Año 2016. Participantes: Fran y yo.
Ya había oído hablar muy bien de esta vía y la tenía en mi lista de pendientes, así que llegaba el momento de abordarla. Lo cierto es que nos hemos topado con una de las mejores vías del Pico de la Miel. La guinda ha sido que el haberla empezado tan tarde unido a un pequeño problemilla que nos ha retrasado ha motivado que los dos ultimos largos los hiciéramos de noche... muy auténtico tratándose de una vía con ese apropiado nombre.
Datos:
Longitud de la vía: 200 m. Nº largos: 7. Dificultad máxima: 6c+(6a/A1)/A2e
Características:
Vía tremendamente variada sobre el granito del Pico de la Miel. Abundancia de pasos de artificial, obligados en los largos 2, 3 y 6, y posibles en los largos 1 y 7 para bajar el grado en libre hasta el 6a. Pasos de muros, fisuras de empotres y adherencia.
Material: No es necesario mucho material de autoprotección, pero recomiendo juego de friends, o al menos los medianos y grandes (0,75 al 3 de Camalot, o incluso al 4 —nosotros no llevamos el 4 pero se le puede dar uso en la fisura del largo 2—), y algún Alien como el azul. El Alien azul o equivalente es importante para el punto más complicado del primer largo: si se da en artificial para poder hacerlo (ya que está sin equipar), y si se hace en libre para asegurar ese mismo paso si no quieres alargar el posible vuelo (con alta probabilidad de golpeo) en un paso realmente difícil. Por supuesto, pareja de estribos. Aunque hay mucho artificial, en principio con la docena de cintas exprés es suficiente, pero no pasa nada si se lleva alguna más.
Equipamiento: todas las reuniones con dos parabolts, uno de ellos con argolla. Los largos están equipados con parabolts a excepción de los puntos o tramos donde hay fisuras en las que se puede usar tu propio material de autoprotección (quizás los menos frecuentes).
Equipamiento: todas las reuniones con dos parabolts, uno de ellos con argolla. Los largos están equipados con parabolts a excepción de los puntos o tramos donde hay fisuras en las que se puede usar tu propio material de autoprotección (quizás los menos frecuentes).
Pasos clave:
El paso de 6c+ o A1 del primer largo, en libre muy difícil y en artificial es sobre un Alien, es un punto algo delicado. El quinto largo, de 6a bastante obligado, tiene unos pasos iniciales muy muy finos. Como suele ser habitual en vías de este tipo, algunos pasos de artificial requieren estirarse bastante (los altos obviamente juegan con ventaja) y manejar las posturas para alcanzar el siguiente seguro especialmente en las salidas de los techos cuando falta pared en los pies que te sirva para equilibrarte. Los cambios de artificial a libre también pueden dar un pelín de guerra, algo también habitual en vías de este tipo. El techo de artificial en sí no presenta ningún problema y se hace fácilmente.
Posibilidades de escape: Por la propia vía (tened en cuenta que solo uno de los dos parabolts de cada reunión tiene argolla). Existe una variante, marcada en el croquis, para saltarse el tercer largo, ya sea en sentido ascendente o descendente. Desde la gran repisa es posible que existan posibilidades de escape por la izquierda. Desde la reunión 5 parece posible escaparse hacia cima por la izquierda.
Posibilidades de escape: Por la propia vía (tened en cuenta que solo uno de los dos parabolts de cada reunión tiene argolla). Existe una variante, marcada en el croquis, para saltarse el tercer largo, ya sea en sentido ascendente o descendente. Desde la gran repisa es posible que existan posibilidades de escape por la izquierda. Desde la reunión 5 parece posible escaparse hacia cima por la izquierda.
Tiempo de escalada: Unas 3,5 horas.
Tiempos de aproximación desde el coche y regreso: Aproximadamente media hora de subida y algo más de descenso.
Tiempos de aproximación desde el coche y regreso: Aproximadamente media hora de subida y algo más de descenso.
Cimas: Pico de la Miel (1392 m)
Croquis:
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| Croquis elaborado por el propio aperturista Wimbor (José Luis Árias) |
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| Último croquis elaborado por el aperturista Wimbor, en el que varía algunos grados de dificultad |
Fecha: 26 de mayo de 2016
Debido a las dificultades de encontrar un hueco para ir a escalar, por diversas circunstancias, acordamos Fran y yo hacer una escapadita un jueves tarde para ir a hacer alguna via que pillara mas o menos a mano. La de "Los Murciélagos" era una de mis prioridades y también de las de Fran, así que prácticamente estabamos de acuerdo en que esa vía podía ser la elegida. Solo existía un problema, que es una vía que lleva algo más de tiempo que la mayoría de las del Pico de la Miel, ya que se junta el tener que hacer artificial, que normalmente duplica los tiempos, con ser una vía con 7 largos, quizás la que más largos tenga en el Pico de la Miel.
Yo había calculado que quedando en Torrejón a las 16h podríamos estar empezando a escalar hacia las 17, con lo que tendríamos unas 4 horas de luz con las que esperaba que nos diera el tiempo justo para acabar la vía con luz. Lo cierto es que entre unas cosas y otras, a las 17 no estabamos empezando a escalar, sino más bien una hora más tarde. A pesar de este retraso, todavía nos hubiera dado tiempo a hacer cima con luz si no hubiera sido por los imprevistos posteriores que acabaron por destrozarnos el horario.
Nos juntamos a las 16h en Torrejón, pero entre aparcar coches pasar mochilas de uno a otro y echar a andar ya vamos comiendo minutos a nuestro horario previsto. Llegamos al restaurante El Cancho en La Cabrera y allí también perdemos nuestros minutos seleccionando el material a llevar y preparando las mochilas. Cuando estamos listos echamos a andar.
Aproximación
Para llegar al pie de vía hay que subir hacia la base de la vías Casera Atómica, Julito y compañía. Seguimos hasta pasar bajo el techo de la Cabrero Capri, donde el sendero empieza a descender y enseguida tenemos el inicio de la vía.
Hemos
subido un poco incómodos, por la mezcla de subir con la comida en la
tripa y con el calor de sobremesa, pero ya estamos a pie de vía. Voy a
llevar una mochila pequeñita con algo de ropa por si acaso, alguna
cosilla más y los frontales. Nos hidratamos bien con la cantimplora y
decidimos dejarla con el resto de las cosas a pie de vía, para
recogerlos a la vuelta.
En cuanto al reparto de largos,
dado que en la anterior vía que hicimos aquí, la Guirles Campos, el
largo de artificial me tocó a mí, en este caso es lógico que el de
artificial, el tercero, se lo ceda a Fran. No obstante, el quinto largo
creemos que es una placa de adherencia de grado 6a que a Fran no le hace
ninguna gracia, así que ese largo me lo quedo yo. En resumen, acordamos
que Fran se quede con los largos 1, 3 y 6 y yo con los largos 2, 4 y 5.
Falta por adjudicar el largo 7, el último, que lo dejamos para decidir
sobre la marcha cuando lleguemos a él, en función de cómo haya ido la
escalada.
Largo 1 (6c+(6a y A1)): El espolón peleón
Fran encabeza este largo. Empieza yéndose unos tres o cuatro metros hacia la izquierda para luego ganar otros tantos metros verticales y después volver de nuevo casi a la vertical del inicio de vía, prácticamente al filo del espolón. El proteger estos metros iniciales sin que la cuerda roce después es un buen rompecabezas. Aunque no es complicado escalar este tramo, parece conveniente poner algún seguro, especialmente porque nada más empezar la vía en travesía hacia la izquierda ya tienes una buena caída desde el primer metro. Yo tampoco estoy anclado a nada, así que una caída de Fran me arrastraría a mí también.
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| Fran iniciando el largo y la vía, que ya comienza teniendo buena caída |
Después de darle vueltas, Fran intenta ingeniárselas de alguna manera para no subir totalmente desprotegido, pero acaba pasando al parabolt del filo del espolón sin protección alguna. Una vez alcanzado este parabolt ya puede asegurar la cuerda en él y respirar algo más tranquilo. Como digo, llegar hasta este punto no es difícil, pero no por ello se va tranquilo sin ir asegurado, pues además hay una buena caída.
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| Fran llegando de nuevo a mi vertical, ya ha puesto la exprés en el parabolt y cuando pase la cuerda podrá respirar tranquilo. |
Fran continúa el largo. Llega al paso de 6c+ donde coloca un Alien con una pedaleta hecha con un anillo-cinta para poder subir y para el siguiente paso ya saca el estribo. Tras superar esta parte, le pierdo de vista. Fran continúa el largo hasta que finalmente me anuncia que ha hecho reunión.
Mientras esperaba a que Fran terminara el largo me preguntaba por qué Wimbor cuando la abrió no tiró recto hacia arriba por una fisura de empotrar que hay... supongo que tendrá su explicación y además parece que al acabar esa fisura hay un buen pasete antes de llegar a donde el primer parabolt.
Tardo un pelín en iniciar el largo ya que tengo que recoger todo, arrinconar las mochilas y prepararme. Salgo y realizo el tramo en forma de "C". Es fácil, pero hay una buena caída, así que mejor si se hace con algún seguro puesto. Además en el último paso para alcanzar el primer parabolt la roca escupe algo hacia afuera. Alcanzo el parabolt, casi al filo del espolón, y ya empieza la fiesta.
El primer tramito de espolón ya obliga a pensar un poco más, pero es en el segundo tramito donde empieza la fiesta. Uso la pedaleta que ha dejado Fran, pero no saco el estribo ya que veo que es posible sacarlo forzando un poco una estirada para alcanzar una fisurilla con la seguridad de llevar la cuerda por arriba. Una vez alcanzada la fisurilla, con fe, maña y fuerza, y ayudado por el "poder del A0" al cogerme del último parabolt, consigo superar ya todo el tramo de espolón sin necesidad de sacar ningún estribo.
Un minidescansito da lugar al tramito final del largo, donde también aprieta algo, pero no tanto como en el tramo anterior. Apenas hay algún agarre y es romo y malo, así que toca otra pequeña dosis de confianza, equilibrio, etc, saliendo hacia la reunión apoyando las palmas de las manos a falta de agarres y juntándome allí con Fran. Hay un poco de musgo, lo que no ha facilitado mucho las cosas.
Largo 2 (V+/6a y A1e): El largo "multiaventura"
Me toca encabezar este variadísimo largo. El inicio es una placa de adherencia, que de primeras no me da impresión de muy difícil, pero cuando me subo a ella ya me doy cuenta que el V+ de dificultad está muy bien puesto. En el último croquis de Wimbor este tramo lo ha señalado como 6a. Hay que ir fino y pensar bien cada paso; no hay ni un agarre. El calor tampoco nos ayuda para estos pasos de adherencia, pocos pero algo tensos.
Tras ese tramo la cosa afloja hasta llegar a una profunda brecha. Hay un cordino blanco al llegar a la brecha. Hay que pasar al otro lado de la brecha, donde hay un parabolt en una pared perfectamente vertical y perfectamente lisa, lo que ya indica que ese tramo solo es posible superarlo en artificial.
La primera idea que se le viene a uno a la cabeza es lanzarse a por el parabolt del otro lado de la brecha desde este lado... pero la anchura de la brecha es la suficiente como para que enseguida te des cuenta de que eso no puede ser muy buena idea. La brecha es profunda, por lo que si bajas al fondo de la brecha olvídate de alcanzar el parabolt, que quedaría tremendamente lejos. La única solución es bajarse a un saliente y desde él alcanzar la otra pared y estirarse para alcanzar el parabolt. Así hago y con un buen estiramiento de brazo y de puntillas casi como una bailarina alcanzo a chapar el parabolt... ¡guay!
Vale, ahora el artificial. Son solo dos parabolts: en el que ya estoy y otro. Monto el primer estribo y me subo hasta arriba y... hay que coger la postura correcta y estirarse muy bien para conseguir llegar a chapar el siguiente parabolt. Desde luego que de aquí debe salir uno midiendo un par de centímetros más, jeje. Por cierto, evidentemente los altos juegan con muchísima ventaja en esta vía. Monto el otro estribo y ya acabo saliendo por arriba. Vamos a por la siguiente "prueba" de este largo.
Tengo enfrente dos enormes fisuras verticales unidas por abajo por una fisura horizontal. Consulto el croquis y veo que hay que ir por la fisura de la izquierda... ¡vaya por Dios!, justo tengo enfrente la de la derecha y en vez de esa, que es la que pilla a huevo, hay que hacer una travesía para poder coger la izquierda. Me subo con los pies en la fisura horizontal e inicio la travesía por la misma... la cosa aprieta, la roca escupe, y no consigo alcanzar la fisura de la izquierda sin poner en riesgo mi integridad física... hasta que me doy cuenta que lo mismo lo estoy haciendo mal... Pienso que lo mismo en vez de ir con los pies por la fisura horizontal debo de ir más abajo, con las manos por esa fisura y los pies más abajo en adherencia... pruebo y efectivamente la cosa cambia y acabo alcanzando la fisura de la izquierda. Justo veo una reunión bajo la misma, pero no encaja con los croquis, así que lo mismo es de otra vía; efectivamente viendo el segundo croquis de este artículo veo que pertenece a la vía denominada "La Rajada".
La siguiente prueba de este largo es subir por esa fisura vertical. Unos empotres de manos para los primeros pasos y luego enseguida la fisura ensancha y tumba volviéndose más fácil.
Tras superar la fisura vertical, quedan unos cuantos metros para llegar a la reunión pero ya son bastante fáciles.
Aviso a Fran cuando está todo listo para que suba y unos minutos después nos juntamos en la reunión.
Largo 3 (V+ y A2e): Haciendo el murciélago
Le toca a Fran encabezar este largo, tal y como estaba previsto. Es el famoso largo de artificial del techo. Pudiera ser posible estrictamente hablando que el artificial sea un A3e al tener un tramo en techo, sin embargo me parece bien la cotación de Wimbor, el aperturista, además de por haberla puesto él, por tratarse de un techo que, lo que es el techo en sí, se supera fácilmente.
Fran sale por el lado izquierdo e inmediatamente le pierdo de vista. Al cabo de un ratito le oigo que el artificial está divertido. Alargo mi anclaje a la reunión y así puedo asomarme a verle. Le veo colgando del techo con el estribo. Los estribos, al ser techo, caen a la misma altura en anclajes consecutivos, por lo que al poco le veo con un pie en un estribo y el otro en el otro estribo (colocado en el siguiente anclaje) en el escalón equivalente, como si fuera un trapecista. La estampa es entre cómica y circense. Viendo esta imagen, el nombre de murciélagos le va a esta vía que ni pintado, aunque ya sé que el nombre realmente proviene de un antiguo grupo de escalada denominado "Los Murciélagos".
Fran resuelve sin problemas el techo y ahora toca salir de él por el desplome. En este desplome ya le toca estirarse mucho para pasar los dos parabolts, pero Fran con la habilidad y fuerza que le caracterizan no tarda mucho en superarlos.
Luego queda la salida en libre, que intuyo que debe de dar algún problemilla, porque Fran me avisa para que le lleve algo tenso. Le indico que a las malas la caída sería tremendamente limpia ya que tiene un margen enorme con respecto a tocar roca en una hipotética caída. Fran tiene otro hándicap, que es que la cuerda le roza mucho y le cuesta avanzar, lógico ya que el recorrido de la cuerda es un poco revuelto en este largo. Pero acaba superando bien la salida al libre y la parte final hasta alcanzar la reunión; no obstante me avisa de que ha dejado el estribo puesto en el último paso de artificial y que luego lo recoja yo.
Cuando Fran ya ha montado reunión y me avisa, recojo y salgo a remontar este largo.
Según salgo por la izquierda me encuentro con la travesía que lleva al inicio del techo. Es una travesía de V+ en adherencia pero muy bien protegida con parabolts, así que no presenta excesivos problemas.
Llegado al inicio del techo compruebo que es muy disfrutón, y que no es demasiado complicado llegar de un anclaje al siguiente. Lo único que hay que tener en cuenta es, como en cualquier techo de artificial, el moverse con un pelín de cuidado para no empezar a dar vueltas como un tiovivo colgado del techo. Me doy cuenta y me hace gracia que inconscientemente acabo haciendo las mismas posturas que ha hecho Fran anteriormente, incluida la de "trapecista" con un pie en cada estribo; las leyes de la física mandan. El "suelo" (quiero decir la roca de la misma vertical) está a más de 15 metros del techo, yo diría que bastantes más, así que resulta curioso estar aquí colgado en este vacío.
Toca acometer ahora el desplome de salida, donde ya veo que Fran habrá tenido que estirarse bien y usar sus habilidades para llegar al siguiente parabolt. Estos puntos dan mucho trabajo y requieren algo de habilidad y fuerza ya que no es nada fácil encontrar la posición adecuada que te permita, sin el apoyo lateral de una pared, estirarte al máximo para alcanzar con tu mano la máxima altura. El siguiente parabolt también aleja algo y supuestamente debe dar también algo de guerra, pero yo ya me encuentro con el estribo de Fran puesto, puesto que como he comentado antes se lo ha dejado.
Subo al estribo de Fran y ya me preparo para salir en libre... joer, no hay nada que pille decente donde agarrarse para salir ya que sale a una placa lisa de adherencia. Por la izquierda hay un apoyo pero pilla bajísimo para la mano... pero es lo único que hay, así que toca darse un paso raro para poder salir de ahí. Una vez ya consigues subir los pies a la placa de adherencia ya es fácil, pero... hay que darse la vuelta y recoger estribo, exprés y todo lo que haya quedado en el último parabolt... ahora ya sé por qué me ha dejado Fran el estribo, jajaja, qué jodío... toca maniobrar en una postura algo tensa y de equilibrio para ir soltando todo. Voy soltando todo como puedo y cogiéndolo, cosa que hago prácticamente sin poder ver debido a la posición. Cuando en teoría he recogido todo, de repente me doy cuenta... ¡Leches! ¿Dónde está el estribo de Fran?... Me miro en el arnés y no lo llevo enganchado en ningún portamaterial... está solo el mosquetón HMS que lo llevaba. Me asomo por el techo y... efectivamente está abajo... Al manipularlo se ha debido de escapar el cordino de enganche del estribo del propio mosquetón que lo porta; eso no habría ocurrido (o al menos no tan fácilmente) en mis estribos, hechos con cinta en lugar de cordino y quedando muy ceñidos al mosquetón que lo porta. Bueno, voy a la reunión y ahora veremos la forma de recuperarlo.
Unos pasos de adherencia sin ningún seguro pero fáciles conducen a la reunión.
El rescate del estribo
Tenemos muchas dudas, la primera es si debemos abandonar la vía a la vez que rescatamos el estribo, dado que ya vamos muy justos de luz y esto del estribo ya va a rompernos completamente el horario. Esa primera duda la resolvemos enseguida, o mejor dicho la postponemos: decidimos primero rescatar el estribo y luego ya valorar si abandonamos o no.
Fran propone descolgarnos desde el techo y volver por la misma vía repitiendo el artificial, pero le aclaro que donde vamos a parar al descolgarnos donde el estribo no está comunicado con la vía y habría que subir por la propia cuerda, lo cual es muy trabajoso. En su lugar le propongo bajar por una canal que hay a la izquierda, desde donde me da la impresión que se puede llegar más o menos bien a donde está el estribo caído y volver a subir de nuevo por el mismo sitio.
Me voy al extremo izquierdo de la gran repisa, por donde baja la canal, y localizo un buen emplazamiento para poner un par de friends y montar reunión. Baja Fran, lo cual le agradezco, ya que él es más ágil y sobrado de fuerzas que yo. Le voy descolgando con el reverso; bueno, realmente baja casi todo destrepando y solo se cuelga y me pide que le descuelgue yo en algunos tramitos. Una vez bajado le toca ir bastante hacia la derecha para llegar a donde el estribo, es fácil según me comenta, pero el pendulazo en caso de irse es descomunal. Recupera el estribo y le voy recuperando según va subiendo, con bastante roce de cuerda. Al rato llega donde estoy yo con el estribo rescatado; ¡genial, Fran!
Se nos ha ido mucho tiempo y no nos daría tiempo a acabar la vía con luz... ¿o lo mismo sí?... parece muy remoto pero decidimos intentarlo viendo además en el croquis que parece que pueden haber posibilidades de escape más arriba, yo diría que incluso mejores que las que tenemos ahora mismo. En teoría nos quedan 4 largos, pero en ese momento veo que los dos últimos se podrían empalmar sin ningún problema, con lo que ahorraríamos algo de tiempo.
Largo 4 (V/V+): Muy fácil, pero con un paso fino
Seguimos con nuestra planificación, así que me toca encabezar este largo y el siguiente. Nos trasladamos a la reunión para iniciar este largo, que no es la misma que hemos usado al finalizar el largo anterior sino una uno metros más avanzada que se alcanza sin ningún problema ya que estamos en una gran repisa.
Parece un largo fácil, de esos de transición. Ha que subirse a un espolón muy tumbado y luego encaminarse hacia la pared.
Voy por el lateral del espolón buscando el punto donde subirme a él, guiado por las zonas donde clarea un poco el musgo negro que invade todo. Encuentro el sitio y además hay un parabolt. Intento subirme y... joer, no hay nada de agarres y encima está bastante manchado de musgo. Realmente es solo un único paso y ya está pero hay que ser muy fino. El parabolt está colocado de una forma realmente tentadora para hacerte fácilmente un A0 si no quieres complicarte.
El resto del largo ya es un paseo hasta la reunión, si bien es en adherencia y hay que vigilar un pelín el no pisar el musgo, que aunque es esquivable abunda por aquí. No he puesto más seguros en el largo que el del parabolt y un friend llegando a la reunión, en parte por la práctica imposibilidad de ponerlos pero realmente es que tampoco necesitas más.
Fran remonta el largo rápidamente y nos juntamos en la reunión.
Largo 5 (6a): Guapísimo muro de regletillas
Este largo ya lo teníamos asignado para encabezarlo yo, pensando que se trataba de un 6a de adherencia pura, aunque luego no ha resultado ser así exactamente. Como vengo de encabezar también el anterior hacemos el intercambio de cabos para evitar líos de cuerda. Por longitud se podrían haber empalmado el anterior largo y éste, pero es algo que no recomiendo en absoluto si al que le toque encabezar este largo le importa algo su integridad física, pues es delicado y las posibilidades de "picar suelo" con tanta longitud de cuerda para chiclear, y encima sin que te vea bien tu compañero, son muy altas.
Empiezo. El inicio del largo es quizás lo más duro y toca hacerlo sin ningún seguro ya que la primera chapa está un poco alta. Le indico a Fran que se coloque para portearme por si me cayera. Requiere unas buenas dosis de analizar la pared, paciencia, equilibrio y adherencia... mientras intento avanzar noto que los pies están a punto de írseme a la vez que intento aprovechar alguno de los microrrelieves intentando pellizcarlo malamente como puedo con las yemas de los dedos para equilibrarme y si es posible poder progresar.
Son momentos de bastante tensión, pero con paciencia y un poco de decisión voy avanzando y acabo alcanzando el primer parabolt, lo que ya me permite tener al menos un seguro.
Ya había leído en alguna reseña que del primer al segundo parabolt aleja algo y es posible que si cayeras antes de chapar el segundo parabolt podrías llegar a tocar suelo. La realidad es que entre estos dos parabolts los pasos son también durillos al principio pero acercándote al segundo parabolt ya encuentras algún agarrre decente que te da más seguridad y tranquilidad hasta conseguir chapar el segundo parabolt. Aún así, si tu compañero está muy atento no creo que llegaras a tocar suelo, y además él está justo en tu vertical así que más vale que esté atento si no quiere que le caigas encima.
Como digo, desde un poco antes del segundo parabolt ya van apareciendo agarres, unos mejores y otros peores y la mayoría hay que buscarlos, pero se van encontrando cosas y se puede ir progresando un pelín mejor. No hay mayor alegría y disfrute que el de cada momento en el que encuentras alguna cosilla para poder seguir progresando cuando parecía que no había nada.
Hay quien compara este muro con el del segundo largo de la Harakiri; ambos son unos muros tremendamente disfrutones, pero éste tiene algunas diferencias y claramente mayor dificultad que el de la Harakiri. Básicamente las regletillas de la Harakiri son más aristosas mientras que aquí son romas, y además el largo de la Harakiri es todo de canteo mientras que aquí tienes algunos pasos que son más de adherencia.
Superado el muro, solo quedan unos pasos fáciles para dirigirse a la reunión, pero para alcanzar la reunión hay una sorpresita final... ¿qué tal andáis de dominadas?... Pues sí, la reunión está sobre un enorme escalón final, que parece estar perfectamente "tallado" y pulido, y que es un poco más alto que uno mismo. Un parabolt ayuda a proteger este enorme paso que no queda más remedio que superar como si fuese una dominada, ya que no hay nada donde agarrarse ni apoyarse que no sea el borde superior del escalón. Uno acaba superándolo, pero a base de una buena dominada y de arrastrarse por la arista del borde con codos, tripa, rodillas... al más puro estilo de cuando uno era pequeño y coronaba un muro de hormigón. Justo encima del escalón está la reunión.
Le toca el turno a Fran de remontar este largo. En unos minutos le tengo llegando al escalón mientras comenta lo bonito y divertido que ha sido el muro. Cuando llega al escalón se sorprende igual que yo, pero Fran está fuerte y lo supera seguramente con muchísima más elegancia que la mía.
Largo 6 (A1e): Muro perfecto de artificial, (que empalmamos con el siguiente largo)
Está empezando a bajar la luz, así que quedan pocos minutos para el anochecer. Le digo a Fran que este largo y el siguiente son muy cortos y aparentemente se pueden empalmar bastante bien, así que en principio acordamos ese plan.
Encabeza Fran, que sale haciendo este muro perfecto de vertical y liso, supera un techillo y al rato le pierdo de vista. Me avisa de que pasa la reunión, que está enseguida y continúa el siguiente largo.
Tras una espera en la que se va metiendo un poco el frío y va cayendo la luz, Fran me avisa de que ha llegado a la segunda reunión y por tanto al final de la vía.
Yo mientras le aseguraba e ido sacando el frontal de la mochila y colocándolo en el casco, ya que estaba claro que me iba a tocar hacer estos dos últimos largos en la oscuridad de la noche.
Cuando me avisa Fran comienzo a subir. El muro tiene una verticalidad tan perfecta y está tan sumamente liso que parece que estuviera hecho a propósito y no parece que sea natural. El artificial se va haciendo bien hasta llegar al pequeño techito que corona el muro, donde para superarlo ya hay que empezar a estirarse más para progresar. El siguiente paso ya pilla un tanto lejos y hay que esforzarse todavía más, pero es el último y ya se llega a la repisa donde está la reunión 6. Paso la reunión y continúo.
Largo 7 (6b): Corto largo algo explosivo (empalmado con el largo anterior)
Desde la reunión 6 hay que desplazarse un poco a la izquierda y seguir. Está muy claro porque hay un parabolt que delata por dónde hay que ir. En teoría se puede hacer un 6b en libre, pero la mayoría de la gente lo hace en A0 o A1 combinado con libre, ya que los tres parabolts que hay alejan entre ellos lo suficiente para que te tengas que currar algunos pasitos entre medias que tampoco son moco de pavo ya que rondarán el V+ o 6a. Fran creo que lo ha hecho con estribos y yo tampoco me complico y uso mis estribos... ya bastante hay con hacerlo a la luz de un frontal, pues la noche nos ha dejado ya completamente a oscuras al poco de iniciar yo el largo anterior.
Al ver el aleje entre chapas y que hay que darse pasos en libre, lo primero que piensa uno es cómo narices se sube en libre por un sitio tan vertical y liso. A esto se une el reducido campo de visión de un frontal, que dificulta el encontrar las formas de progresar que no están frente a ti. Pero pronto me doy cuenta que por la izquierda hay pequeños salientes y cosillas para poder progresar y gracias a ello se va pudiendo resolver los tramos entre parabolts.
Consigo llegar al último parabolt y desde él salir en uno o dos pasos en libre ya fáciles a una repisa invadida por arbustos. Cruzo los arbustos y me junto con Fran en la última reunión.
Trepada final
Desde donde estamos solo queda una trepada para alcanzar los bloques cimeros. No se ve una trepada del todo fácil, así que optamos por que trepe yo hasta los bloques cimeros y una vez allí ya recogemos cuerdas y todo
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| Fran saliendo del tramo crítico del largo |
Mientras esperaba a que Fran terminara el largo me preguntaba por qué Wimbor cuando la abrió no tiró recto hacia arriba por una fisura de empotrar que hay... supongo que tendrá su explicación y además parece que al acabar esa fisura hay un buen pasete antes de llegar a donde el primer parabolt.
Tardo un pelín en iniciar el largo ya que tengo que recoger todo, arrinconar las mochilas y prepararme. Salgo y realizo el tramo en forma de "C". Es fácil, pero hay una buena caída, así que mejor si se hace con algún seguro puesto. Además en el último paso para alcanzar el primer parabolt la roca escupe algo hacia afuera. Alcanzo el parabolt, casi al filo del espolón, y ya empieza la fiesta.
El primer tramito de espolón ya obliga a pensar un poco más, pero es en el segundo tramito donde empieza la fiesta. Uso la pedaleta que ha dejado Fran, pero no saco el estribo ya que veo que es posible sacarlo forzando un poco una estirada para alcanzar una fisurilla con la seguridad de llevar la cuerda por arriba. Una vez alcanzada la fisurilla, con fe, maña y fuerza, y ayudado por el "poder del A0" al cogerme del último parabolt, consigo superar ya todo el tramo de espolón sin necesidad de sacar ningún estribo.
Un minidescansito da lugar al tramito final del largo, donde también aprieta algo, pero no tanto como en el tramo anterior. Apenas hay algún agarre y es romo y malo, así que toca otra pequeña dosis de confianza, equilibrio, etc, saliendo hacia la reunión apoyando las palmas de las manos a falta de agarres y juntándome allí con Fran. Hay un poco de musgo, lo que no ha facilitado mucho las cosas.
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| El tramito final también da su guerra, sin agarres, usando las palmas de las manos... |
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| ...pero con un poquito de confianza se acaba saliendo bien. |
Largo 2 (V+/6a y A1e): El largo "multiaventura"
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| En el primer tramo del segundo largo |
Tras ese tramo la cosa afloja hasta llegar a una profunda brecha. Hay un cordino blanco al llegar a la brecha. Hay que pasar al otro lado de la brecha, donde hay un parabolt en una pared perfectamente vertical y perfectamente lisa, lo que ya indica que ese tramo solo es posible superarlo en artificial.
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| Continuando el largo hacia la brecha |
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| A punto de acometer la brecha (que no se ve desde la reunión) |
La primera idea que se le viene a uno a la cabeza es lanzarse a por el parabolt del otro lado de la brecha desde este lado... pero la anchura de la brecha es la suficiente como para que enseguida te des cuenta de que eso no puede ser muy buena idea. La brecha es profunda, por lo que si bajas al fondo de la brecha olvídate de alcanzar el parabolt, que quedaría tremendamente lejos. La única solución es bajarse a un saliente y desde él alcanzar la otra pared y estirarse para alcanzar el parabolt. Así hago y con un buen estiramiento de brazo y de puntillas casi como una bailarina alcanzo a chapar el parabolt... ¡guay!
Vale, ahora el artificial. Son solo dos parabolts: en el que ya estoy y otro. Monto el primer estribo y me subo hasta arriba y... hay que coger la postura correcta y estirarse muy bien para conseguir llegar a chapar el siguiente parabolt. Desde luego que de aquí debe salir uno midiendo un par de centímetros más, jeje. Por cierto, evidentemente los altos juegan con muchísima ventaja en esta vía. Monto el otro estribo y ya acabo saliendo por arriba. Vamos a por la siguiente "prueba" de este largo.
Tengo enfrente dos enormes fisuras verticales unidas por abajo por una fisura horizontal. Consulto el croquis y veo que hay que ir por la fisura de la izquierda... ¡vaya por Dios!, justo tengo enfrente la de la derecha y en vez de esa, que es la que pilla a huevo, hay que hacer una travesía para poder coger la izquierda. Me subo con los pies en la fisura horizontal e inicio la travesía por la misma... la cosa aprieta, la roca escupe, y no consigo alcanzar la fisura de la izquierda sin poner en riesgo mi integridad física... hasta que me doy cuenta que lo mismo lo estoy haciendo mal... Pienso que lo mismo en vez de ir con los pies por la fisura horizontal debo de ir más abajo, con las manos por esa fisura y los pies más abajo en adherencia... pruebo y efectivamente la cosa cambia y acabo alcanzando la fisura de la izquierda. Justo veo una reunión bajo la misma, pero no encaja con los croquis, así que lo mismo es de otra vía; efectivamente viendo el segundo croquis de este artículo veo que pertenece a la vía denominada "La Rajada".
La siguiente prueba de este largo es subir por esa fisura vertical. Unos empotres de manos para los primeros pasos y luego enseguida la fisura ensancha y tumba volviéndose más fácil.
Tras superar la fisura vertical, quedan unos cuantos metros para llegar a la reunión pero ya son bastante fáciles.
Aviso a Fran cuando está todo listo para que suba y unos minutos después nos juntamos en la reunión.
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| Fran remontando el largo |
Largo 3 (V+ y A2e): Haciendo el murciélago
Le toca a Fran encabezar este largo, tal y como estaba previsto. Es el famoso largo de artificial del techo. Pudiera ser posible estrictamente hablando que el artificial sea un A3e al tener un tramo en techo, sin embargo me parece bien la cotación de Wimbor, el aperturista, además de por haberla puesto él, por tratarse de un techo que, lo que es el techo en sí, se supera fácilmente.
Fran sale por el lado izquierdo e inmediatamente le pierdo de vista. Al cabo de un ratito le oigo que el artificial está divertido. Alargo mi anclaje a la reunión y así puedo asomarme a verle. Le veo colgando del techo con el estribo. Los estribos, al ser techo, caen a la misma altura en anclajes consecutivos, por lo que al poco le veo con un pie en un estribo y el otro en el otro estribo (colocado en el siguiente anclaje) en el escalón equivalente, como si fuera un trapecista. La estampa es entre cómica y circense. Viendo esta imagen, el nombre de murciélagos le va a esta vía que ni pintado, aunque ya sé que el nombre realmente proviene de un antiguo grupo de escalada denominado "Los Murciélagos".
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| Fran iniciando el largo 3 |
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| Colgando del techo |
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| Un pie en cada estribo |
Fran resuelve sin problemas el techo y ahora toca salir de él por el desplome. En este desplome ya le toca estirarse mucho para pasar los dos parabolts, pero Fran con la habilidad y fuerza que le caracterizan no tarda mucho en superarlos.
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| Preparándose para acometer el desplome que viene a continuación... |
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| ...y que le obliga a jugar con las posturas y estirarse bastante |
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| Superado el desplome, ahora toca salir por arriba... |
Luego queda la salida en libre, que intuyo que debe de dar algún problemilla, porque Fran me avisa para que le lleve algo tenso. Le indico que a las malas la caída sería tremendamente limpia ya que tiene un margen enorme con respecto a tocar roca en una hipotética caída. Fran tiene otro hándicap, que es que la cuerda le roza mucho y le cuesta avanzar, lógico ya que el recorrido de la cuerda es un poco revuelto en este largo. Pero acaba superando bien la salida al libre y la parte final hasta alcanzar la reunión; no obstante me avisa de que ha dejado el estribo puesto en el último paso de artificial y que luego lo recoja yo.
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| Saliendo del artificial |
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| Otra toma |
Cuando Fran ya ha montado reunión y me avisa, recojo y salgo a remontar este largo.
Según salgo por la izquierda me encuentro con la travesía que lleva al inicio del techo. Es una travesía de V+ en adherencia pero muy bien protegida con parabolts, así que no presenta excesivos problemas.
Llegado al inicio del techo compruebo que es muy disfrutón, y que no es demasiado complicado llegar de un anclaje al siguiente. Lo único que hay que tener en cuenta es, como en cualquier techo de artificial, el moverse con un pelín de cuidado para no empezar a dar vueltas como un tiovivo colgado del techo. Me doy cuenta y me hace gracia que inconscientemente acabo haciendo las mismas posturas que ha hecho Fran anteriormente, incluida la de "trapecista" con un pie en cada estribo; las leyes de la física mandan. El "suelo" (quiero decir la roca de la misma vertical) está a más de 15 metros del techo, yo diría que bastantes más, así que resulta curioso estar aquí colgado en este vacío.
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| El techo y el estribo que ha dejado colgando Fran |
Toca acometer ahora el desplome de salida, donde ya veo que Fran habrá tenido que estirarse bien y usar sus habilidades para llegar al siguiente parabolt. Estos puntos dan mucho trabajo y requieren algo de habilidad y fuerza ya que no es nada fácil encontrar la posición adecuada que te permita, sin el apoyo lateral de una pared, estirarte al máximo para alcanzar con tu mano la máxima altura. El siguiente parabolt también aleja algo y supuestamente debe dar también algo de guerra, pero yo ya me encuentro con el estribo de Fran puesto, puesto que como he comentado antes se lo ha dejado.
Subo al estribo de Fran y ya me preparo para salir en libre... joer, no hay nada que pille decente donde agarrarse para salir ya que sale a una placa lisa de adherencia. Por la izquierda hay un apoyo pero pilla bajísimo para la mano... pero es lo único que hay, así que toca darse un paso raro para poder salir de ahí. Una vez ya consigues subir los pies a la placa de adherencia ya es fácil, pero... hay que darse la vuelta y recoger estribo, exprés y todo lo que haya quedado en el último parabolt... ahora ya sé por qué me ha dejado Fran el estribo, jajaja, qué jodío... toca maniobrar en una postura algo tensa y de equilibrio para ir soltando todo. Voy soltando todo como puedo y cogiéndolo, cosa que hago prácticamente sin poder ver debido a la posición. Cuando en teoría he recogido todo, de repente me doy cuenta... ¡Leches! ¿Dónde está el estribo de Fran?... Me miro en el arnés y no lo llevo enganchado en ningún portamaterial... está solo el mosquetón HMS que lo llevaba. Me asomo por el techo y... efectivamente está abajo... Al manipularlo se ha debido de escapar el cordino de enganche del estribo del propio mosquetón que lo porta; eso no habría ocurrido (o al menos no tan fácilmente) en mis estribos, hechos con cinta en lugar de cordino y quedando muy ceñidos al mosquetón que lo porta. Bueno, voy a la reunión y ahora veremos la forma de recuperarlo.
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| Saliendo del desplome |
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| El paso de artificial a libre da un pelín de guerra |
Unos pasos de adherencia sin ningún seguro pero fáciles conducen a la reunión.
El rescate del estribo
Tenemos muchas dudas, la primera es si debemos abandonar la vía a la vez que rescatamos el estribo, dado que ya vamos muy justos de luz y esto del estribo ya va a rompernos completamente el horario. Esa primera duda la resolvemos enseguida, o mejor dicho la postponemos: decidimos primero rescatar el estribo y luego ya valorar si abandonamos o no.
Fran propone descolgarnos desde el techo y volver por la misma vía repitiendo el artificial, pero le aclaro que donde vamos a parar al descolgarnos donde el estribo no está comunicado con la vía y habría que subir por la propia cuerda, lo cual es muy trabajoso. En su lugar le propongo bajar por una canal que hay a la izquierda, desde donde me da la impresión que se puede llegar más o menos bien a donde está el estribo caído y volver a subir de nuevo por el mismo sitio.
Me voy al extremo izquierdo de la gran repisa, por donde baja la canal, y localizo un buen emplazamiento para poner un par de friends y montar reunión. Baja Fran, lo cual le agradezco, ya que él es más ágil y sobrado de fuerzas que yo. Le voy descolgando con el reverso; bueno, realmente baja casi todo destrepando y solo se cuelga y me pide que le descuelgue yo en algunos tramitos. Una vez bajado le toca ir bastante hacia la derecha para llegar a donde el estribo, es fácil según me comenta, pero el pendulazo en caso de irse es descomunal. Recupera el estribo y le voy recuperando según va subiendo, con bastante roce de cuerda. Al rato llega donde estoy yo con el estribo rescatado; ¡genial, Fran!
Se nos ha ido mucho tiempo y no nos daría tiempo a acabar la vía con luz... ¿o lo mismo sí?... parece muy remoto pero decidimos intentarlo viendo además en el croquis que parece que pueden haber posibilidades de escape más arriba, yo diría que incluso mejores que las que tenemos ahora mismo. En teoría nos quedan 4 largos, pero en ese momento veo que los dos últimos se podrían empalmar sin ningún problema, con lo que ahorraríamos algo de tiempo.
Largo 4 (V/V+): Muy fácil, pero con un paso fino
Seguimos con nuestra planificación, así que me toca encabezar este largo y el siguiente. Nos trasladamos a la reunión para iniciar este largo, que no es la misma que hemos usado al finalizar el largo anterior sino una uno metros más avanzada que se alcanza sin ningún problema ya que estamos en una gran repisa.
Parece un largo fácil, de esos de transición. Ha que subirse a un espolón muy tumbado y luego encaminarse hacia la pared.
Voy por el lateral del espolón buscando el punto donde subirme a él, guiado por las zonas donde clarea un poco el musgo negro que invade todo. Encuentro el sitio y además hay un parabolt. Intento subirme y... joer, no hay nada de agarres y encima está bastante manchado de musgo. Realmente es solo un único paso y ya está pero hay que ser muy fino. El parabolt está colocado de una forma realmente tentadora para hacerte fácilmente un A0 si no quieres complicarte.
El resto del largo ya es un paseo hasta la reunión, si bien es en adherencia y hay que vigilar un pelín el no pisar el musgo, que aunque es esquivable abunda por aquí. No he puesto más seguros en el largo que el del parabolt y un friend llegando a la reunión, en parte por la práctica imposibilidad de ponerlos pero realmente es que tampoco necesitas más.
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| Fran remontando el largo 4. Se aprecia la invasión del musgo en este largo |
Fran remonta el largo rápidamente y nos juntamos en la reunión.
Largo 5 (6a): Guapísimo muro de regletillas
Este largo ya lo teníamos asignado para encabezarlo yo, pensando que se trataba de un 6a de adherencia pura, aunque luego no ha resultado ser así exactamente. Como vengo de encabezar también el anterior hacemos el intercambio de cabos para evitar líos de cuerda. Por longitud se podrían haber empalmado el anterior largo y éste, pero es algo que no recomiendo en absoluto si al que le toque encabezar este largo le importa algo su integridad física, pues es delicado y las posibilidades de "picar suelo" con tanta longitud de cuerda para chiclear, y encima sin que te vea bien tu compañero, son muy altas.
Empiezo. El inicio del largo es quizás lo más duro y toca hacerlo sin ningún seguro ya que la primera chapa está un poco alta. Le indico a Fran que se coloque para portearme por si me cayera. Requiere unas buenas dosis de analizar la pared, paciencia, equilibrio y adherencia... mientras intento avanzar noto que los pies están a punto de írseme a la vez que intento aprovechar alguno de los microrrelieves intentando pellizcarlo malamente como puedo con las yemas de los dedos para equilibrarme y si es posible poder progresar.
Son momentos de bastante tensión, pero con paciencia y un poco de decisión voy avanzando y acabo alcanzando el primer parabolt, lo que ya me permite tener al menos un seguro.
Ya había leído en alguna reseña que del primer al segundo parabolt aleja algo y es posible que si cayeras antes de chapar el segundo parabolt podrías llegar a tocar suelo. La realidad es que entre estos dos parabolts los pasos son también durillos al principio pero acercándote al segundo parabolt ya encuentras algún agarrre decente que te da más seguridad y tranquilidad hasta conseguir chapar el segundo parabolt. Aún así, si tu compañero está muy atento no creo que llegaras a tocar suelo, y además él está justo en tu vertical así que más vale que esté atento si no quiere que le caigas encima.
Como digo, desde un poco antes del segundo parabolt ya van apareciendo agarres, unos mejores y otros peores y la mayoría hay que buscarlos, pero se van encontrando cosas y se puede ir progresando un pelín mejor. No hay mayor alegría y disfrute que el de cada momento en el que encuentras alguna cosilla para poder seguir progresando cuando parecía que no había nada.
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| En pleno muro del largo 5 |
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| Fran me hace una foto artística |
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| Rematando el muro |
Hay quien compara este muro con el del segundo largo de la Harakiri; ambos son unos muros tremendamente disfrutones, pero éste tiene algunas diferencias y claramente mayor dificultad que el de la Harakiri. Básicamente las regletillas de la Harakiri son más aristosas mientras que aquí son romas, y además el largo de la Harakiri es todo de canteo mientras que aquí tienes algunos pasos que son más de adherencia.
Superado el muro, solo quedan unos pasos fáciles para dirigirse a la reunión, pero para alcanzar la reunión hay una sorpresita final... ¿qué tal andáis de dominadas?... Pues sí, la reunión está sobre un enorme escalón final, que parece estar perfectamente "tallado" y pulido, y que es un poco más alto que uno mismo. Un parabolt ayuda a proteger este enorme paso que no queda más remedio que superar como si fuese una dominada, ya que no hay nada donde agarrarse ni apoyarse que no sea el borde superior del escalón. Uno acaba superándolo, pero a base de una buena dominada y de arrastrarse por la arista del borde con codos, tripa, rodillas... al más puro estilo de cuando uno era pequeño y coronaba un muro de hormigón. Justo encima del escalón está la reunión.
Le toca el turno a Fran de remontar este largo. En unos minutos le tengo llegando al escalón mientras comenta lo bonito y divertido que ha sido el muro. Cuando llega al escalón se sorprende igual que yo, pero Fran está fuerte y lo supera seguramente con muchísima más elegancia que la mía.
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| Fran sorprendido al llegar al enorme escalón final |
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| Dominada al canto y se supera. La foto está un pelin movida porque ya va faltando luz |
Largo 6 (A1e): Muro perfecto de artificial, (que empalmamos con el siguiente largo)
Está empezando a bajar la luz, así que quedan pocos minutos para el anochecer. Le digo a Fran que este largo y el siguiente son muy cortos y aparentemente se pueden empalmar bastante bien, así que en principio acordamos ese plan.
Encabeza Fran, que sale haciendo este muro perfecto de vertical y liso, supera un techillo y al rato le pierdo de vista. Me avisa de que pasa la reunión, que está enseguida y continúa el siguiente largo.
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| Fran, atacando este muro perfectamente liso y vertical |
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| Un poco más arriba hay que superar un techito |
Tras una espera en la que se va metiendo un poco el frío y va cayendo la luz, Fran me avisa de que ha llegado a la segunda reunión y por tanto al final de la vía.
Yo mientras le aseguraba e ido sacando el frontal de la mochila y colocándolo en el casco, ya que estaba claro que me iba a tocar hacer estos dos últimos largos en la oscuridad de la noche.
Cuando me avisa Fran comienzo a subir. El muro tiene una verticalidad tan perfecta y está tan sumamente liso que parece que estuviera hecho a propósito y no parece que sea natural. El artificial se va haciendo bien hasta llegar al pequeño techito que corona el muro, donde para superarlo ya hay que empezar a estirarse más para progresar. El siguiente paso ya pilla un tanto lejos y hay que esforzarse todavía más, pero es el último y ya se llega a la repisa donde está la reunión 6. Paso la reunión y continúo.
Largo 7 (6b): Corto largo algo explosivo (empalmado con el largo anterior)
Desde la reunión 6 hay que desplazarse un poco a la izquierda y seguir. Está muy claro porque hay un parabolt que delata por dónde hay que ir. En teoría se puede hacer un 6b en libre, pero la mayoría de la gente lo hace en A0 o A1 combinado con libre, ya que los tres parabolts que hay alejan entre ellos lo suficiente para que te tengas que currar algunos pasitos entre medias que tampoco son moco de pavo ya que rondarán el V+ o 6a. Fran creo que lo ha hecho con estribos y yo tampoco me complico y uso mis estribos... ya bastante hay con hacerlo a la luz de un frontal, pues la noche nos ha dejado ya completamente a oscuras al poco de iniciar yo el largo anterior.
Al ver el aleje entre chapas y que hay que darse pasos en libre, lo primero que piensa uno es cómo narices se sube en libre por un sitio tan vertical y liso. A esto se une el reducido campo de visión de un frontal, que dificulta el encontrar las formas de progresar que no están frente a ti. Pero pronto me doy cuenta que por la izquierda hay pequeños salientes y cosillas para poder progresar y gracias a ello se va pudiendo resolver los tramos entre parabolts.
Consigo llegar al último parabolt y desde él salir en uno o dos pasos en libre ya fáciles a una repisa invadida por arbustos. Cruzo los arbustos y me junto con Fran en la última reunión.
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| Llegando a la reunión por entre los arbustos |
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| Las luces de La Cabrera |
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| Y un selfie de fin de vía |
Trepada final
Desde donde estamos solo queda una trepada para alcanzar los bloques cimeros. No se ve una trepada del todo fácil, así que optamos por que trepe yo hasta los bloques cimeros y una vez allí ya recogemos cuerdas y todo
La trepada no es que sea muy difícil, de hecho ya subes sin la seguridad de una cuerda, pero sí que vale la pena y agradeces el continuar con los pies de gato para hacerla, y requiere pensar unos segundos y no ir a lo loco. Una vez he trepado arriba recojo la cuerda desde allí y ya sube Fran.
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| Iniciando la trepada final |
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| Que es cortita ya que después de este tramo enseguida empieza a tumbar |
Cima
En los bloques cimeros dejamos las cosas y nos acercamos a cima, para hacernos las oportunas fotos y dar cuenta de los habituales cacahuetes garrapiñados. Hace fresquete ya a estas horas y de hecho ya desde antes de la trepada final le he dejado mi camiseta de manga larga a Fran, que va más justo de frío que yo.
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| Foto cimera |
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| Y lo mismo pero en "modo selfie" |
Descenso y regreso
Dedicamos unos minutillos a la cima pero no muchos debido al fresquete y a las horas tan tardías que son ya, pensando que todavía nos queda bajar a pie de vía, recoger las mochilas grandes que hemos escondido, continuar la bajada hasta el coche, organizar un poco las cosas en el coche y luego coger el coche hasta casa... todo eso nos puede llevar fácilmente 1,5 horas o incluso 2.
En definitiva, no tardamos mucho en retornar a donde habíamos dejado las cuerdas y algunas cosas más, recogerlas e iniciar el descenso por la canal oeste. Llegamos a pie de vía y mientras recogemos acabamos con el agua de la cantimplora. Continuamos el descenso hasta el coche donde nos redistribuimos rápidamente las cosas. Hoy no hay ocasión de cerveza, así que cogemos el coche y tiramos para casa.
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