos para subir a la Torre de la Palanca. No tenía muchas esperanzas de que mis compañeros, llegados a este punto, quisieran optar por subir ahora a la Torre de la Palanca, después de la palicilla de subir hasta aquí con los mochilones cargados pero, para mi sorpresa, cuando les pregunto si subimos a la Torre de la Palanca me responden afirmativamente. ¡Bien!
Vista del refugio desde el punto de desvío. Desde luego el emplazamiento del refugio es espectacular. |
Como de vuelta volvemos a pasar por aquí, la estrategia lógica es esconder las mochilas y llevar arriba sólo lo indispensable. Cada uno se va a llevar su chupa y adicionalmente yo llevaré la cantimplora de 1,5 litros con la que tendremos suficiente para las necesidades de agua de los tres. Pero primero hacemos una parada para comer algo y reponer energías.
Una vez hemos repuesto energías nos ponemos de nuevo en movimiento. Escondemos las mochilas y nos atamos a la cintura los abrigos. Me hago un pequeño invento para llevar la cantimplora enganchada.
Tiramos hacia arriba. Hay un sendero que sube hacia un resalte rocoso a modo de barrera que se ve más arriba. No recuerdo si el sendero era algo difuso, pero tampoco es complicado dirigirse hacia allí, si sabes más o menos hacia dónde tienes que ir, que se intuye bastante bien y es aproximadamente al centro de ese resalte rocoso o un pelín a la izquierda. Para ello hay que ir con clara tendencia a izquierdas desde el desvío.
Una vez en el resalte rocoso se localiza más o menos facil el punto por el que se trepa sin demasiadas complicaciones, hasta que sales por arriba del mismo. Me suena que pueda estar marcado con algún punto de pintura, pero ahora mismo, cuando escribo estas líneas más de 4 años después, no lo recuerdo con exactitud (supongo que podréis perdonarme por ello).
Una vez superado el resalte nos encontramos en el Jou del Llambrión, que es un pequeño "Jou" de los que hay por aquí en Picos pero a 2260 metros de altitud. Realmente es una especie de planicie de roca.
Llegados al Jou hay que ir hacia la izquierda, donde hay una incómoda pedrera muy cerca de la aguja Diego Mella. No es que sea muy grande pero te hace desgastar muchas energías cuando ya llevamos hoy un buen tute. A algunos empiezan a flaquearles las fuerzas, pero ya no queda mucho y van a sacar coraje y fuerzas de donde sea para conseguir rematar la faena.
Subiendo hacia la Torre de la Palanca |
Mis compañeros terminando de rematar la pesada pedrera |
Tras remontar la pedrera hay que ir subiendo describiendo una especie de arco de izquierdas a derechas en dirección a la Torre de la Palanca. Pero antes de llegar a cima el recorrido me lleva a una trepada por una canalcilla, que es el punto más lógico por donde continuar. Tras superar la trepada hay un pequeño tramo de subida ya más tranquila en la que el terreno ya no presenta complicaciones y sigue más o menos directo hacia lo que no me cabe dudas de que es la cima, ya que es el punto más alto de los alrededores. Son poco más de 10 minutos de pateo y acabo alcanzando la cima. Inmediatamente llegan mis compañeros y nos felicitamos por hacer cumbre.
Tras la segunda trepada ya estamos en la parte final, más o menos directos hacia la cumbre, a la que llegaremos en poco más de 10 minutos más |
Desde la cumbre de la Torre de la Palanca hay unas vistas espectaculares. Se ven perfectamente multitud de picos, entre otros el Naranjo de Bulnes o el Llambrión. Mención especial tiene la perfecta vista que hay desde aqui de la arista Cabrones-Torrecerredo. Nos hacemos multitud de fotos, entre ellas la foto cimera correspondiente del grupo.
Cumbre de Torre de la Palanca (2614 m) |
El Naranjo de Bulnes asoma por el fondo |
Justi y yo con el Llambrión de fondo, a la derecha. Afinando la vista se puede llegar a distinguir el vértice geodésico |
Gaby posando con la espectacular vista de la arista Cabrones-Torrecerredo |
Hace fresquete y tenemos que ponernos las chupas, pero eso no es impedimento para que estemos unos minutos disfrutando del espectáculo. La Torre de la Palanca está flanqueado por el norte por unas grandes y verticales paredes, seguido de la amplia parte superior de la canal de Dobresengos, lo que da mucho espacio para que las vistas sean magníficas. Las nubes parecen darnos un respiro para poder contemplar el paisaje, aunque más bien es que las hemos dejado más abajo en la vertiente oeste.
Emprendemos la bajada, por el mismo sitio por el que hemos subido e inmediatamente empieza a lloviznarnos. Mi observación y memoria me permite ir reconociendo los sitios por los que hemos subido, así que bajamos sin ningún problema exactamente por los mismos sitios, enlazando perfectamente con la trepada de arriba, que la destrepamos con cuidado bajo las gotas de agua que afortunadamente son escasas.
En el destrepe de arriba |
Parece que cesa la llovizna; en ese momento pienso que si las lluvias que daban las previsiones son así de escasas va bien la cosa. Al finalizar este destrepe tengo una bonitas vistas del refugio, visto desde aquí arriba, aunque las nubes incordian en algunos momentos para distinguir el refugio.
Una pequeña nubecilla cerca de tapar el refugio |
Continuamos y bajamos hasta donde la pedrera, que se baja algo mejor de lo que se sube. Enseguida llemamos al otro destrepe, que localizamos y hacemos sin problemas, y hacemos el resto de sendero de bajada hasta llegar al desvío donde habíamos escondido las mochilas. Como las nubes parece que van desapareciendo, por la bajada hemos tenido una buena vista del Friero y de su famosa Canal Norte o Estrecha.
Vista del Friero donde se aprecia claramente su Canal Norte o Estrecha |
Llegamos donde habíamos escondido las mochilas. Aquí disfrutamos de un buen espectáculo. Las nubes han bajado y el panorama es soberbio. Desde aquí tenemos una vista perfecta del refugio en la que se ve por el fondo a Peña Santa como si quisiera reclamar su protagonismo. Asimismo, el valle de Asotín ha quedado cubierto por un bonito mar de nubes.
Mirando hacia el refugio vemos destacar a lo lejos a Peña Santa, como si estuviera intentando reclamar el protagonismo |
El valle de Asotín cubierto por un bonito mar de nubes |
Recuperamos nuestras mochilas y las recomponemos metiendo las cosas que nos habíamos llevado.Ya solo quedan unos pocos minutos para llegar a él y finalizar esta exigente jornada.
Recuperando y recomponiendo nuestras mochilas |
Dicho y hecho, en pocos minutos llegamos al refugio. Preguntamos si hay plazas para dormir y el guarda nos contesta que está todo reservado. También nos dice que de todas formas si falla alguien de los que ha reservado y todavía no ha llegado podremos ocupar su plaza.
De momento nos pillamos unas cervezas y nos vamos al banco tipo merendero que tiene el refugio por el exterior, en un punto realmente pintoresco, a tomárnoslas y picotear algo. Para nuestra sorpresa descubrimos que hay cobertura Wi-fi... increíble, no tenemos cobertura de móvil pero sí hay Wi-fi. Aprovechamos esta curiosa circunstancia para mandar algunas fotos por el móvil.
Un banco de merendero en un sitio realmente insólito |
Un lugar ideal para disfrutar de unas cervezas |
¡Sorpresa! ¡Hay Wi-fi! |
Esta es la vista desde el refugio del último collado del recorrido desde Vega de Liordes hasta el refugio |
De todas formas yo tengo interés en llamar por teléfono y me dicen que alejándose del refugio hacia el oeste se puede pillar cobertura. Así hago, y a pesar del paseillo que me pego intentándolo apenas pillo alguna rayita de cobertura con la que consigo hablar más mal que bien. Vuelvo al "merendero" con mis compañeros.
Vemos un numeroso grupo que va subiendo al refugio por la canal de Asotín. El grupo va muy roto, lógico debido a la fuerte subida. Es un grupo que llevan un guía que han contratado y les dirige. Van llegando con cuentagotas y pasados bastantes minutos desde que llegara el primero siguen llegando integrantes.
Pasada la hora que nos ha dicho el guarda que volvamos a preguntar, volvemos a interesarnos a ver si finalmente pillamos plaza en el refugio... parece que no hay suerte. El guarda nos ofrece una tienda de campaña, de esas del Decathlon que se montan en 2 o 3 segundos, según su publicidad; aceptamos el ofrecimiento, que probablemente será mejor que dormir en vivac, dado el fresquete que hace, pero sobre todo por si le da por llover.
Buscamos un sitio para montar la tienda y la desplegamos, cuando el guarda nos vuelve a avisar... parece que finalmente sí que se quedan dos plazas libres... y somos tres... el guarda nos ofrece que nos metamos los tres en el hueco de dos... uff, Justi y Gaby no son gente de poco tamaño, precisamente, pero habrá que aceptarlo a ver que pasa... lo peor es que ahora nos toca volver a plegar la tienda de campaña de esas de 3 segundos que nos ha dejado el guarda y no hay cristiano que entienda su forma de plegado, hasta que por fín damos con ella.
Nos acoplamos en el refugio y finalmente se echa la noche y por tanto, llega la hora de dormir. Al final el espacio no es tan angosto y podemos dormir bastante decentemente los tres en el espacio de dos colchonetas.
Es mitad de la noche. Los ronquidos es algo habitual en los refugios de montaña, pero hay alguien que emite un nivel de decibelios ya fuera de lo normal y que nos tiene a todos en vilo. Lo peor es que hay alguien que se empeña en hacer los típicos ruidos que se les hace a los que ronca, así que se junta el de los roquidos con el otro y ya el concierto es total... hasta que la situación explota y acaba montándose una discusión en la que otros, con razón, dicen que lo de los ronquidos es algo inevitable y normal en los refugios y que hay que aguantarse pero no liarse a hacer más ruidos que no solo no solucionan nada sino que acaban molestando más a los demás. Yo no he tenido la precaución de traerme tapones para los oídos, pero acabo bajándome al piso de abajo, donde están las mochilas, a coger un poco de papel higiénico humedecido que me sirva de tapones y vover a intentar dormir. Así consigo mitigar casi todo el ruido... lo único que me preocupa es el no oir el despertador que he puesto para despertarme mañana, pero habrá que asumir ese riesgo.
La aventura continúa en el artículo "Macizo Central de Picos de Europa 2012 (II): Collado Jermoso-Casiano de Prado-Llambrión-Torrecerredo-Vega Urriello" (próximamente)
No hay comentarios:
Publicar un comentario