viernes, 20 de junio de 2014

Puig Campana. Vía "Entorns" (800 m, 21 largos, V+)

Puig Campana. Vía "Entorns" (800 m, 21 largos, V+)
Año 2014. Participantes Fran y yo.

Fran y yo teníamos previsto hacer en torno al mes de abril una vía de las largas del Puig Campana, a modo de prueba-maratón. No nos queríamos complicar mucho y por eso habíamos elegido inicialmente la denominada "integral del espolón sudoeste", que tiene una longitud de 900 metros pero con un grado bastante tranquilo. Realmente la integral sudoeste consiste en empalmar tres vías: el espolón Aristóteles, la arista Pepsi y el espolón sudoeste en sí. Finalmente las fechas se nos fueron complicando y nos plantamos a principios de junio.

Dado que ese cambio de fechas suponía, por un lado días más largos y por otro más calor, se me ocurrió que era mejor cambiar de idea por los siguientes motivos:

  • El hecho de que los días fueran más largos permitía objetivos más ambiciosos. La Entorns es una vía similar en longitud, pero mucho más dura, comprometida y difícil.
  • La Entorns presenta la ventaja con respecto a la otra de que los primeros largos trascurren en sombra.
  • El espolón sudoeste en sí no parece ser una vía visitada, por lo que hasta el momento no había podido sacar más información que un par de croquis muy burdos de poquísima precisión y que no me resultaban del todo fiables

Adicionalmente, el enfrentarnos a una vía como la Entorns (dura, mantenida, larguísima, comprometida y difícil de seguir) nos iba a servir tanto para medirnos y saber nuestras posibilidades, como de interesante experiencia, todo ello de cara a posibles retos futuros.

La vía es muy bonita, con sensación de estar metido en una enorme aventura, perdido en un mundo aparte, y la casi totalidad de sus largos son muy bonitos, algunos diría que casi antológicos. La roca es fantástica, aunque hay que tener mucho ojo con los bloques sueltos.

A tener en cuenta

Quiero dejar claro lo engañoso que puede resultar el valorar superfluamente esa vía, pues cualquiera que vea que su grado máximo es V+ puede pensar en que se trata de una vía bastante asequible... pero realmente se trata de una vía bastante durilla y difícil por los siguientes motivos:
  • La vía no da mucho respiro. En otras vías largas te sueles encontrar algunas zonas fáciles intercaladas, de como mucho III+ o IV, que te permite un cierto descanso mental y de tensión. En la Entorns la mayoría de largos son de V, habiendo también algunos V+ e incluso hay un paso que con mochila como comentaré, puede ser perfectamente un 6a.
  • Los largos son tremendamente verticales y bastante físicos, de tirar constantemente de brazos, lo que acrecienta el efecto de lo que acabo de indicar.
  • El que ya haya hecho vías bastante largas ya sabe que llega un momento en el que el coco se satura muchísimo de tanta tensión... y esta vía es tremendamente larga... es interminable. El que no haya hecho vías de más de 400 metros y no sepa de lo que estoy hablando mejor que se lo piense. Esta no solo es nada menos que el doble de una de las de 400 metros (imagínate que al acabar una de esas vías te ponen otra vez al principio; y encima ya no vas fresco), sino que encima es muy peleona, tensa y muy mantenida. A tener en cuenta también que en este tipo de vías los grados de dificultad van pareciendo más duros cuando vas sumando muchos largos a tus espaldas, por el efecto del cansancio físico y la enorme saturación mental.
  • El tremendo calor de la zona la hace más dura aún. El problema de plantearla en invierno es el de las pocas horas de luz.
  • El hecho de tener que cargar con una mochila como mínimo con bastante agua y lo indispensable para un posible vivac de emergencia es otro punto que suma para endurecerla. Nosotros cargamos con 2,5 litros de agua por cabeza y a pesar de racionarlos mucho se nos quedaron bastante cortos; si hubiéramos tenido que vivaquear habríamos pasado muchísima sed.
  • Se trata de una vía muy perdidiza. Es complicada de seguir y es muy fácil embarcarse; de hecho casi que lo habitual es sufrir algún que otro embarque que merma considerablemente tu horario, tus fuerzas y tu moral (un embarque te puede llevar fácilmente más de una hora corregirlo y puede meterte en tramos de más grado). A algunas cordadas les cuesta hasta encontrar el inicio de la vía, que se encuentra un pelín escondido.
  • Las posibilidades de abandono son muy complicadas. Hay que ser una persona con ingenio y recursos para poder escapar de ahí, especialmente según vas pasando algunos puntos, y aún así no va a ser fácil. En este sentido es interesante ir observando todo el rato los alrededores según vas subiendo.
  • El descenso tampoco es nada fácil ni evidente. Una vez alcanzada la famosa pedrera la cosa ya no presenta excesivos problemas, pero el descenso hasta localizar el rápel que te baja hasta ella no es nada evidente. Eso hace que muchas cordadas recurran al vivac cuando ven que no van a llegar a cima de día y les tocaría bajar en la oscuridad de la noche.
La vía está catalogada como MDsup (Muy Difícil Superior).

Muchas cordadas no acaban la vía. De hecho conozco a personas que a pesar de tener cierto nivel de escalada han acabado abandonando, ya sea por lo interminable que es o por embarques.

Paredón de 1000 metros de desnivel  en la cara oeste del Puig Campana

Con todo esto no quiero desanimar a nadie. Todo lo contrario, quiero que nadie la subestime y se lleve sorpresas desagradables, pues la primera impresión puede llevar a subestimarla, y que la gente sepa dónde se mete y adquiera las correspondientes precauciones para poder llevar la escalada a buen término.

Para hacerla algo más llevadera podría ser buena solución el hacerla en fechas más frescas, que no haga tanto calor, y plantear el hacer vivac, debido a tener menos horas de luz. Hay un buen vivac al lado de la reunión 17 con muretes de piedra y todo. Tras el rápel desde la reunión 15 también se podría apañar un vivac; pero en cualquier caso hay que tener en cuenta que por lo menos hay que llegar hasta ahí.

El promedio de cada largo ronda los 40 metros. Conviene tener una idea de lo que cada cordada tarda en hacer un largo de 40 metros de grado V en caliza y multiplicar por el número de largos para hacerse una idea. A eso hay que añadir el tiempo que se pierde en el rápel intermedio y un par de pequeños traslados de reunión. Se deben tener en cuenta también pequeños detalles de tiempo en las reuniones como el de ponerse y quitarse los gatos, el de observar en cada reunión por donde va el siguiente largo, etc y considerarlo en el tiempo por largo; puede parecer una tontería, pero con tanto largo a poco que dediques tres minutos en cada reunión al final acumulas más de una hora, y ese tiempo no hay que racanearlo si te va a salvar de un embarque o de machacarte los pies. También hay que tener en cuenta un buen margen de tiempo para corregir posibles embarques, y que cuando llevas ya muchos largos cuesta algo más escalar y puede que se ralentice un poco la escalada. Se supone que vas a ir comiendo y bebiendo durante la escalada y esto no va a afectar a tu horario.

Por mi parte, cargué con el GPS para poder grabaros el track, así que más abajo os facilito el track de la aproximación y el descenso. Durante la escalada lo tuve apagado pues ahí no sirve de mucho, por la precisión necesaria, y podría llegar a despistar. No obstante el track, con la aproximación para localizar el inicio de la vía y con el lioso descenso, creo que es un valiosísimo regalo que hago a las cordadas que se aventuren en esta vía y que les puede facilitar mucho la vida (eso sí, a costa de perder ese puntito de aventura, je, je, je).


Bueno, después de toda esta extensa introducción, empezamos (pincha sobre las fotos para verlas a mayor tamaño):

Datos
Longitud de la vía: 800 m.  Nº largos: 21.     Dificultad máxima: V+/6a
Dificultad global de la vía:  MDsup (Muy Difícil Superior)
Características: Vía larguíiiisima, muy vertical y mantenida en el V. Se trata de una vía bastante física sobre caliza. La roca es excelente y con muy buen agarre. Ojo con los bloques sueltos, que abundan. Mucha piedra suelta en un tramo de los largos 2 y 3. Largos por lo general muy muy bonitos, y algunos espectaculares. Sensación de estar perdido en un inmenso mundo aparte de paredes verticales y agujas.
Material: Juego de fisureros, juego de friends, aunque puedes evitar el cargar con el 3 y 4 de Camalot pues no les vas a dar mucho uso y son totalmente prescindibles; algún Alien puede venir bien aunque tampoco es imprescindible. Como siempre en el Puig Campana viene muy bien ir provistos de anillos-cinta y cordinos para puentes roca (abundan), lazar árboles o lazar algún bloque.
Equipamiento: En las reuniones siempre hay algo: árboles, puentes roca, parabolts o clavos, frecuentemente aderezados con cordinos. Los largos 20 y 21 están equipados con parabolts. En el largo 1 también hay un par de parabolts. En el resto de la vía algún clavo viejo, y unos cuantos puente-roca equipados con cordinos. La vía se protege bien en todo momento salvo en un punto del largo 15 que comento en su momento.
Pasos clave: Para mí sin duda la llegada a la reunión 7 a través de una grieta chimenea desplomada con algún agarre en el interior pero que la mochila no te deja alcanzar.
Posibilidades de escape: Muy difíciles. Conviene ir observando los alrededores de la vía según se sube para conocerlos. Se ven por los alrededores algunos rápeles de fortuna hechos con cordinos que se podrían aprovechar. Si te toca abandonar vas a tener que improvisar en función de donde estés teniendo en cuenta todo lo que hayas observado hasta ese momento. Puede ayudar el conocer vías vecinas que incluso aprovechan algún tramo de ésta.
Tiempo de escalada: Salvo que seáis unos máquinas, un mínimo de 10 horas no os los quita nadie; de ahí para arriba...
Tiempos de aproximación desde el coche y regreso: La aproximación a pie de vía desde Font de Molí (donde dejamos el coche) nos llevó unos 50 minutos. El descenso desde la cima a Font de Molí nos llevó unas 3 horas, si bien en la oscuridad de la noche y lo perdidizo del descenso nos hizo emplear más tiempo del normal. En cualquier caso las 2 horas se superan holgadamente pues hay casi 1000 metros de desnivel, más de 4 km de recorrido muy empinado y un rápel que se lleva también su parte de tiempo.
Cimas: Pic Prim (cima gemela de la principal del Puig Campana) 1320 m.

Track:
Grabado in situ (solo aproximación y descenso, apagado durante la escalada) y posterior filtrado y borrado de algunos puntos erráticos (pincha aquí para acceder al track en wikiloc).



Croquis: 

En este croquis están empalmados el largo 16 con el 17 y por eso sale uno menos

Este croquis para mí es muy bueno e ilustrativo si se interpreta bien, aunque los grados de dificultad reflejados en general son algo más bajos que en la realidad. A este croquis me referiré en algún momento como el "croquis esquemático"

En este croquis la verdad es que no se ve mucho, pero lo pongo como complemento. Ojo que la aproximación no está bien pintada

Estos croquis manuscritos también están interesantes, pero hay que tener cuidado y en cuenta que hay varios largos empalmados y algunas reuniones desplazadas

 
 Fecha:  7 de junio de 2014


Aproximación

Como otras veces, llegamos el día anterior al área recreativa de Font de Molí, en el municipio de Finestrat, donde tras llegar y cenar en este confortable sitio, nos metemos en el saco a dormir. Esta vez nos situamos un poco más arriba y algo más "escondidos" que otras veces, en parte por si vienen grupos a hacer botellón en el párking, como alguna otra vez, que no nos molesten mucho.

Hace mucho calor; pensamos que con el saco sábana casi que nos hubiera bastado. Enseguida notamos la presencia de mosquitos que se empiezan a cebar con nosotros; la solución pasa por envolvernos completamente en el saco sábana, lo cual afortunadamente parece mostrarse efectivo.

Tras la primera cabezada aparecen un par de montañeros a cenar. Hablan con un volumen alto, pero es que parece que no se han dado cuenta de nuestra presencia, algo escondida. A Fran se le ocurre que podría carraspear y a mí que podría encender el frontal, ello para que vieran que estábamos ahí y bajaran el volumen; ambos lo pensamos cada uno por nuestra cuenta (lo comentaríamos a la mañana siguiente) pero finalmente no sé si por sueño, pereza o por qué pero ninguno lo hacemos.

De madrugada hace algo de rasca y entonces el saco sábana no es suficiente y hay que taparse un poco con el saco de dormir.

Me despierto a las 5:30 como un respingo en cuanto suena el despertador y aviso a Fran. Ya está a punto de amanecer, lo cual me extraña pues mi intención era hacer la aproximación de noche para aprovechar mejor las horas de luz. Me doy cuenta de mi error, de que había observado los horarios de amanecer de Madrid y aquí en el Levante el horario se adelanta un poco... uno se cree que lleva todo controlado, pero siempre hay detalles que se acaban escapando.

Desayunamos y recogemos rápido, pero a pesar de que teníamos todo bastante preparado del día anterior, tardamos un poco más de lo previsto en preparar el equipo: mi idea era echar a andar hacia las 6:00 o 6:15, pero el tiempo pasa. Nos embadurnamos de crema de protección solar cuando todavía no es de día, lo cual resulta un poco cómico, pero luego nos va a resultar indispensable. Llenamos en la fuente toda el agua que podemos cargar: 2 litros Fran y 2,5 litros yo; sabemos que nos va a venir muy justo pero tampoco debemos cargar excesivo peso y preferimos racionar. Finalmente echamos a andar a las 6:40 desde la Font de Molí; ya es completamente de día, así que los frontales ya los llevamos en la mochila.

Subimos por la carretera y enseguida cogemos el PR del "Camí de la Serra" tras pasar un puente; realmente se puede seguir un rato más por la carretera cómodamente pero preferimos salirnos ya por aquí, metiéndonos ya en plena pinada y acortando algo de longitud a costa de subir algunas cuestecillas que nos hacen entrar rápidamente en calor.

Hay que seguir el PR un buen rato; no se desvía por el punto que se suele desviar uno para ir a la mayoría de las vías sino que se continúa mucho más por el PR. Es un sendero que conozco bien ya que lo he recorrido íntegramente en una ocasión que bajé del Puig Campana por la cara norte y volví a Finestrat por este sendero. Entre eso y que estuve localizado visualmente el inicio de vía en una foto cuando preparé la información de la escalada tengo bastante confianza en que no nos dará demasiada guerra el identificar y llegar a pie de vía.
 
Llega un punto en el que tengo que ir cotejando la foto con la realidad. La foto está hecha en una zona afectada por un incendio de hace unos años y todavía no hemos llegado a ella, pero es prudente el ir intentando identificar las cosas cuanto antes. Al principio me cuesta un poco, pues la "imagen" cambia bastante según la perspectiva desde donde se mire, pero enseguida empiezo a reconocer morfologías de la pared. Me sorprendo: «¡Leches!, ¡pero si ya estamos muy cerca!»; pensaba que había que andar bastante más todavía. Ciertamente, desde aquí todavía no lo veo, pero en la siguiente curva del sendero ya entramos en la zona afectada por el incendio. Ahora hay que andar con mil ojos.
 
Al llegar a una curva del sendero hacia la izquierda, sale recto un pequeño senderillo. En el desvío hay una roca con una señal para indicar que el PR sigue por la izquierda, y a la vez, tan medio borrado que apenas se ve (hay que fijarse muchísimo), pone "Entorns" con una flecha indicando que hay que coger el desvío a la derecha: perfecto, no hay ninguna duda.

Roca donde indica que por la izquierda se sigue por el PR y por la derecha se va a la vía "Entorns".

Subimos por el sendero que al principio sube directo hacia la pared y luego se difumina haciendo zetas, por lo que no se sigue con tanta facilidad. Tenemos "fichado" visualmente el árbol donde se inicia la vía, que está bastante alto, y no dejamos de vigilarle para no perderle de vista.

Parece que este difuminado sendero se dirige hacia la derecha donde sube una empinadilla pedrera, lo cual concuerda con una brevísima descripción que llevo de la aproximación al pie de vía. Está claro que hay que subir por ella. Es una pedrera de esas en las que uno sigue al pie de la letra el famoso estribillo de la canción de Ricky Martin:

Un, Dos, Tres
Un pasito pa'lante María
Un, Dos, Tres
Un pasito pa'tras

No hemos empezado esta monstruosa escalada y ya estamos resoplando como bellacos... ¡mierda de pedreras!... menos mal que pronto se acaba. Efectivamente la pedrera muere prácticamente contra la pared. Hay que cambiar bruscamente de dirección hacia la izquierda donde el árbol por fin parece estar más cerca: vemos sus ramas más altas asomar. Para llegar a él hay que hacer una trepada de grado II con un cortado vertical a tu izquierda pero que se hace más o menos fácilmente si la suela de tus zapatillas agarra mínimamente y esquivas la "gravilla" que hay por algunas zonas.

Fran se va directo a la pared, donde ve una chapa, y se sorprende porque se ve cañero, pero le aclaro que la vía empieza por un espolón que nace justo en el árbol que llevamos vigilando desde hace rato, unos metros más a la izquierda. A pesar de que la chapa que ha visto le despista inicialmente le convenzo rápidamente cuando le enseño el árbol con cordinos y un par de parabolts que se ven en el espolón si afinas un poco la vista.

Vista desde el inicio de vía. Se encuentra ya algo alto y hay que sudar un poquillo para llegar hasta él.

Son las 7:30, pero Fran tiene un pequeño apretón y prefiere despacharlo antes de meterse en pared; me entran tentaciones de intentar lo mismo, pero como no percibo que tuviera éxito me olvido y espero a Fran que se ha buscado un escondrijo.

Viene otra cordada hacia aquí. ¡Mierda! Vuelve Fran y pensamos sobre el dilema de dejarlos pasar para no subir con alguien pisándote el culo o si por el contrario si los dejamos pasar nos van a ralentizar a nosotros y nos pueden "llover" piedras. La verdad es que no me convence nada ninguna de las dos cosas, pero afortunadamente se instalan en una vía que sale justo al acabar la pedrera de antes: el "espolón Agulló Peñalva", una vía más asequible, más suave de grado y en la que, aunque tiene 700 metros, en los dos primeros largos ya te ventilas 100 de ellos con un IV y un III que se suele hacer en ensamble.

¡Bingo! Conflicto solucionado. ¡Tenemos la "Entorns" toda enterita para nosotros solos!


Desarrollo de la escalada

Hablamos del reparto de largos; como siempre, uno haría los pares y otro los impares. Le digo a Fran que coja los que quiera que a mí me da igual; ya le había pasado la información para que los mirara, pero ahora se la vuelvo a pasar para que lo vuelva a mirar y escoja. Con tanto largo es difícil pensar sobre el tema. Me pregunta si hay algún diedro (su verdadera pasión) y le contesto que no lo se exactamente... me he estudiado más o menos la ruta, pero la vía es tan larga que ya no me acuerdo ni lo que hay y además en algunas zonas la información no la tengo del todo clara y espero irla aclarando según vayamos llegando.

Fran preparándose.

Fran propone empezar él, ya que siempre suelo empezar yo; a mí me da igual, así que me parece bien la propuesta. Por tanto, quedan adjudicados para Fran los largos impares y para mí los pares.

Mientras nos poníamos de acuerdo, hemos oído el estruendo de varios desprendimientos que por el ruido provocado han debido de ser de una magnitud considerable. Esto te pone un poco los pelos de punta, pero intentamos no darle importancia, cruzar los dedos y confiar en que no pase nada.

Se nos han hecho las 7:50 cuando vamos a empezar la vía... casi una hora más tarde de lo que tenía en la cabeza, pero ya damos el pistoletazo de salida.

Aunque en un par de ocasiones empalmamos dos largos, y por tanto la hicimos en 19 largos más el rápel, la descripción la voy a hacer con la numeración de largos más oficial, de 21 largos, para no liar al personal.

En cuanto a los grados de dificultad de los largos hay bastante "baile" entre unas reseñas y otras; en mi opinión en algunas se quedan cortos y en otras se pasan. Incluso en la misma reseña en un largo se están quedando corto mientras que en otro se están pasando de graduación, según mi percepción. En este sentido yo he cogido los que me han parecido más correctos, unas veces por arriba y otras por abajo. En algunos largos en los que he dudado entre dos grados he optado por poner los dos para indicarlo.

Hay que destacar también, que hay muchos agarres que si no estás atento no los ves y eso te puede hacer cambiar bastante tu percepción de dificultad. Por ejemplo, para Fran el paso más difícil de la vía está en el largo 12, pero yo ese paso lo superé fácilmente simplemente porque creo que vi un agarre que Fran no vio, y me pareció uno más.

No me enrollaré mucho en los largos, salvo excepciones, pues son muchos largos y además uno acaba por no acordarse de todo.


Largo 1 (IV/IV+): Espolón fácil que al final tumba

Le toca a Fran de primero.

Al principio hay dos chapas y luego ya no hay nada más, pero es fácil y se puede proteger bien. Fran remonta el espolón relativamente rápido y le pierdo de vista. Tiene que llegar hasta un muro donde está la reunión. Cuando llega a la reunión y la monta me avisa para que suba. De momento estamos en agradable sombra y se nos ha pasado la calorina de la aproximación.

Fran enseguida ha tomado altura

Me toca. Comienzo. El largo es fácil y encima va de más a menos. El principio puede ser IV+, pero a lo mejor ni eso. La roca es buena y se progresa bien. A mitad de largo tumba un poquito y el terreno está un poco más roto, pero muy fácil. Enseguida te plantas en la reunión, amplia y cómoda al pie de un gran muro vertical y equipada con dos parabolts. Este largo no tiene ninguna pérdida.

La cosa empieza fluida y las sensaciones en la toma de contacto con la roca son muy buenas.


Largo 2 (VI+/V): Travesía seguida de tramo vertical y luego piedras sueltas

Me toca de primero. Empieza el largo con un tramo en travesía que de primeras sorprende un poco porque escupe hacia el vacío, pero luego se resuelve sin problemas. Creo recordar que había un clavo, pero tampoco necesitas mucho más porque enseguida se vuelve fácil.

Te sitúas bajo una canal que baja. Hay que subir por ella, pero el obstáculo es un pequeño muro vertical que hay que remontar. El muro se supera enseguida, pues es corto, y la roca empieza a tumbar algo a la vez que empieza a abundar la piedra suelta. Afortunadamente la reunión no está debajo, gracias a la travesía del principio, porque la lluvia de piedras es casi inevitable.

En el tramo inicial en travesía del segundo largo

Un pequeño paso de adherencia, esquivando la "gravilla", y poco más para plantarte en la visible reunión, formada por dos parabolts unidos con una cadena roja.

Cuando está todo listo, sube Fran. Yo no me he fijado mucho en la dificultad del largo, quizás pensando en todo lo que nos queda por delante, pero Fran me apunta que sí le ha parecido que hubiera un pasito de V.

Fran llegando a la reunión 2

Desde la reunión  fotografiamos la llamativa sombra que proyecta el Puig Campana y que da una idea de sus dimensiones.
 
La sombra del Puig Campana delata sus grandes dimensiones


Largo 3 (IV+/V): Pedrera y unos pasos aislados hasta árboles

Le toca a Fran de primero.  El largo empieza un poco raro: remontar unos metros de pedrera guarrindonga. Luego llegas a un tramo más normal, de roca más vertical en el que hay algún pasito, pero tampoco excesivamente complicado. Se sale por la derecha hacia unos árboles donde Fran monta reunión. Le aviso a Fran que hay que seguir más lejos por la repisa hasta un árbol mucho más alejado, pero me dice que si sigue van a rozar mucho las cuerdas, así que monta reunión en los primeros árboles y me avisa.

Fran en el tramo posterior a la pedrera

Una foto de las magníficas vistas, antes de iniciar este largo.

Empiezo a remontar el largo. La parte más fea de toda la vía es la pedrera que inicia este largo. Por suerte es cortita y rápidamente estás escalando otra vez en buena roca. Pronto me reúno con Fran en los árboles donde ha montado la reunión.

Veo que Fran ya ha estrenado el Basic Cam azul que he comprado para la ocasión

Le comento que hay que trasladarse al árbol correcto. Sin embargo coincido con Fran en que ha hecho bien de montar reunión aquí y lo que hay que hacer es trasladarse después a la "reunión 3 bis", pues si hubiera avanzado directamente hasta ella efectivamente el roce de cuerdas hubiera sido excesivo.

Antes de trasladarnos investigo a ver a qué árbol nos debemos trasladar, pues de primeras no es muy evidente. En esta amplia terraza hay un senderillo en ligera bajada que unos 10 metros más allá muere, pues se acaba la terraza. Parece claro que hay que seguir el senderillo, pero hay unos cuantos árboles y ninguno tiene cordinos ni ningún otro indicio. Finalmente, con una foto que tengo del largo 4 identifico que hay que instalarse justo donde termina el senderillo y la terraza, en unos árboles algo pequeños. Vuelvo a donde está Fran, y entre los dos nos trasladamos con la cuerda y demás en el nuevo emplazamiento. Es nuestra primera pérdida de tiempo.

Como indica en alguna reseña que he leído y con la que estoy de acuerdo, hasta aquí los tres primeros largos han sido cortos y fáciles y las dificultades se han concentrado en algún paso aislado. Son largos que podrían pensar en empalmarse si no fuera por el roce de la cuerda. Esto solo ha sido un precalentamiento y a partir de aquí la escalada ya empieza a ponerse un poco más seria y mantenida.


Largo 4 (IV+): La cosa se pone vertical

Me toca de primero. Tengo identificado visualmente el árbol donde se ubica la siguiente reunión, así que ahora se trata de "navegar" por la pared hacia él. De otras reseñas me había quedado la impresión que este largo era casi de transición, pero, sin ser muy difícil, resulta más peleón de lo que me pensaba.

Empiezo a escalar por esta pared donde afloran algunos árboles desafiando la hostilidad de esta roca vertical frente a la vegetación..

Empezando el largo 4 y estudiando su recorrido.

Empiezan a aparecer algunos pasos algo atléticos, algunos pies en adherencia tirando de brazos y a tener que buscar con más intensidad el mejor modo de progresar. La dificultad marcada en este largo es IV+ pero mantenido y en algún momento parece incluso algo más, pero quizás fruto de comparar con los largos anteriores cuyos pasos eran aislados.

Finalmente llego al árbol donde se hace reunión. Es evidente pues tiene cordinos puestos que le delatan.. Eso sí. la reunión es de "Pin y Pon", es decir, con un espacio bien reducidito. Encima la posición para asegurar, detrás del árbol y prácticamente encaramado a él, es mala de narices. Los alrededores son completamente verticales y tienes la sensación de estar encaramado a un árbol cual mono.

Fran remontando este vertical largo. En la foto, los árboles, inclinados, despistan en cuanto a la verticalidad.

Cuando le toca el turno a Fran remonta el largo y nos juntamos, como podemos, en esta incómoda reunión.

Fran llegando a la reunión

Nos hacemos un selfie encaramados al tronco del árbol y pensamos en continuar enseguida, no por las prisas en sí, pues tenemos sensación de llevar un buen ritmo, sino por librarnos cuanto antes de esta incómoda reunión.

Un selfie encaramados al tronco del árbol, antes de continuar.


Largo 5 (V): Bonito diedro... la perdición de Fran

Cuando Fran llegó a la reunión 4 lo primero que le digo es que mire para arriba y vea el magnífico diedro, totalmente vertical, que le va a tocar (le fascinan los diedros). Le digo: "seguro que has escogido los largos impares aposta". Evidentemente se lo digo bromeando, pues sé que no se ha fijado mucho en los largos para escoger, pero por si acaso él me contesta que no lo sabía.

Le toca a Fran de primero. Empieza el largo y tras un primer tramo de diedro un tanto irregular, llega al tramo de diedro limpio. Se le nota que la cosa se va poniendo más dura, pero va avanzando hasta que sale por la parte arriba del diedro. La reunión está justo encima del diedro pero un poco metido.

Fran monta reunión y me avisa; también me pone la miel en los labios al decirme que está viendo el siguiente largo, que me toca a mí, y tiene una pinta increíble.

Fran en el tramo inferior del diedro, más irregular.

Comienzo a remontar el largo. Voy superando el tramo más irregular del diedro y llego hasta el diedro limpio. Empiezo a remontarlo. En este largo ya estamos peleando con grado V de una forma más consistente.

La parte de diedro limpio tiene su miguilla, pero de repente me doy cuenta que la vía se escapa del diedro por la derecha, evidente porque hay un cordino, pero Fran ha chapado el cordino y vuelto al diedro y la cuerda continúa hasta finalizar totalmente el mismo. Le comento que se ha colado, que la vía se salía del diedro por la izquierda y me contesta: "Ya lo sé. Es que al principio me ha costado un poco cogerle el rollo a este diedro, pero en cuanto lo he cogido no he podido evitarlo: no quería dejar de disfrutarlo". Mi contestación es : "Tío, de verdad que no eres consciente de todos los largos que nos quedan. ¡No podemos derrochar fuerzas así como así!".

Fran ha chapado friends en la continuación del diedro, así que no me queda más remedio que hacer lo mismo y seguir por el diedro hasta el final. Tiene pasetes más duretes todavía, que elevan el grado de "nuestra variante" fácilmente al V+; incluso desploma en algunos puntos.

La parte del diedro limpio. El primer seguro que se ve delata que la vía se va hacia la derecha, pero Fran ha chapado los dos siguientes seguros en la grieta del propio diedro.

La verdad es que el dichoso diedro me obliga a apretar un poco, pero tiene razón Fran en que se disfruta a tope.

Finalmente llego a la reunión. Allí el ritual de siempre: intercambio de material, y consulta de la información que llevo para ver por dónde va el siguiente largo, aunque su inicio está muy claro.


En la reunión 5 consultando la información


Largo 6 (IV+): Precioso y vertical largo de fisuras

Me toca de primero. Fran tenía razón. Se ve una enorme pared tan perfectamente vertical que parece que la han hecho con una plomada, y sobre ella labradas unas curiosas fisuras que van a permitir escalarla.

Me meto a escalar y enseguida empiezo a disfrutar este magnífico largo. A pesar de su apariencia la dificultad se sitúa en IV+, por lo que se disfruta sin excesivas tensiones. Al principio hay dos puentes roca con cordinos que permiten asegurar, pero realmente no es ningún problema protegerlo y poner seguros, como vienen ocurriendo hasta ahora durante toda la vía.

Iniciando el largo 6

Progresando en el largo 6

Más arriba

Al acabar la pared llego a una plataforma donde hay una sirga donde en principio se podría montar reunión, parece que está para ello, pero ni la veo cómoda para asegurar a un segundo ni me parece que sea la reunión para iniciar el siguiente largo, así que avanzo un poco por la plataforma y enseguida veo la verdadera reunión con un par de parabolts en la pared. Como veo que si aseguro desde esta reunión la cuerda va a rozar mucho, por el tramo de plataforma horizontal, hago un montaje para alargar la reunión y poder asegurar bien a Fran mientras sube de segundo.

Montaje para alargar el punto de reunión hasta donde me interesa y que no rocen las cuerdas.

Sube Fran y pronto le veo aparecer llegando ya a la reunión.

Fran llegando a la reunión 6

A Fran le está entrando otro apretón, así que se descuelga por un recoveco que hay a la izquierda de la reunión y ahí se desahoga. Más allá se ve un árbol con un cordino que no sé si pertenecerá a una vía o si es un rápel de fortuna de cordadas que han abandonado.

El "apretón" de Fran nos hace perder otros 20 minutos. Lo indico para que se vea que en estas aventuras se va "escapando" el tiempo sin darte cuenta con estas pequeñas cosas. No obstante seguimos con la impresión de que nuestro ritmo es bastante bueno.

Por otra parte, Fran tiene problemas con su cámara de fotos, así que a partir de aquí solo podría hacer alguna que otra foto suelta.


Largo 7 (V+/6a): Techillo inicial y delicada llegada desplomada a reunión.

Le toca a Fran de primero. En escasos metros llega a la parte izquierda del techillo que está cerca de la reunión. Hay que atravesarlo en travesía hacia la derecha, por debajo de él, casi sin pies porque lo que hay por debajo es una placa vertical que apenas sirve para apoyarlos un poco. Tras atravesar en travesía el techito hay que superarlo por la derecha y tirar para arriba por las fisuras.
 
Fran a punto de hacer la travesía del techito

Saliendo del techito por su derecha

Avanzando por las fisuras

Cuando se va llegando a la zona desplomada de arriba, hay que ir en travesía ligeramente ascendente hacia la izquierda buscando el punto de paso en el desplome, que es una grieta-chimenea con dos cordinos blancos en sendos puentes roca que la delatan.

Fran ya en el desplome

Nada más superar el desplome, en el lado derecho se encuentra la raquítica reunión. Fran supera el largo y se planta en la reunión.

Antes de llegar al desplome Fran me fotografía desde este vertical largo. Se ve la amplia plataforma de la reunión anterior

Me toca subir. Enseguida llego al techito. Un clavo permite acometer el techo perfectamente protegido. Hay un cazo suficientemente bueno a mitad de techo que facilita mucho las cosas, pero no hay nada más donde agarrarse hasta el lado derecho del techo, así que hay que hacer un cambio de manos ligeramente delicado en dicho cazo. Tras el cambio de manos se llega bien al extremo derecho del techo donde te puedes agarrar; aunque el agarre en la grieta no es malo, tampoco es todo lo bueno que a uno le gustaría para poder elevar todo el cuerpo por encima del techo. Fran se ha cogido de la grieta y ha subido el techillo, pero yo descubro un segundo agarre un poco más a la derecha que facilita mucho las cosas cogiéndote de la grieta y de ese segundo agarre. Antes de remontar el techito hay un segundo clavo que permite proteger perfectamente esta salida. Al final el paso del techito será un V+ pero perfectamente protegido con los dos clavos y si se hace bien resulta relativamente fácil.

Voy progresando por las fisuras; es muy vertical pero, aunque no lo regalan,  se puede ir progresando sin excesivos problemas. Acercándome ya hacia el desplome toca irse en travesía ascendente hacia la izquierda. Esta travesía no es difícil aunque el ir un poco en adherencia te descoloca un poco mentalmente después de tantos metros de agarres.

Llego al desplome, bajo la grieta-chimenea por donde se supera, y empieza la fiesta. Me meto por la grieta chimenea a superarlo. Dos puentes rocas por fuera con cordinos permite proteger este tramo, pero aquí hay que apretar bien. La cuestión es que hay algún que otro agarre en el fondo de la grieta-chimenea, pero la mochila no me deja meterme lo suficiente como para usar esos poco abundantes pero deseados agarres. La única solución que me queda es ir progresando poco a poco con el cuerpo empotrado en la chimenea, con el agravante de que no se puede meter uno del todo en la grieta (¡maldita mochila!) y que el tramo encima está bastante desplomado.

Fran que me ve lo que me está costando remontar el desplome me echa amablemente un cabo de cuerda, pero le digo que no me hace falta, que lo voy a remontar sin ayuda. Avanzando de 10 cm en 10 cm en este trabajoso empotramiento de cuerpo en el que apenas puedes moverte, finalmente salgo a la reunión... o mejor dicho me quedo  prácticamente colgado junto a ella, porque la reunión es tan minúscula que no solo únicamente cabe Fran sino que incluso éste tampoco tiene mucha libertad de movimientos y le cuesta hasta girarse. El paso de la grieta desplomada con mochila sin poder usar los agarres internos de la grieta creo que bien se merece el 6a; la alternativa de subir quitándose la mochila o pudiendo llegar a ellos (por ser más flaco o llevar una mochila algo menos abultada) podría dejarlo en V+.


Largo 8 (V+): Largo durete y muy mantenido (que por despiste lo empalmo con el siguiente)
 
Me toca de primero. La cámara de fotos de Fran ya no permite hacer más fotos.

Como he comentado antes, me he quedado medio colgando junto a la reunión, así que en esta posición hacemos la redistribución del material y salgo cuanto antes de esta incomodísima situación. Esquivo como puedo a Fran y tiro por el inicio del largo, totalmente vertical, justo por encima de la reunión en una amplia grieta prácticamente sin agarres y con un arbusto en medio, pequeño pero que incordia lo suyo. Este inicio del largo no es nada fácil, pero como no hay ni donde ni cómo parar enseguida me planto en una pequeña repisa que hay unos cinco o seis metros por encima de la reunión y que va a ser el único respiro de este largo. Desde ahí hago una foto a Fran.
 
Foto desde el inicio del Largo 8 a Fran que está en la minúscula reunión 7.

Desde aquí se aprecia la enorme verticalidad de los últimos largos que hemos hecho. Es una verdadera flipada mirar para abajo y ver una verticalidad tan absoluta, con las anteriores reuniones justo debajo de tu misma vertical. Ambos lo comentamos porque llama mucho la atención.

Desde la repisilla en la que estoy hay que salir un poco hacia la izquierda y tirar para arriba. Cuando salgo a la izquierda estoy en un diedro (del lado derecho) de muy difícil progresión. Un metro más a la izquierda hace como una acanaladura, así que veo que la opción es sacar la pierna izquierda a esa acanaladura y subir espatarrado en oposición con una nervadura de roca entre las piernas. No lo veo nada claro, da "yuyu", es muy vertical, pero como no hay más remedio que continuar la vía me lanzo a hacer ese espatarramiento. Gracias a eso, y no sin esfuerzo y bastante tensión, voy progresando hacia arriba con la pierna derecha por el diedro y con la izquierda por la acanaladura. En algunos puntos el diedro se deja un poco y puedo llevar las dos piernas a él, pero enseguida tengo que volverme a espatarrar de nuevo debido a su hostilidad. Me resulta un largo divertido (eso cuando ya lo he acabado), pero durillo y de bastante tensión; Fran me comentaría después que le había parecido un largo tremendamente mantenido.

Llego a la reunión, en una repisa sobre una pequeña horcada, equipada únicamente con un cordino blanco en un puente roca. Debido a lo incómoda que era la reunión anterior no había podido consultar bien la información de este largo, así que cometo dos fallos: el primero que en el croquis esquemático, marca claramente que el diedro hay que evitarlo por la izquierda, así que es posible que si me hubiera ido más a la izquierda el largo hubiera sido algo más llevadero. Otra reseña habla de un paso bastante técnico que podría ser el de salirse más a la izquierda para evitar el diedro, pues este largo ni de coña se puede resumir en un paso tal y como lo hemos hecho nosotros.

El segundo fallo es que al ver una reunión tan pobre pienso que no debe ser la reunión y que se trata simplemente de un puente roca intermedio del largo y que la reunión estará más arriba.

Por tanto, por despiste me paso esta reunión y continúo.


Largo 9 (IV): Por fin algo un poco más fácil

Como he dicho antes, continúo yo de primero al haberme saltado la reunión 8.

Por la orientación y configuración de la vía, hasta ahora habíamos estado todo el rato en sombra (aunque el sol nos iba pisando los talones desde la reunión 6), pero a partir de aquí el sol nos da de pleno e íbamos a sufrirlo a base de bien.

Este largo resulta relativamente fácil y mi única preocupación es la de guiar bien las cuerdas para que no rocen por el pequeño ángulo que hace la vía, o mejor dicho el empalme de largos. Voy avanzando sin excesivos problemas hacia arriba. Hay muchos puentes roca pero con la historia de la minúscula reunión 7 se me ha olvidado cogerle a Fran los cordinos y cintas y se los ha quedado él; ninguno de los dos nos hemos dado cuenta hasta que he visto todos estos puentes roca. Solo tengo un anillo-cinta largo pero es el que tengo previsto usar para la reunión, así que hay que reservarlo. Voy subiendo con relativa facilidad.

Ya tenía yo la percepción de que llevo mucha distancia escalada cuando de pronto oigo a Fran que me avisa que queda poca cuerda. Veo que estoy a punto de coronar esta especie de espolón vertical en el que se desarrolla este largo; o al menos de llegar a una repisa, por lo que a pesar de la escasísima cuerda que me ha dicho Fran que me queda veo que llego. Si ahí está la reunión habré tenido suerte y si no tendré que improvisar una reunión, lo que aquí puede ser un pequeño inconveniente pero no un problema pues hay muchas posibilidades de poner cacharros.

Llego a donde había visto y efectivamente hay una reunión preparada, resultado de enlazar tres puentes roca con varios cordinos. Monto reunión allí y aviso a Fran para que suba; recordemos que Fran está en la reunión 7 y tiene que remontar dos largos: el mantenido y el fácil.

Al cabo de un rato, y ya recibiendo mi buena dosis de bronceado del sol, aparece Fran en la reunión. Mientras tanto yo he ido observando los croquis y en ese momento me he dado cuenta de que me he saltado la reunión y he empalmado dos largos.

Cuando llega Fran se lo comento y me recrimina bromeando que me vaya apropiando con largos de más y se los vaya quitando a él. Evidentemente lo dice de cachondeo.

La única cuestión es que ahora nos hemos descabalado y él va a continuar con los largos pares y yo con los impares. Seguimos teniendo la impresión de que llevamos buen ritmo y más ahora que de repente nos hemos encontrado que tenemos otro largo inesperado en el bolsillo.


Largo 10 (V): Coronar pequeña aguja con paso atlético al inicio de un diedro.

Le toca a Fran de primero. Como la cámara de fotos de Fran ya no era operativa y solo podíamos hacer fotos con la mía, Fran propone que se quede mi cámara de fotos el que vaya de segundo para que pueda hacer fotos desde la reunión al que va de primero. Me parece buena la idea, así que así lo hacemos a partir de ahora.

El largo se inicia con un corto cresteo por bloques que te lleva a la continuación de la pared. Una vez en la pared se recupera el tono vertical y se trata de coronar la aguja, al principio por un sistema de fisuras y bloques facilillo y luego por un marcado diedro que se distingue perfectamente desde la reunión. El recorrido es evidente y se resume en ir a buscar el diedro y coronar la aguja por él.

Fran va superando la parte inicial y cuando llega al pie del diedro me pregunta si es por ahí, «porque se ve muy cañero», según sus propias palabras. Yo creo que sí, pero tampoco estoy muy seguro, y mientras intento observar y pensarlo Fran ya se ha encaramado al diedro y me dice que es un paso de apariencia muy dura pero que en realidad no se saca tan mal como aparenta.

Fran iniciando el largo 10

Pocos minutos más tarde ya ha remontado el diedro y coronado la aguja. Se encuentra con que la reunión son un manojo de cordinos de "quita y pon" lazando la punta de la aguja. A Fran no le inspira mucha confianza y de hecho quita con suma facilidad el manojo de cordinos y lo levanta en el aire con los dos brazos por encima de su cabeza para enseñármelo. Intenta colocarlo en otro sitio mejor y al final acaba improvisando él una reunión un poco más fiable (aquí también perderíamos unos cuantos minutos).

Fran "peleándose" con la reunión 10
 
Un zoom

Cuando está todo listo me toca el turno de subir. Hasta el inicio del diedro se sube más o menos fácil. Cuando llego al inicio del diedro entiendo completamente las preguntas de antes de Fran: el arranque está liso y desplomado y tiene una apariencia de bastante duro. Ficho un agarre que cojo con fuerza y me lanzo hacia arriba... efectivamente el paso tiene su miga, pero no es tan fiero como aparenta ser de primera impresión. El resto del diedro se va dejando hacer hasta que corono la aguja y me junto con Fran en la reunión.


Largo 11 (IV+): Pasos de "cuerda floja" y posterior flanqueo perdidizo en busca de la reunión

Me toca de primero. Entramos en la zona de la vía más complicada de seguir, bajo mi punto de vista: son este largo y los dos siguientes. Hasta ahora solo nos había costado un poco identificar la reunión 3 y el largo 4; el resto lo habíamos podido seguir más o menos bien con los croquis y descripciones que llevo.

Lo primero que veo es que hay que hacer un cresteo por un filo de cuchillo y patiazo a ambos lados. A los dos nos vienen enseguida bonitos recuerdos de la arista Cabrones-Torrecerredo (Arista integral Cabrones-Torrecerredo). Pero esto se ve muy afilado, y no se ve ninguna posibilidad de poner ningún seguro.

Afinando la vista vemos un clavo justo al finalizar esta prueba de funambulismo que nos va a tocar superar, pero antes de él no hay nada. Escudriño cuidadosamente todo a ver sin hay algún otro clavo o si hay posibilidad de pasar medio colgado por alguno de los dos lados, pero no se ve otra alternativa que pasar por todo el filo.

A punto de iniciar los pasos "funambulistas" del inicio de este largo

Salgo para allá y voy recorriendo el filo hasta que estoy en el otro lado y llego al clavo. El poner el seguro en el clavo y pasar la cuerda es un alivio. Ahora hay que coger un largo flanqueo por la derecha. El inicio de este flanqueo es casi de pasar en travesía bien cogido de manos y pies en adherencia (y patiazo), pero el hecho de tener ya un seguro da mucha tranquilidad.

Llego al clavo que permite colocar el primer seguro

Los croquis que tengo no aclaran mucho hacia donde hay que ir, solo que por la derecha, y la  reseña que llevo simplemente pone "flanquear por la derecha y seguir por el terreno más evidente hasta la reunión": ¡toma ya! Está claro que hay que ir superatento si quiero encontrar la reunión pues con esas explicaciones lo mismo acabas en la cima que en Benidorm.

Empiezo a subir flanqueando por el lado derecho el marcado espolón que está rematado con un techo y tanto destaca desde la reunión. Fran me empieza a insistir en que ponga ya un seguro, que llevo varios metros sin poner nada, pero la verdad es que todo está un poco guarrete, con roca rota y hierbajos, con lo que no veo emplazamientos buenos; podría apañar algo, pero como de momento se va progresando bien siempre pienso «esto está un poco guarrete; a ver si un poco más arriba hay mejores sitios para poner un seguro»; pero a Fran le estoy poniendo nervioso y me insiste, así que al final me paro a poner un seguro lo mejor que se pueda.

Flanqueando por el lado derecho
Un zoom. Más arriba se ve el arbolillo que cito.

Sigo flanqueando por el lado derecho pero pegado a la pared del espolón, subiendo. Paso una especie de pasillo estrecho entre rocas, en el que la mochila parece querer agarrarse y no seguir, y salgo a un pequeño árbol. Supero la pequeña placa que hay por su lado derecho, ya que por el izquierdo parece más fácil pero el árbol apenas deja hueco, y tras superarla observo: parece verse la reunión. La verdad es que no estoy muy seguro de que sea la reunión, pues hay que afinar la vista y tener algo de imaginación, ya que  no se ve una clara repisa ni nada de eso, pero sí parece que se intuyen clavos en un trocito liso de pared.

Está más o menos a mi misma altura, así que para llegar a ella ya no hay que ganar más altura, sino ir más o menos a la misma altura haciendo un tramo en travesía.

En cuanto empiezo a hacer el tramo de travesía ya distingo que efectivamente son clavos y se trata de la reunión, lo cual me anima bastante. Sigo avanzando en travesía, que puede que tenga algún pasito pero tampoco resulta difícil.

En travesía, ya cerca de la reunión

Finalmente llego a esta extraña reunión: dos clavos, un parabolt y una especie de clavo cementado en la roca (pero que no creo que tenga la profundidad de anclaje de un químico), este último con un pequeño cordino. Toca elegir, pues usar los cuatro anclajes para la reunión me parece demasiado y va a quedar muy lioso, sobre todo por su disposición, así que empleo tres.

La reunión es minúscula, así que me acoplo como puedo y aviso a Fran cuando le tengo asegurado para que suba.

Fran, que hace rato que ha tenido que quitarse la camiseta del tremendo calor que estamos sufriendo ya, va remontando el largo y aprovechando para hacer alguna que otra foto por el recorrido.  

Vista en primera persona de Fran, que ha llegado al clavo tras haber pasado el "filo del cuchillo"...

... y fotografía el patiazo

La tarea de irle recogiendo cuerda es un auténtico suplicio para mí, pues en esta reunión no tienes mucho movimiento y estás casi pegado a los clavos. Además el sol está pegando de lo lindo y yo aquí casi sin poderme mover. Los tramos en los que Fran va más rápido no puedo recoger cuerda al ese ritmo y tiene que tener un poco de paciencia. Quizás lo más práctico hubiera sido colgarme de la reunión con el cuerpo vencido hacia atrás, pero por costumbre no me gusta colgarme de las reuniones, salvo que sea necesario, y menos si tienen algún clavo que se mueva un poco y te pueda hacer dar un respingo para atrás.

Esperándole en la reunión

Fran va siguiendo lógicamente el mismo recorrido que yo, aunque él y su mochila abultan algo menos y parece que pasa algo mejor el pasillo estrecho entre rocas. Finalmente llega a la reunión y como no hay mucho hueco hacemos rápidamente el traspaso de material y la consulta del croquis para intentar adivinar por dónde va el siguiente largo.


Largo 12 (V): Navegando por la pared

Le toca a Fran de primero.

Se ve un cordino hacia la derecha de la reunión y otro más allá. Según la información que tengo, hay que salir un poco hacia la derecha y subir por una especie de canal abierta, donde al poco hay que salirse por la izquierda y ya más arriba volver hacia la derecha en busca de la reunión... puff... ya de primeras se ve que no va a ser fácil "navegar" por este largo.

Sale Fran, que va hacia la derecha en busca del primer cordino que se ve, lo chapa y continúa hacia el segundo cordino.

Fran iniciando el largo 12

Cuando llega al segundo cordino, me da la impresión de que se ha ido demasiado a la derecha y le aviso a Fran que tira para arriba. No lo puedo asegurar, pero tengo la impresión de que ese segundo cordino no es ya de la vía.

Desde ese segundo cordino Fran ya tira directo para arriba y cuando sube un poco le indico que tiene que irse hacia la izquierda. Estoy casi seguro de que Fran se está yendo demasiado hacia arriba, pero Fran me indica que hacia la izquierda no ve forma de pasar y que lógicamente tiene que seguir hacia arriba.

Un poco más arriba Fran ve la oportunidad de irse hacia la izquierda. Para ello tiene que hacer un paso que a él le parece que ha sido el más duro de la vía, según comenta.

Una vez superado esto, sigue lo que tenía indicado en mis apuntes: subir primero hacia la izquierda y luego hacia la derecha en busca de la reunión. Llega a la reunión y me avisa para que suba cuando tiene todo preparado. 

Subo siguiendo los pasos de Fran. No tengo muy claro que Fran haya ido por el sitio correcto, pero tampoco se ve claro por donde podría ser el sitio correcto; el caso es que ha llegado a la reunión y en definitiva es lo más importante.

Cuando llego al paso que había comentado Fran que le había parecido el más duro de la vía lo resuelvo sin muchos problemas; la cuestión es la de siempre: he usado algún agarre que Fran no ha debido de ver. Es un tema que ocurre con frecuencia en esta vía: hay muchos agarres que si no te fijas mucho no se ven, pues están como camuflados y visualmente aparenta estar la roca lisa cuando en realidad hay una lajita a veces hasta con muy buen canto.

Sigo remontando el largo. Desde el punto anterior ya sí que parece un recorrido algo más lógico. Finalmente llego a la reunión.

 
Largo 13 (V): Pasito al inicio y final algo "entretenido"

Me toca de primero.

Estoy medio mareado del sol, y probablemente de deshidratación y comer poco. Fran está también achicharrado. Me dice que me dé un respiro antes de acometer el siguiente largo. Hasta me medio meto en una grieta para intentar pillar algo de sombra, pero no consigo mucho, así que tras unos minutos de recuperar el aliento del largo anterior pero nada más, me decido a seguir pues permanecer más tiempo en esta chicharrera no es la mejor solución. Adicionalmente tengo los pies ya con un dolor que empieza a hacerse insoportable; me he ido quitando los pies de gato en todas las reuniones, menos en las que pasaba de largo, pero no ha sido suficiente.

Justo encima de la reunión, por en medio de la aguja que tenemos justo encima de nosotros, sale una especie de diedro abierto que tiene un clavo. Por el lado izquierdo de esta especie de aguja que tenemos en nuestras narices se forma también otro diedro, un gran diedro con el muro que va a continuación de la aguja por el lado izquierdo y que sube a una especie de collado. El croquis esquemático marca claramente que hay que evitar el diedro por la izquierda (aunque no se a cuál se refiere exactamente) y mis apuntes también dicen lo mismo, literalmente: "Salir de la reunión por la izquierda evitando el diedro que está encima".  Además veo un cordino bastante a la izquierda, en el muro de la izquierda, que parece indicar que se sube por ahí por el muro hacia el colladito. Alguna foto he visto de alguna cordada que sube justo por encima de la reunión por el clavo del diedro de la aguja, por lo que es otra alternativa que según parece sale similar en grado de dificultad máximo, un V que debe estar en la zona del clavo pues luego visualmente parece que afloja.
 
A Fran todavía le queda algo de humor en este infierno de calor

Me voy entonces hacia la izquierda para encarar la subida por el muro, por donde marca el citado cordino. Una vez al pie de la vertical del largo, a la que se llega fácilmente andando, me encuentro con una placa con pocos agarres donde hay un paso que debe ser de V. Pruebo varias posturas pero no doy con nada que me convenza; el calor ya me está afectando mucho y ya no puedo ni pensar. Además el terrible dolor en los dedos gordos de los pies me impide apoyarme bien en los pies de gato. Finalmente me lanzo y saco el paso con agarres pequeñitos y pies en adherencia.

La continuación es algo más fácil, pero hay que ir "navegando" un poco por el muro, de tal forma que en la zona siguiente me voy hacia el diedro de la derecha y un poco más arriba me despego un poco de él.

Llego a la zona de arriba y veo dos posibilidades de coronar el colladito: por la derecha o por la izquierda. Por la derecha es pegándose hacia el diedro y aparenta ser algo más fácil, pero no veo posibilidad de meter seguros y el coco empieza a no estar en condiciones para ir sin seguros, así que pienso que mejor subo por la izquierda, que a lo mejor es algo más difícil, pero veo un par de grietas donde poner seguros.

Me tengo que espatarrar bien para coger buen apoyo de pies y buen equilibrio. Fran aprovecha esos momentos para fotografiarme.

Espatarrado en la parte final del largo

Un zoom

En cuanto puedo coloco un friend en la grieta. No ha quedado muy bien colocado, pero es suficiente para aguantar una caída y prefiero seguir para arriba, pues tampoco es que esté muy cómodo.

Unos pasos más arriba llego al colladito. De primeras me sorprende no ver una reunión ni nada, pero parece claro que es el sitio de reunión. No obstante, en cuanto me asomo un poco yendo al lado derecho me encuentro de narices con un grueso cordino en un puente roca que constituye la reunión. Además avisto como unos 10 metros más abajo una repisa relativamente amplia que está en plena sombra... se me van los ojos hacia ella. En vez de hacer la reunión en el cordino, opto por montar una reunión un poco más a la izquierda para evitar el roce de cuerda y la pequeña vegetación que incordia aquí., así que vuelvo a donde estaba antes y aviso a Fran cuando está todo listo para que suba.

Fran va remontando el largo. Tiene una estampa magnífica, pero la cámara de fotos la tiene él, así que recurro a hacer una foto con el móvil aunque ésta quede un poco más cutre y menos vistosa.

Fran remontando el largo 13

Cuando llega Fran le comento lo de la repisa a la sombra, se la enseño y le digo que necesito quitarme este horroroso calor de encima y también urgentemente dar un descanso prolongado a mis pies, sin los pies de gato. Fran está de acuerdo, así que optamos por el descanso.

Descuelgue hasta repisa para descanso largo:

Bajamos a la repisa destrepando y encordados aunque vamos tirando hacia abajo la cuerda de cualquier manera... el calor no te deja ganas de nada. El destrepe resulta un pelín más delicado de lo que parecía desde arriba, pero finalmente aterrizamos en la repisa. Al tirar de la cuerda me dan hasta pequeñas contracturas en el antebrazo

Verdaderamente ha sido un acierto, pues se está de lujo. Nos quitamos los pies de gato y nos sentamos. Bebemos algo de agua y comemos alguna barrita, gominolas y frutos secos.

Estamos superrelajados descansando aquí al fresco y charlando.

En un momento dado se nos ocurre mirar la hora. Con eso de que teníamos la sensación de ir a buen ritmo y de que no íbamos a tener problemas para acabar la vía de día no nos habíamos preocupado en exceso por la hora, en parte porque no llevamos relojes y el móvil lo llevamos apagado. Enciendo el móvil y me llevo la sorpresa: ¡son más de las 17:30! ¡Jolín, con eso de pensar que íbamos bien al final nos hemos ido relajando y se nos ha hecho muy tarde! La ventaja es que ahora el calor ya no aprieta tan espantosamente. Pero tenemos que ponernos en marcha cuanto antes, pues ya nos está pillando el toro.

Lo primero que tenemos que hacer es desenredar la cuerda, que la habíamos tirado de cualquier forma. ¡Vaya lío! Nos lleva un rato. Finalmente nos ponemos mochilas y todo y estamos listos para continuar... pero ya son más de las seis de la tarde. Hemos pasado de ir sobrados a ir pillados de hora. Pero ahora estamos bastante más recuperados y el calor sigue apretando pero menos.

Largo 14 (V-): Navegar por el espolón hasta coronar

Le toca a Fran de primero. Este largo lo iniciamos más abajo de la reunión, concretamente desde la repisa donde hemos descansado, así que para nosotros tendrá unos 10 o 12 metros más.

Fran escala sin dificultades, aunque con algún golpecillo en la espinilla, hasta la reunión desde donde empieza este largo, chapa y continúa. Al principio se va por el lado derecho del espolón, con algún pasito que tampoco presenta excesivas dificultades, y luego se continúa el espolón más o menos por el filo, por donde se va viendo más claro. Este largo ya se sigue bastante bien.

Fran en nuestra versión ampliada del largo 14

Fran llega arriba del espolón y me avisa para que suba cuando está todo listo.

Remonto hasta la reunión de inicio del largo. Hay que continuar por el lado derecho del espolón, lo que ya queda evidente por el emplazamiento de la reunión. Enseguida viene algún pasito que tampoco da excesiva guerra y continúo relativamente fácil hasta alcanzar la cima del espolón y juntarme con Fran en una amplia plataforma.


Largo 15 (V): Paso de bloque y luego más fácil hasta instalación de rápel

Me toca de primero. Este largo de primera impresión tiene un aspecto raro. Primero hay que hacer un delicado paso de bloque para coronar la pared que tienes nada más empezar el largo. Una vez coronada la pared, debes seguir un corto cresteo horizontal para continuar un tramo de escalada relativamente fácil hasta coronar la aguja.

Me acerco a la pared inicial, ubicada unos 5 metros más adelante de la reunión... uff, qué aspecto, muy lisa, sin agarres y sin posibilidad de meter seguros, dando impresión de cañera. A estas alturas lo último que me apetece es meterme en un V de los de aquí (y con apariencia de ser cañero) sin ningún seguro; ni siquiera el reenvío, que no lo hemos puesto al haber empezado el largo recorriendo los 5 metros de plataforma horizontal. Algún cachondo ha puesto un pedrolo al pie de esta pared, se supone que para ganar unos centímetros, pero no veo que sirva de gran cosa pues parece que hay que lanzarse hacia arriba como sea (y queda bastante alto) para intentar llegar a la parte superior, que Dios sabe qué agarres tendrá (el coco empieza a no estar ya para muchas incertidumbres de ese tipo) y si no consigues aferrarte el ostión puede ser impresionante, pues no olvidemos que estamos en una arista.

Lo primero que se me ocurre es que se traslade Fran alargando la reunión hasta aquí para poder portearme (colocarse debajo de mí, para pararme con sus brazos si me caigo), pero esto supone un pequeño follón y ya no estamos para perder mucho tiempo. Empiezo a inspeccionar todas las posibilidades a izquierda y derecha y no veo nada claro, hasta que me doy cuenta que se puede hacer un flanqueo por el lado izquierdo, así que allá voy. Luego he visto fotos por internet de gente que ha hecho lo mismo que yo, así que no he inventado nada y debe ser bastante más habitual de lo que yo creía.

Una vez superada toda esta parte inicial, en la que no se gana altura, llego a la segunda parte de este largo. Se escala fácil hacia la cima de la aguja, pero un poco antes de coronarla veo una segunda cima a la derecha en la que veo una instalación de rápel hecha con multitud de cordinos, así que allá que voy.

Monto reunión y aviso a Fran para que suba. En unos minutos Fran llega y se junta conmigo.


Rápel intermedio

Empalmo las cuerdas y las lanzo. Primero rapelo yo, que tengo autobloqueo y Fran tendría que preparar un Machard si quiere bajar con seguridad. Es un rápel prácticamente volado en su totalidad, por lo que se baja rápido y bien.

Aterrizo en una especie de oasis de tierra, vegetación y sombra. ¡Qué bien se está aquí! Es un lugar a tener en cuenta para un posible vivac. Me desplazo hacia adelante, pues luego hay otro escaloncito pequeño, de 2 metros, que así nos lo quitamos también con el rápel.

A continuación baja Fran y enseguida nos juntamos de nuevo.

Fran iniciando el rápel

Una vez abajo recuperamos las cuerdas, que se nos vuelven a liar pues sobra bastante cuerda. Se nos va otro buen puñado de tiempo entre desliar, recuperar cuerdas y trasladarnos al vecino colladito donde empieza el siguiente largo, que está a muy escasos metros pero hay que trasladarse.


Largo 16 (V): Espolón algo tumbado con inicio ligeramente apretado

P.D.: cuando digo "Espolón algo tumbado" es muy relativo, pues me refiero con respecto a la gran verticalidad de la vía.

Le toca a Fran de primero, que acabaría empalmando este largo con el siguiente.

La "chuleta" que tengo dice que hay que subir por el espolón que se forma desde la misma reunión. Se ve un pequeño espolón, así que de primeras pienso que debe ser por ahí, aunque veo un poco rara la continuación por ahí y no veo claro por donde sigue la vía. Pero según le estaba dando vueltas al tema, Fran localiza un cordino rojo en el lateral de un gran lomo de roca que se forma por la derecha. Ya sí que empiezo a dudar del todo hasta que miro el croquis esquemático y ahí lo veo claro, pues está dibujada la canal que tengo enfrente y que hay que ir por el lado derecho, es decir, por el gran lomo de roca... Todo vuelve a encajar.

Fran sube unos metrillos por la canal y ataca el lomo por su lado izquierdo, tras haber asegurado en el cordino rojo. Parece que sí que es por ahí, aunque le entren dudas al encontrarse algunos pasitos. Tarda unos cuantos minutos en hacer reunión y ha gastado casi toda la cuerda, por lo que ya sospecho que me ha devuelto la "jugada" del largo 9 y ha empalmado con el largo 17.

Cuando me avisa que suba remonto los metrillos de canal y empiezo a atacar la loma por su lado izquierdo. El objetivo es llegar a lo alto de la loma para seguir avanzando por todo lo alto, pero para alcanzar lo alto de la loma no se sube totalmente en transversal sino que también se va avanzando; cuando estás allí se ve muy claro. Esta parte hasta llegar a lo alto de la loma tiene algún pasito que otro de grado V que te obliga a ir un poco mas tranquilos de lo que vamos, pues estábamos empezando a acelerarnos al ver que se nos iban a acabar las horas de luz.

Una vez en lo alto de la loma se ve un árbol que claramente debía ser la reunión 16 y marcar el inicio del largo 17, pero Fran se ha saltado esta reunión, como sospechaba.


Largo 17 (IV). Continuación fácil del espolón

Paso el árbol y continúo por todo lo alto del espolón. Este largo es fácil, tanto de dificultad como de seguir (por el filo del espolón) y da un respirillo, así que sin muchas más historias en pocos minutos me planto en la reunión, en un colladito.

Esta reunión, si no recuerdo mal, está equipada con parabolts. Fran se ha liado un poco porque de primeras no los ha visto, ha montado su propia reunión y luego ha visto los parabolts, que estaban en el lado izquierdo el colladito. En esta reunión , un poco más adelante andando, se encuentra el famoso vivac que tiene esta vía.


Reflexiones antes de iniciar el largo 18:

Hemos llegado a la reunión del famoso vivac, y es el momento de consultar de nuevo la hora y tomar decisiones... ¡las 20:30!... ¡buahhh!... ni de coña llegamos a cima de día si nos quedan 4 largos y poco más de 1 hora de luz. Le insisto a Fran en que debemos quedarnos a vivaquear y que además nos vendrá bien pues estamos ya bastante cansados y mañana haríamos los cuatro largos que nos quedan y el descenso más frescos. Además queda todavía "grado" y no me veo haciendo V+'s de los de aquí a la luz de un frontal.

La respuesta de Fran es distinta; algo así como: "no me veo aquí haciendo vivac casi sin agua y maldurmiendo. Prefiero tirar a muerte como sea y dormir abajo. No te preocupes por los dos largos que te quedan de primero que te los hago yo". En ningún momento se me había pasado por la cabeza que Fran me hiciera esos dos largos de primero, pues si yo estoy bastante cansado y saturado de escalar supongo que él también lo estará, pero ante ese ofrecimiento y dado que me está forzando un poco a seguir, no puedo resistirme a su propuesta. Por otra parte tenía razón en lo del agua: yo guardaba celosamente un litro de agua ya fuera para el descenso o para un vivac, pero evidentemente si hacíamos vivac íbamos a pasar sed con solo un litro de agua para los dos... y pensar en la fuente de múltiples caños que hay en Font de Moli, junto al coche...

El otro problema, si conseguíamos hacer cima era bajar de ella hasta el coche. Una vez se alcanza la pedrera es largo pero no hay mucha pérdida, pero el llegar hasta el rápel que te deja junto a ella es una tarea que puede resultar complicada de día, así que de noche ya debía ser la repera. No obstante Fran confía ciegamente en mí. Yo también tengo el presentimiento de que podría ser capaz de guiar con éxito la bajada; no en vano he estado varias veces por el Puig Campana (tanto de escalada como de senderismo) y algo conozco el entorno, aunque no conozca en concreto la cima del Pic Prim donde acaba la vía ni la forma de descender de ella nada más que por una escueta explicación.

Fran me dice que lo razonable y prudente es lo que yo digo de quedarnos a vivaquear, pero que prefiere que nos lancemos a tumba abierta a escalar todo lo que podamos antes de que se vaya la luz. A Fran le había informado de que los dos últimos largos estaban chapados con parabolts, lo que le da más confianza aún. En una cosa tiene razón, que mientras la situación sea reversible podemos intentarlo. Finalmente acepto.

Largo 18 (V+): Espectacular largo por vertical y afilado espolón

Trasladamos la reunión al inicio del siguiente largo, pues está desplazado unos cuantos metros que se hacen andando. A la izquierda del inicio del largo se ve el famoso vivac ¡amplio y con su murete de piedras y todo! Todo un lujo.

Sale Fran rápidamente. Este largo es cañerillo, así que mejor que haya ido primero Fran que irá más rápido, pues a mí ya me cuesta lo suyo pensar cada paso complicado. Pasa un paso y me comenta Fran que ya ha pasado el "paso" de este largo... pero no, ese solo era un paso de V, y poco más adelante se pone de V+. Al rato me dice que lo voy a flipar con en largo, que es realmente espectacular. Poco después me avisa que ha hecho reunión y que suba.

Empiezo el largo, que va creciendo en dificultad. Voy escalando a toda pastilla, pensando más en que en poco rato estaremos a oscuras que en preocuparme de no caerme. Va por la derecha de un espolón totalmente vertical. La escalada es totalmente vertical con agarres regularcetes y física.

Llego a un clavo y muy poco más arriba otro. Evidentemente esta sí que es la zona V+. La verdad es que no me lo pienso mucho y lo supero, pero son un par de pasos que dan su guerra y cierta sensación de que te vas a caer. No obstante está muy bien protegido por los dos clavos.

Hasta aquí el largo es bien bonito, pero... un poco más arriba el largo se pasa al filo del espolón... espectacular... ¡Que ambientazo! Es como escalar por el filo de un cuchillo en vertical. Me recuerda muchísimo al largo 7 del Espolón Elegant (Puig Campana. Vía "Espolón Elegant" (350m, 8 largos, 6b+)). Sencillamente antológico, incluso mejor que aquél, pues este es algo más picante en dificultad.

Finalmente llego a la reunión y me junto con Fran. Vamos un poco acelerados.


Largo 19 (IV): Otro largo un poco más tranquilo

Enseguida nos hemos preparado y hacemos este largo, que debiera ser de tranquilo y de relajar tensiones, pero que realizamos a toda pastilla. El largo va por una arista-espolón que no presenta ninguna complicación ni de seguir ni de dificultad de escalada. Finaliza en una amplia plataforma. Ya habréis observado que desde el rápel se acabaron las fotos... no hay tiempo.

 
Largo 20 (V): Largo mantenidillo en la oscuridad de la noche

En la plataforma donde hemos finalizado el largo anterior se nos está echando la noche encima a cada segundo. Hay que trasladarse a unos parabolts que hay andado unos metrillos en el lado izquierdo. Mientras nos trasladamos la oscuridad se va haciendo patente.

Observo que en esta plataforma es posible apañar un vivac, así que vuelvo a decirle a Fran que considere de nuevo el tema de vivaquear. Quedan dos largos, de los cuales el último no tiene problema, pues, aunque alguna reseña le da el V+, sé que hay unos pasitos al inicio que conozco por fotos y luego se pone bastante fácil hasta la cima. En cuanto al que nos toca ahora parece mantenidillo y alguna reseña también le da el V+ (aunque como veis en mis encabezados, ninguno de estos dos últimos largos considero que llegue al V+). Ahora mismo, por tanto, el tema que me preocupa es el ser capaces de escalar con frontales este largo que según reseñas es mantenido y llega a V+.

Fran lo razona bastante bien: Si está chapado el seguir el largo no debe presentar excesivos problemas y si por lo que sea no puede pasar de algún punto se descuelga dejando incluso los cacharros puestos para continuar mañana. Me deja bastante convencido, así que nos ponemos manos a la obra.

Ahora ya no tenemos ninguna prisa, pues estamos totalmente a oscuras. Con los últimos resquicios de luz hemos sacado los frontales e incluso yo me he comido una barrita que me hacía falta urgentemente. Le cedo a Fran mi frontal, adquirido recientemente precisamente para este tipo de marrones: un SEO 5 con 180 lúmenes focalizables y un alcance de 120 metros... aunque ya probé que es una pasada, ahora sí que vamos a ponerlo verdaderamente a prueba. Fran por su parte me pasa su frontal.

Fran va escalando el largo. Se ve el focazo de luz mirando para todos los lados. Me va informando cada vez que localiza una chapa, como si fuera una pequeña conquista; eso nos va dando ánimo a los dos, aunque tampoco estamos nada preocupados, ya que consideramos que tenemos perfectamente controlada la situación, pero en el fondo son avances hacia la meta final.

Le lleva su tiempo recorrer el largo, lo cual es bastante lógico y además como he dicho antes ya no tenemos ninguna prisa. Yo le informo de cuando ha pasado los 30 metros de cuerda, para controlar la longitud del largo, que según reseñas es de unos 40 metros. Ya debe estar cerca de la reunión y a Fran le entran alguna duda de por dónde se encamina el largo, así que  me pregunta que si el siguiente largo sale a derechas, porque ha visto una canal que sale por ese lado, a lo que le contesto afirmativamente. Esto le sirve para encaminarse correctamente hacia la reunión hasta que se topa con ella.

Me avisa cuando ya puedo subir. La luz del frontal que le he dejado es espectacular, ya que desde la reunión 20 me ilumina a mi que estoy en la reunión 19 y casi veo más que con el frontal de Fran, que encima lleva las pilas medio gastadas.

Empiezo a subir el largo. De la reunión hay que salirse uno o dos metros en travesía a la izquierda y luego más o menos seguir todo recto para arriba. El largo empieza a apretar ya desde el principio. Voy subiendo siguiendo la cuerda y enseguida voy localizando parabolts, que además en muchos casos tienen un cordino pasado, lo que ayuda para localizarlos.

Escalar ahora es una auténtica gozada pues después de toda la enorme chicharrera que hemos pasado hoy, ahora no solo es de noche y refresca un pelín, sino que sopla una brisa marina que es todo un placer que se te cuele por dentro de la camiseta intentándote hacer cosquillas. Esto me ha reactivado muchísimo y ahora soy otro.

La dificultad es mantenidilla en el V, pero las manchas de magnesio de Fran y las sombras que hacen los frontales sobre la roca ayudan a ir localizando agarres. Eso sí, los pies los llevo en sombra casi totalmente, pues el frontal de Fran que llevo con las pilas medio gastadas no alumbra un pijo, así que apenas me sirve para las manos y gracias; además la verticalidad inevitablemente me hace ir bastante pegado a la roca y eso provoca que en muchos momentos me haga sombras en los pies y ya no es que vea poco, es que no veo absolutamente nada.

En esta situación voy poniendo pies totalmente a ciegas... unas veces al tacto, otras simplemente los pongo en el primer sitio que pillo en adherencia y tiro de brazos como puedo, pues encima el largo es bastante vertical y físico. Desde luego que Fran tiene un mérito enorme por haber hecho este largo en versión nocturna, pero hacerlo en mis condiciones, con un frontal normalito y que encima alumbra menos que un mechero al llevar las pilas medio gastadas, aunque sea de segundo también tiene su historia.

Finalmente llego a la reunión... jolín, menos mal que tengo controlado el siguiente largo y estoy seguro que no nos va a tocar dormir aquí, porque... ¡no cabe ni uno!; de hecho, Fran está muy malamente en ella . La reunión tienen dos parabolts y un tercero que se supone que está pensado para el reenvío del siguiente largo. Me tengo que quedar medio colgando al lado de la reunión por lo mínima e incómoda que es, hasta que se vaya Fran. No hay mucha sensación de vértigo porque no se ve nada.


Largo 21 (V-): Corta canal que va de más a menos y lleva a cima

El siguiente largo sube por una canal que sale un par de metros o tres a la derecha de la reunión y sube directa a cima. 

Fran sube. Mientras tanto yo me acoplo como puedo en esta incomodísima reunión dejando la longitud del cabo de anclaje en el punto exacto en el que me permite estar menos incómodo dejándome colgar en los parabolts de la reunión.

Fran me indica que hay una reunión enseguida cuando subes un poco por la canal pero que se la va a pasar pues ya es terreno fácil y la cima está cerca. Un poco más arriba localiza un parabolt donde ya sí que aparenta acabar la vía pues el terreno ya se va volviendo horizontal y decide acertadamente hacer reunión allí.
 
Subo yo y enseguida me meto en la canal. El inicio de la canal tiene unos "pasitos" pero que no creo que lleguen al V y que están bien protegidos con parabolts. Hay un pequeño estrechamiento con agarres malillos en el que encima hay un arbusto en medio que incordia lo suyo. Metido en este paso intento recular un pelín y me quedo medio insertado en el arbusto por una rama que se me ha metido por la pernera del pantalón, así que irremediablemente tengo que tirar para arriba y olvidarme de recular.

Enseguida la inclinación baja bruscamente y de ir rozando el grado V pasamos a un grado III y a los pocos metros veo la reunión de la que me hablaba Fran. Este tramo se sube muy rápidamente así que pronto me reúno con Fran. ¡Fin de esta interminable vía! 


Cima

Nos felicitamos mutuamente por el éxito. Estamos muy contentos. ¡Menuda aventura! ¡Y todavía queda la bajada!

Son las 23:30. ¡Vaya horas! Pero ahora mismo nos da igual. Como si tenemos que dormir aquí; que por cierto no es mala opción para el que tenga problemas para bajar. El amanecer visto desde aquí arriba debe ser un espectáculo bien bonito.

Después de quitarnos urgentemente los pies de gato, nos damos un pequeño festín de agua y picoteo, incluyendo bolsa y pico de cacahuetes garrapiñados, nuestro habitual premio por acabar una vía y que en esta ocasión llevo en dosis aumentada, pues la misma lo merece.

Estamos disfrutando como enanos picoteando aquí en la cima, sonrientes, con una agradable y fresca brisa marina y 1300 metros de altitud más abajo que nosotros las luces de Benidorm, Finestrat, Villajoyosa, Alicante... Un bonito espectáculo que encima se ve con mejores ojos después del duro día de hoy.

Cuando nos hemos satisfecho más o menos de comer y beber algo, dejamos las cosas y nos acercamos a la cima, a escasos metros de donde acaba la vía, a hacernos la foto de rigor, aunque esta vez con flash, je, je, je.

Foto en la cima del Pic Prim

Volvemos a recoger nuestras cosas. Recogemos cuerda y todo y ya estamos listos para intentar bajar de aquí, a ver qué tal se nos da.


El historiado descenso

Nos hemos intercambiado de nuevo los frontales, pues el descenso lo voy a guiar yo. Lo único que tengo son unos apuntes que dicen literalmente lo siguiente:

"Al terminar la vía. Seguir por la cima una linea de pequeños hitos. Esta conduce hasta casi casi la otra cima. Justo antes de subir a esta segunda cima. Girar al Sur donde por una campa pedregosa se baja de forma muy inclinada. Tras este descenso seguir hacia el Este en busca de un nuevo collado. En este collado encontraremos dos hitos monolíticos, al alcanzar el más alejado girar de nuevo hacia el Sur(más o menos), y descender de nuevo por terreno suelto hasta una nueva faja que habrá que seguir por terreno poco evidente pegado a la pared. Tras caminar unos metros en horizontal habrá que encontrar la línea de rápel, con una sirga." 

Desde luego que por aquí no hemos visto nada de hitos... ni pequeños ni grandes. Y lo de seguir por la cima no especifica en qué dirección... ya empezamos... Esto me está dando mala espina y va a haber que irlo descifrando poco a poco.

Como dice eso de que "·conduce casi casi a la otra cima", me imagino que se refiere a una punta que hay más al norte, tras la brecha del Portell... ¡menos mal que me conozco algo esta morfología, porque de noche no se ve nada!

Volvemos a donde nos hemos hecho la foto y por lo tanto tiro hacia el norte por lo que sería la arista. No se ven hitos ni senderos ni la madre que los parió... lo cual de primeras no me da muy buenas sensaciones. El recorrido por la arista es fácil, yendo más bien por la vertiente este, ya que por el oeste caen precipitadamente las paredes. También hay que ir esquivando la vegetación.

Después de un rato de andar, se intuye, gracias a la penumbra del frontal la citada segunda cima. En ese momento giro a la derecha y se ve bajada con piedra suelta, que parece corresponderse con la "campa pedregosa" de la reseña. Enseguida localizo lo que parece un difuso sendero y lo empiezo a seguir. Esto ya pinta algo mejor.

Vamos bajando por esta zona pedregosa que va más o menos zigzagueando. Las luces de la costa me permiten estar en todo momento perfectamente orientado sin tener que recurrir a brújula ni nada. El senderillo va tomando generalmente direcciones sur y este alternativamente en su zigzagueo, aunque a veces también dirección norte... no encaja del todo con la descripción pero sí que se parece si no lo tomas al pie de la letra.

Lo de buscar el collado que cita a continuación es casi ciencia ficción en esta oscuridad, así que me fijo en lo que dice de "encontraremos dos hitos monolíticos". Voy con mil ojos, a la vez que me pregunto ¿qué narices será eso de "hitos monolíticos"? . De repente veo una especie de hito en forma de columna afilada... no hay duda de que "eso" es uno de esos hitos monolíticos. Voy hacia él y pocos metros más adelante está el segundo... esto pinta bien.

Ahora dice "al alcanzar el más alejado girar de nuevo hacia el sur"... vamos a ver... si ahora vengo del sur, pues he llegado a él en dirección norte, ¡no tiene sentido que ahora vuelva a ir hacia el sur, pues es volver por mis mismos pasos! Aquí la descripción hace aguas y va a tocar romperse un poco los sesos y buscarse la vida.

Observo que desde el segundo "hito monolítico" el sendero sigue dirección norte y se mete en lo que parece una faja pegada a la pared. Como la descripción habla de descender hasta una nueva faja, deduzco que hay que buscar una faja como ésta pero que vaya más abajo. Por otro lado, lo más parecido a lo indicado a ir al sur que resulta razonable es ir hacia el sureste, así que empiezo a bajar por ahí. No hay sendero ni claro ni difuso ni hitos ni nada (por lo menos de noche yo no veo nada)... es pura aventura bajando por alguna pedrerilla y destrepes cortos y fáciles. Fran se limita a seguirme, pues además la luz de su frontal tampoco da para mucho, y parece que confía en mí, lo que me motiva para seguir "descubriendo" el descenso.

Observando el entorno, voy descartando direcciones por las que seguir: por aquí se va a una zona que parece no tener salida, por aquí hay una arista de roca por la que me asomo y no se ve una forma clara de bajar... Así voy deduciendo por donde ir, también con la idea de que hay que ir con tendencia al norte, que es donde deduzco que estará esta segunda faja, pero de momento la morfología del terreno me lleva hacia el este o sureste. Al final, cuando hemos bajado un ratillo, despacito y con mil ojos intuyo abajo lo que parece ser un sendero aunque muy difuso. Además lleva hacia el norte, con lo que me parece claramente la mejor opción a seguir, aunque antes me asomo por un par de sitios para descartar otras posibilidades.

Sigo el sendero. Este sendero a veces se hace más claro, lo que me anima a pensar que vamos correctamente y a veces se pierde, especialmente en alguna zona arbolada y en otras de "gravilla" suelta. Algún punto de estos me hace dudar mucho, por lo que tengo que inspeccionar los alrededores para ver por donde seguir, y al final la opción más clara es la de seguir hacia el norte. No obstante hay momentos que no tenemos consciencia de si estamos siguiendo un sendero o abriendo una ruta nueva, pues el sendero, por lo general muy poco marcado, hay ratos que desaparece completamente.

Llego a un sitio pegado a la pared y hace un poco que ya no se ve el sendero. No obstante esto podría ser perfectamente lo que sería la "otra faja". Esta faja enseguida muere al quedar cortada por el vacío. Observando veo que hay roca sobada por el paso de gente, así que parece claro que estamos bien situados, efectivamente esta era la faja en cuestión y el ansiado rápel debe estar por aquí.

Empezamos a buscar el rápel. Estoy convencido de que tiene que estar aquí, pero no lo vemos por ningún lado. Estamos dando vueltas por una zona que no tendrá más de 30 o 40 metros cuadrados de superficie y no somos capaces de ver el rápel. ¡Es imposible! ¡Tiene que ser aquí! Nos asomamos incluso por los sitios más atrevidos, pero ni rastro del rápel. Cualquier cosa a la sombra de los frontales parece que podría ser... pero luego resulta que es una raíz, un palo o cualquier otra cosa. ¡No puede ser! ¡Es increíble! ¡Me niego a pensar que no esté aquí el rápel! ¡Todo indica que tiene que estar aquí por narices!

De repente veo el rápel junto a nosotros... ¡Hemos estado dando vueltas y vueltas junto a él y no lo habíamos visto! Aparte de que la oscuridad de la noche nos ha jugado una mala pasada, la reseña que tengo habla de una línea de rápel con una sirga, lo que me ha despistado un poco pues estaba buscando una sirga como instalación de rápel y la instalación de rápel son dos argollas en toda regla. La sirga sale bajo esta instalación hacia abajo como línea de vida, supongo que para el que quiera subir o bajar por aquí sin cuerdas, pero el descenso es un diedro, bastante perfecto, por cierto, con una muy alta inclinación (si no no tendría sentido el rápel) y pulido, por lo que no sé muy bien como estará a la hora de la verdad lo de subir o bajar por aquí simplemente con esa línea de vida pero aparentemente no parece una opción muy recomendable. 

Sacamos las cuerdas y las empalmamos. Rapelo yo y luego Fran. Recogemos las cuerdas y nos ventilamos la escasa agua que queda en mi cantimplora. Queda muchísima bajada todavía pero lo que queda ya solo es cuestión de tiempo y no tiene mucha pérdida.

Estamos casi arriba del todo de la famosa pedrera conocida como "El Carreró". Muy cerca del collado donde acaba. Si cuando haces vías como el espolón Central cuyo descenso te lleva a mitad de pedrera, ésta ya te parece interminable, podéis imaginaros lo que es bajarla desde arriba del todo... decir interminable es poco... más bien insoportable, o una pesadilla, o un castigo del infierno, o no sé cómo llamar a ésto... Todavía no me explico cómo una vez que subí andando a la cima del Puig Campana me subí esta pedrera enterita. Aunque los recorridos siempre se suelen hacer más largos bajando que subiendo y esta bajada es incómoda de narices. Encima el cansancio que llevamos en el cuerpo es brutal y llevamos alrededor de 20 horas desde que nos despertamos.

La pedrera es supercastigadora para rodillas y tobillos y los resbalones son continuos, con algunos culetazos incluidos.

Afortunadamente y aunque parezca que eso nunca se va a acabar llega un momento que se acaba... pero el castigo sigue y simplemente se suaviza un poco, pues el sendero sigue bajando con pendientes acusadas cuando nuestras rodillas ya se resisten a sujetarnos.

Seguimos avanzando en lo que nos está resultando una durísima bajada en estas condiciones en las que las piernas apenas se sujetan y bajamos muertos de sed andando como si fuéramos zombis de la serie "The walking death". Sencillamente no pensamos, bajamos como autómatas, con la mente en blanco. Si antes teníamos los dedos de los pies machacados de los pies de gato, ahora tenemos las plantas de los pies totalmente escocidas y al rojo vivo de este descenso.

Llegada y regreso

Llegamos al coche, en Font del Molí, hacia las 3 de la madrugada. Casi no podemos andar, así que por mi parte, y después de soltar la mochila, lo primero que hago es hincharme de agua de la fuente, al igual que Fran, y lo segundo es quitarme zapatillas y calcetines y meter los pies en la fuente. Así se alivian bastante aunque nos siguen doliendo lo suyo y nos cuesta andar.

Como hemos comido muy poco en estas 21,5 horas que llevamos despiertos, lo que nos pide el cuerpo es una pequeña cena, aunque sea a estas horas tan intempestivas. Cenamos alguna ensaladita de atún y pasta y alguna otra cosa que no sea muy pesada, aunque tengo una lata de fabada que dan tentaciones de hincarle el diente, pero no parece lo más recomendable y además tampoco apetece ahora ponerse a calentar comida.

Pronto nos metemos en el saco a dormir, con idea de levantarnos lo más tarde posible, aunque sabemos que la luz nos va a despertar pronto.

Efectivamente a las 8 de la mañana ya tengo los ojos como platos. Hemos dormido muy poco pero la luz y el reloj biológico nos despiertan. Para hoy teníamos previsto hacer alguna vía ferrata, pues sabíamos que estaríamos con pocas ganas de escalar, pero no tenemos cuerpo ni para vías ferratas. No obstante, le ofrezco la opción de las vías ferratas a Fran, e incluso le digo que en Villena hay una muy fácil y tranquila. Fran me responde con un rotundo "No", y un "ya habrá otra ocasión para hacer ferratas". Recogemos todo tranquilamente y tiramos para casa. A mí la ferrata de Villena no me hubiera importado, y de hecho cuando pasamos por allí se lo vuelvo a recordar... pero tiene razón que hoy mejor llegar a casa a descansar, que ya nos hemos llevado un preciado trofeo.


6 comentarios:

  1. Enhorabuena chicos....tengo a esta via como una de las buenas, donde la dificultad numerica no la hace justicia, el puzzle es mas complicado que unos numeros, longitud, intuicion, aseguramiento, calor, o friooooo...etc...en algunas guias le ponen un horario de 6 H...jajaja...no conozco a nadie en ese horario, una vez hablando con un escalador local me dijo que tardo 6 1/2 H.......la cuarta vez que la hacia....y asi no es lo mismo.....en mi caso te comento...la hice en el 98 creo recordar....ibamos 5 personas, por entonces no habia ningun parabolt...unicamente algun buril en alguna reunion y poco mas....y los ultimos largos los hicimos totalmente perdidos despues de haber rectificado y rapelado 2 veces......con este incidente que nos hizo perder 2 H por lo menos, nuestro horario fue de casi 11 H.....como anecdotas que conozco te comentare que se de unos que despues de dos dias en la via decidieron bajarse por la canal de la derecha y tardaron otros dos dias...jajaja...ya se que es exagerado ...pero ha pasado....y a otros colegas a tres o cuatro largos de la cima, a principios de primavera les cayo una nevada que les impidio continuar, tuvieron que vivaquear a pelo, y al dia siguiente salir de alli en condiciones extremas de frio y nieve......como ves esta via da para mucho...bueno eso ya lo sabeis pues lo habeis sufrido o disfrutado en vuestras propias carnes......Javi y Fran ya os veo lanzados.....tachando objetivos...animo y a muerte.

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    1. Hola Wimbor. Muchas gracias por tus palabras, son muy alentadoras, y más proviniendo de una persona tan sabia y experimentada en este mundillo como eres tú. La vía desde luego que es toda una aventura. Efectivamente, a ver si seguimos tachando objetivos... el "trofeo" esta vez ha sido bastante reconfortante y hemos adquirido una experiencia muy interesante de cara a otros retos. Saludos!

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  2. Muy buenas!
    Vaya pedazo aventura, y sin necesidad de irse a territorios remotos. Me lo he leído desde el primer largo hasta el último, casi se podía notar esa calorina, que me la imagino. Lo que alucino es cómo puedes recordar los detalles de todos esos largos, se nota que se os da bien seguir una vía, imagino que si conoces la pared te acabas perdiendo.
    Por cierto, he leído tu artículo sobre friends, muy interesante.
    Enhorabuena,
    Anton

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    1. Hola Antón. La verdad es que al principio creo que no me voy a acordar de la mitad de las cosas, pero según voy escribiendo voy reviviéndolo y acordándome de muchos detalles.
      Ciertamente es una vía en la que es bastante fácil perderse, por lo que conviene ir lo mejor "documentado" que se pueda.
      Muchas gracias por todo. Me alegra mucho que te haya gustado.

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  3. Hola, enhorabuena por el blog, es una gran inspiración para todos aquellos que empezamos y nos estamos enamorando de este deporte.
    La primera vez que yo subí el puig en mis inicios montañeros también subí y bajé por la pedrera,.. de hecho, ignorante de mí, subimos primero al pico Prim pensando que era la cima del Puig y cuando vimos que no era así nos volvimos al Puig,. .para terminar lo empezado.
    Te comento esto, porque la siguiente vez que subí con un amigo que lo ha hecho muchas veces, empecé de nuevo a subir por la pedrera y me dice “¿Dónde vas?”,.. pues para arriba,… Por ahí no es zote!… y hay justo una senda muy buena justo al lado de la pedrera!!! .. subimos y bajamos por ese camino,.. que es casi como ir en ascensor en comparación con la pedrera. De hecho yo nunca más he bajado por la pedrera,.. porque mis tobillos y rodillas sufren mucho.
    Un saludo y gracias por compartir tus aventuras.

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    1. Muchas gracias a ti, Juan Antonio. La próxima vez que pase por allí me fijaré más en lo de las sendas, aunque nosotros tampoco es que vayamos por mitad de la pedrera sino por su borde, donde hay una especie de senderito que tampoco es que sea muy cómodo para bajar que digamos y en donde los culetazos por resbalones están a la orden del día. Saludos

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