viernes, 3 de octubre de 2014

Naranjo de Bulnes. Vía "Pidal-Cainejo" (500 m, 8 largos, V/V+)

Naranjo de Bulnes. Vía "Pidal-Cainejo" (500 m, 8 largos, V/V+)
Año 2014. Participantes: Fran y yo.
  
Creía que se nos pasaba otro año sin poder atacar esta emblemática vía, que tenía en el punto de mira desde al menos el 2012, cuando el famoso veranillo de San Miguel nos proporcionó un sábado con buen tiempo que nos permitía acometerla. La vía no creo que necesite mucha presentación ya que es una de las más famosas del Naranjo por ser la que utilizaron Pidal y Cainejo para hacer por primera vez cima en el Naranjo de Bulnes, a pesar de que a día de hoy hay vías más cortas y más fáciles para llegar a la cumbre.

Ese puntillo de historia de esta vía le da un gran interés a esta ya de por sí interesantísima vía. Al que no conozca la historia le recomiendo que lea los relatos del propio Marqués de Pidal y de El Cainejo (yo los leí en el libro "Naranjo de Bulnes. 100 años de escaladas" donde están incluidos, pero no creo que sea difícil localizar los textos en internet), que ponen los pelos de punta solo de imaginárselo y más después de haber vivido esta vía. Imaginarse pasajes como los "pasos de hombros", cuando El Cainejo se subía a los hombros del Marqués de Pidal para superar el desplome que denominaron "panza de burra" no es lo mismo cuando uno ve en persona que el Marqués de Pidal no debía estar precisamente en una situación "cómoda" sino en una chimenea muy vertical, muy expuesto y malamente agarrado cuando el Cainejo para colmo se le subía encima de los hombros; ¡chapeau para los dos! Y eso por no hablar de múltiples pasos en los que ya se pasa tensión con los modernos medios de ahora, con lo que lo de aquella época debió ser la releche.
 
También hay un programa del Al filo de lo imposible (pincha para ver), que recrea esa primera ascensión al Naranjo de Bulnes.

La vía tiene dos partes bien diferenciadas, la de "navegación", que abarca los tres primeros largos, con relativamente baja dificultad (IV/IV+) pero menos evidentes de seguir, y la de dificultad técnica en el resto de los largos, donde el recorrido es bastante evidente (salvo detalles) pero la dificultad de escalada pega un notable salto (V algo mantenidillo, con algunos pasos potentes de V+), solo bajando justo al terminar la vía, en el último largo.

Dado que últimamente se ha puesto un poco más complicado lo de reservar refugio en Vega Urriello hemos optado por vivaquear en las proximidades del refugio.

Por otra parte, el domingo daban lluvia así que descartamos que pudiéramos aprovechar para hacer algo más por Vega Urriello.


Empezamos (podéis pinchar en las fotos para verlas más grandes):


Subida a Vega Urriello desde Pandébano (26 de septiembre de 2014)

Datos: 
Actividad: Montañismo;      Zona: Picos de Europa
Cimas: Ninguna
Dificultad: Ninguna. 
Características: Sendero bastante marcado, solo puede haber algún problema en el collado de Pandébano con niebla cerrada, pues la hierba borra el sendero. La parte final se empina algo más haciendo zetas. Recorrido bastante bonito, especialmente de bajada.
Longitud total: 6,3 km;     Desnivel acumulado positivo:  890 m;     Desnivel acumulado negativo: 80 m 
Tiempo: 2 horas aproximadamente.

Track: 
Grabado "in situ", filtrado y depurado (pincha aquí para acceder al track en wikiloc).


Fecha:  26 de septiembre de 2014

Llegamos al párking de Pandébano. Son las 20:30 aproximadamente. Preparamos las mochilas; yo prácticamente es echarme la mochila a la espalda, coger los bastones  y estoy listo para tirar para arriba, ya que la tengo completamente preparada a falta de algún que otro detalle mínimo. Fran tiene que hacer algún preparativo más que yo, así que como luego mete el turbo y me cuesta seguirlo le digo que mejor empiezo a ir subiendo yo que él seguro que me alcanza rápido. Está anocheciendo a marchas forzadas así que llevo el frontal ya preparado.
 
Llego al collado de Pandébano y se echa la niebla encima. En este tramo del collado ya me lo conozco de otras veces que de noche y con niebla no es difícil despistarse del sendero, pues la hierba lo borra y la niebla te dificulta seguir la dirección correcta; en otra ocasión que subimos hacia la 1 de la madrugada y con niebla y llovizna ya me costó un poco seguirlo (ver Naranjo de Bulnes. Vía "Regil" (abandono) y vía "Directa de los Martínez"). El frontal es casi inútil pues se refleja toda la luz en la niebla cegando la visión y no se ve nada bien. A pesar de ello me apaño bien y consigo enlazar el sendero marcado ya al otro lado del collado.

Sigo subiendo, pero un poco alerta por si Fran puede tener problemas en el collado para seguir el sendero, así que de vez en cuando miro hacia atrás a ver si veo la luz del frontal de Fran.

Llego al antiguo refugio de la Tenerosa y sigo sin ver el frontal de Fran, así que decido pararme a ver si ha tenido algún problema. Llegando aquí la niebla se ha ido diluyendo un poco, aunque iba y venía según los tramos. Al cabo de un rato veo aparecer a lo lejos una luz de un frontal; doy por supuesto que es Fran así que ya puedo continuar más tranquilo, pasando al poco por el actual refugio de la Tenerosa y siguiendo subiendo con nuestras pesadas mochilas llenas de material.

Más adelante Fran acaba alcanzándome y me confirma que efectivamente ha tenido problemas en el collado y se ha salido del supuesto "sendero", andando un poco despistado por el collado, pero que afortunadamente al final ha conseguido enlazar con el sendero al otro lado de la pradera.

Un poco antes de que me alcanzara observamos un hecho bien llamativo, gracias a que la noche es algo luminosa por efecto de la luna: íbamos metidos en la niebla, cuando de repente se despeja todo y al mirar hacia el valle a nuestra derecha vemos que estamos en plena superficie del mar de nubes, justo a su altura. Es un espectáculo increíble y dan ganas de echar a andar por encima de las nubes; nunca había visto algo parecido. Al alcanzarme Fran lo comentamos: él también se ha dado cuenta de ese momento mágico, momento que no duró demasiado pues enseguida empezamos a dejar abajo el mar de nubes. La lástima es que la insuficiente luz hiciera imposible fotografiar el fenómeno, aunque en tal caso seguramente una foto no llegaría a plasmar igual de bien la imagen vivida.

A partir de juntarnos ya haríamos el recorrido sin separarnos. Como anécdota, el ir a oscuras nos hace despistarnos en un momento de por qué zona del recorrido nos encontramos, así que cuando llegamos al conocido mirador pensando que ya lo habíamos pasado hace un poco nos damos cuenta que nos queda más de lo que pensábamos.

Seguimos a nuestro ritmo machacón remontando, más adelante, las pesadas e interminables zetas finales, tras las cuales el sendero se endereza y su pendiente se suaviza como acto de bienvenida al refugio. Tras llegar al refugio miro la hora y compruebo que a pesar de los problemillas en el collado hemos tardado un pelín menos de 2 horas, lo cual está bastante bien con estas mochilas. Bueno, Fran incluso ha tardado unos minutos menos: los que salió más tarde que yo del coche.

Cargamos agua y nos instalamos en un buen vivac que hay cerca del refugio y que está libre. Allí cenamos y nos preparamos para dormir. Hemos tenido que abrigarnos bien pues aquí hace un frío del carajo y probablemente andemos rondando los 0 grados; en la subida no lo notábamos por el esfuerzo pero una vez parados el frío empieza a invadirte las entrañas.

Acordamos levantarnos a las 6:30. Realmente no hace falta levantarse tan temprano, pero preferimos que si acabamos antes mejor y así podemos trasladarnos, si así lo decidimos finalmente, a una población de Cantabria donde hay una vía ferrata algo exigente, por si la lluvia nos respetara a primera hora del domingo y nos permitiera hacerla.

Llega el momento de meternos en los sacos y dar rienda suelta a nuestros sueños, no sin antes observar con agrado lo despejado que está el cielo, todo lleno de estrellas.
 


Escalada de la vía "Pidal Cainejo" y regreso (27 de septiembre de 2014)

Datos
Longitud de la vía: 500 m.  Nº largos: 8.     Dificultad máxima: V/V+
Dificultad global de la vía:  MD- (Muy Difícil Inferior)
Características: Vía con dos partes bien diferenciadas: Los primeros largos más de navegación que de dificultad y donde la roca es la típica caliza del Naranjo compacta y adherente. Una vez se llega al hombro del espolón, la vía se transforma con unos largos fáciles de seguir pero con un notable escalón de dificultad con respecto a los anteriores y mantenidillos, la roca ya no es tan compacta ni tan adherente. Al que le guste escalar chimeneas se va a hinchar. Una larga trepada final lleva directamente a la cima. 
Material: Juego de fisureros y juego de friends, aunque nosotros no llegamos a usar ningún fisurero. Pueden venir bien algún Alien y de hecho nosotros dimos bastante juego al azul (si no recuerdo mal lo usamos en tres largos).
Equipamiento:  Generalmente todos los pasos complicados suelen tener algún clavo o puente roca. En los dos primeros largos solo encontramos un clavo en el primero y un friend abandonado en el segundo. En contraste, el cuarto largo tiene por lo menos cinco o seis clavos. Las reuniones son todas en dos clavos o un clavo y un puente roca, menos la última que hay que montarla con friends en terreno ya fácil. Solo reforcé la tercera reunión, porque de primeras no vi el segundo clavo. Con motivo del centenario los clavos más viejos fueron renovados, así que todos los clavos están más o menos en buen estado, salvo una excepción en el largo 7 que luego comento. 
Pasos clave: Pues los tres resaltes ligeramente desplomados que hay en los largos 5, 6 y 7 respectivamente. Más o menos son las denominadas "panzas de burra", aunque hay un poco de confusión en cuáles de ellas son: la auténtica panza de burra de los relatos de Pidal y Cainejo claramente es la del largo 6, que es la más "marcada". La gente habla de una segunda panza de burra y aquí hay confusión pues unos se refieren a la del largo 5, que suele venir en los croquis como fisura desplomada, y otros a la del largo 7, si bien he sabido que la del largo 7 la gente se la suele "escaquear" pasándose más abajo a la pared de la derecha. En cualquier caso para mí los tres son resaltes de cierta dificultad pero la panza de burra auténtica es la del largo 6. Dicho esto, al del 5 le suelen dar más grado en los croquis pero yo no se si es que lo encadené muy bien (o los otros resaltes peor) pero me resultó un pelín más fácil que los dos resaltes siguientes. El del 6 y el de 7 me resultaron algo más complicados, quizás rondando el V+. Lo curioso era lo del largo 7, ya que unas reseñas le dan solo un IV+ mientras otras afirman que es el paso más complicado de la vía; investigando a posteriori este misterio  he descubierto que es que es frecuente escaparse desde más abajo a la pared de la derecha y eso justifica la diferencia de cotación.
Posibilidades de escape: Bastante complicadas. Se descendería hasta el hombro noroeste (reunión 3) por la propia vía y abandonando cordinos en las reuniones, que normalmente son de dos clavos. A partir de ahí, tanto bajar por la "Pidal Cainejo" como por la "Regil" requiere como poco deshacer travesías. Otra posibilidad estudiable es usar la "Schulze" para bajar desde la reunión 4 de la "Pidal Cainejo", que es donde confluyen.
Tiempo de escalada: Aproximadamente 5 horas de escalada y por lo menos media hora más de trepada final (es relativamente larga y además hay que ir despacio para, entre otras cosas, no tirar piedras a los de abajo).
Tiempos de aproximación y regreso: En la aproximación hay que subir por la canal de la Celada e ir a la cara este para retroceder por el pie de pared hacia la cara norte, lo que puede llevarse entre 45 minutos y una hora, ya que se da más rodeo del que pueda parecer a primera vista. El descenso desde cima hasta el refugio rondará las dos horas o algo más, también dependiendo de si hay que hacer algo de cola para rapelar por la cara sur. Desde el refugio hasta el párking de Pandébano tardamos menos de hora y media pero a un ritmo relativamente rápido, así que lo normal es tardar un poco más.
Cimas: Naranjo de Bulnes (2519 m).
 
Longitud total: 10,7 km;     Desnivel acumulado positivo:  780 m;     Desnivel acumulado negativo: 1600 m 
 
Track: 
Generado a través de otros tracks de internet y adaptado. Filtrado y depurado. (pincha aquí para acceder al track en wikiloc).


Croquis: 
Este croquis es, de los que he visto, en el que mejor dibujado está el recorrido, aunque los largos 3 y 4 del mismo se suelen hacer en uno solo, tal y como lo hicimos nosotros, y por tanto la numeración de largos está descabalada a partir de ahí. Además este croquis contiene algunas indicaciones interesantes. Las "panzas de burra" indicadas son la del largo 6 (la "auténtica") y la del largo 7 (la que se escaquea la gente). La supuesta "panza de burra" del largo 5 viene indicada como "placa fisurada algo desplomada"


Este croquis tiene algunos largos partidos, concretamente por las R2, R4 y R6 indicadas en el mismo.En este croquis están empalmados los largos 5 y 6.

Fecha:  27 de septiembre de 2014


Aproximación a pie de vía

Suena el despertador. He pasado frío esta noche a pesar de llevar buen saco. A mitad de noche he tenido que cambiarme de orientación (los pies donde la cabeza y viceversa) porque me daba el birujillo... con lo cual he mejorado algo pero no ha sido suficiente, así que me he tenido que levantar y ponerme la funda de vivac. Aun así, he dormido con el frío metido en el cuerpo, no sé por qué. Como consecuencia me he despertado muchas veces...

Pero ya ha sonado el despertador... "Oye Fran, que ya es la hora"... "Vale"... Pero ninguno de los dos nos movemos durante unos minutos... De repente Fran dice: "Oye Javi, vamos sobrados de tiempo, ¿no?"... "Pues sí, en teoría sí"... Continuamos por unos momentos nuestra conversación derivada de pensar que hace un frío como para meterse ahora en esa pedazo grieta en sombra y con orientación norte y que se está muy a gustito dentro del saco. Yo hasta llevo bastantes minutos con ganas de mear, pero el frío y la pereza me puede...

A continuación cae alguna cabezadilla después de la cual de repente reacciono. Vamos holgados de horario, pero es que ya es de día y todavía tenemos que desayunar, prepararnos, hacer la aproximación... y dentro de nada estará calentando el sol. Bueno, no queda más remedio que predicar con el ejemplo, así que salgo del saco y me pongo en marcha. Fran reacciona y hace lo mismo.

Desayunamos en nuestro vivac y nos preparamos. Hace tanto frío que hasta echamos el plumas a la mochila de escalada por si nos quedamos helados en las reuniones.

Echamos a andar con el pasamontañas y los guantes puestos. Acoplamos todo lo que no nos vamos a subir y nos vamos a dejar aquí... y comprobamos que realmente dejamos poco peso... el saco, aislantes, bastones y algo de comida... el gordo del peso que son las cuerdas, el material, ropa de abrigo, comida para la escalada, agua, walkies, teléfonos, cámaras de fotos, frontales, etc, lo seguimos llevando encima... uno se cree que va a aligerar la mochila y se lleva este chasco... mal negocio, pero es lo que hay.

Cuando empezamos a subir la empinada canal de la Celada enseguida entramos en calor, así que tenemos que parar a quitarnos el polar (el plumas en el caso de Fran), guantes y pasamontañas.

Continuamos. Hay algo de tránsito de gente. Cuando llegamos a la cara Este vemos pequeñas aglomeraciones al pie de la "Cepeda" y de "Amistad con el Diablo". Mientras subíamos por la canal de la Celada hemos visto también que una cordada de 3 se metía en la "Pidal Cainejo", nuestra vía de hoy. Esperemos que no nos estorben mucho.

Pasamos por el pie de la "Cepeda", que parece una parada de autobús con la gente esperando, y continuamos hacia el inicio de la "Pidal Cainejo", donde todavía sigue la cordada que hemos visto. Mal asunto... van muy lentos. Nos quedamos relativamente cerca pero separados, preparándonos muy tranquilamente pues la cosa tiene para largo.

Desarrollo de la escalada

Ya me había propuesto Fran que yo hiciera el primer largo, porque la otra vez que estuvimos aquí de visita ya vimos que el recorrido del primer largo no nos resultaba muy evidente, y según dice Fran a mí se me da mejor eso de "navegar" por la pared. Por tanto, quedan asignados para Fran los largos pares y para mí los impares, y me toca a mí empezar la vía.

Yo ya estoy listo, y Fran se o toma con mucha calma, pues aún queda uno de la otra cordada por salir.

Mientras se acaba de preparar Fran, me bajo a pie de vía a hablar con el que queda por salir. Me extraña que no esté atado ni nada, y me comenta que es que él no va a hacer la vía, que él hace mucha deportiva pero no clásica y había quedado con sus amigos para hacer la "Sur Directa", pero que le habían engañado y en lugar de la "Sur" le habían traído a ésta, que le daba más respeto y por eso había decidido quedarse. También me comenta que están tardando tanto porque el que iba primero de cordada se había atascado en un paso llegando a la primera reunión... Mis pensamientos en ese momento no son otros que "Puff, si ya en el primer largo se atascan, creo que lo vamos a llevar claro; nos van a frenar y, lo que es peor, nos van a apedrear en la chimenea". Yo ya estaba pensando que a lo mejor en el tercer largo les podríamos adelantar fácilmente, pero afortunadamente luego espabilaron y no llegamos a cogerlos, aunque alguna piedra que otra sí que nos llovió.

Le aviso a Fran de que ya podemos iniciar la vía, ya que el que queda de la otra cordada no va a escalar y que baje ya. Aún gasta Fran unos cuantos minutos en bajar, mientras yo sigo charlando con el otro para amenizar la espera... No sé si  el pensamiento de Fran estaría en la línea de que cuanto más tarde más calorcito y que además más valía dejar a los otros que nos cogieran ventaja.

Finalmente baja Fran. Inspecciono visualmente el terreno y decido bajarme unos cuantos metros más hacia el oeste para acometer la vía, la verdad es que no sé muy bien por dónde porque no se ve ningún recorrido más evidente, pero pienso que ya iré viéndolo sobre la marcha. Allí nos trasladamos los dos, sobre el patiazo de la Canal de la Celada, que ya no nos sorprende ni nos impresiona tanto como la otra vez; aquella vez (fue de vuelta tras haber hecho la arista integral Cabrones-Torrecerredo) no nos lo esperábamos y nos llamó mucho la atención.

Me empiezo a calzar los pies de gato y ponerme la mochila para empezar.
 
Preparándome para iniciar la vía

Largo 1 (IV): Navegando en travesía sobre el abismo de la Celada

Me toca de primero. Aunque no tengo muy claro por dónde debe ir el largo, tengo identificada visualmente la cueva donde es la primera reunión, así que mi idea es ir navegando por la pared por donde lo vaya viendo, con tendencia hacia la citada cueva.

Desde donde he empezado yo hay que ir haciendo una diagonal hacia arriba-derecha, pero la pared me va llevando mucho más hacia arriba que hacia la derecha. Llego un punto en el que veo que me voy yendo demasiado hacia arriba. No tengo visualmente situada la cueva, quizás porque por donde voy no la llego a ver. Por ello, llegado el punto este en el que ya calculo que me estoy pasando de subir, le pregunto a Fran, que confirma mis sospechas y me indica que ya voy un pelín más alto que la cueva.

Voy yendo demasiado hacia arriba.

Parece un poco más fácil ir en travesía dos o tres metros más por debajo que por donde voy, así que deshago con cuidado mis últimos pasos y me pongo a hacer una larga travesía horizontal. Esta travesía, totalmente horizontal, me va llevando a la cueva a la que al ratillo ya tengo a la vista.

Empiezo la travesía horizontal

Cuando ya estoy cerca de la cueva, Fran me avisa que queda muy poca cuerda; estima que unos 8 metros. Así a ojo veo que me deben quedar unos 5 metros con lo que, siempre que los cálculos de Fran y los míos sean correctos, con esos 8 metros de cuerda que faltan me da para llegar a la reunión; así que voy hacia ella y llego.
 
Cerca ya de la cueva
Un zoom. Se aprecia el recorrido horizontal de las cuerdas.

La reunión es cómoda y tiene dos clavos. Monto la reunión y aviso a Fran para que suba.

La verdad es que  no sé qué narices de "variante" habré hecho en este largo cuando he leído en algunas reseñas que tiene 35 metros y yo me he pulido la casi totalidad de los 60 metros de cuerda que, por cierto, me han llegado por los pelos.

A Fran le toca recorrer toda la trayectoria que he ido haciendo durante esos casi 60 metros de cuerda, pues aunque he puesto muy pocos seguros he ido guiando las cuerdas.

Fran llegando a la reunión

Finalmente nos juntamos en esta cómoda reunión, que además tiene unas magníficas vistas.

Bonitas y aéreas vistas desde la primera reunión


Largo 2 (IV/IV+): La llambrialina y el zigzag


Desde la reunión tenemos justo al lado la famosa llambrialina de los relatos del Marqués de Pidal y del Cainejo, y que este último se curró descalzo. La verdad es que es muy llamativa pues está totalmente lisa en el sentido de que no hay ni la más mínima grieta... parece que hayan dado un enfoscado a la roca. En cualquier caso, a primera vista no parece nada difícil pasar por ahí con la ventaja de unos pies de gato.

La llambrialina justo al lado de la reunión

Le toca a Fran de primero. Le indico que hay que hacer solo unos cuatro metros de llambrialina y tirar para arriba por el diedro que se ve, que sube con tendencia hacia la izquierda. Luego la reunión está bastante a la derecha, con lo que en este largo hay que describir una gran "S". La parte de abajo se ve clara, pero la parte de arriba del largo la tendrá que ir descifrando él según la vea. Al igual que el anterior, este es un largo en el que la cierta tensión que se sufre es por no tener muy claro el itinerario a seguir, en lugar de por la dificultad, que es bastante moderada.

Comienza Fran que coloca un seguro de reenvío justo antes de meterse en la llambrialina.  

Fran a punto de iniciar la llambrialina

Fran me dice que no se lleva muy bien con la adherencia (eso me dice, aunque no sé por qué ya que yo le he visto superar buenas placas de adherencia como un campeón), así que aunque se ve fácil se mete en la llambrialina con cierto respeto, pero rápidamente supera sin ningún problema el corto tramo de llambrialina, y se planta al inicio del diedro por el que ha de subir a continuación. Por detrás del diedro también se puede subir fácil, lo que plantea alguna duda a Fran, pero en el fondo se va a parar al mismo sitio.

Fran, al inicio del diedro, tras superar la llambrialina

Fran va subiendo el diedro hacia arriba y localiza un friend abandonado hacia el que se dirige. Desde ahí una travesía a la derecha por una especie de vira lleva a la reunión. La reunión no se ve hasta que estás encima de ella, ya que está detrás de un espolón, con lo que hay que saber dónde está. Afortunadamente Fran se había fijado en los de la cordada que nos precede, que al final llevan un ritmo parecido al nuestro.

Fran ya cerca de la reunión

Fran monta la reunión y me avisa para que suba. El tramo de llambrialina es cortito y además muy fácil;  de pie y bien erguido se hace muy bien y prácticamente ni siquiera son necesarias las manos. Me meto en el diedro y lo remonto hacia el friend abandonado. El largo es fácil y quizás en este tramo de subida hacia el friend haya algún paso de IV+.

Al llegar al friend abandonado Lo primero que pienso es cómo narices ha metido Fran tan adentro el friend, pero enseguida me doy cuenta que es un friend abandonado. Desde allí una especie de vira, aunque no excesivamente evidente, lleva en horizontal hacia la derecha hacia la reunión.

Llegando a la segunda reunión

Mi primera impresión allí es que el recorrido que ha seguido Fran no ha sido el correcto, pues me ha parecido algo enrevesado, pero a posteriori he comprobado que sí lo ha hecho perfectamente.

Nos juntamos en la reunión, con vertiginosas vistas hacia la Canal de la Celada.

Fran en la reunión 2
Desde aquí hay unas vertiginosas vistas de la Canal de la Celada

Largo 3 (III): Larga excursión hasta la reunión del hombro

En la reseña que tengo pone que este fácil tercer largo tiene 70 metros, pero luego pude comprobar al hacerlo que más bien rondará los 100 metros. Es un largo fácil, prácticamente de transición, cuya dificultad va progresivamente pasando de I a III.

Mi idea es hacer un largo hasta tope de cuerda, y cuando se acabe la cuerda continuar en ensamble, separados esos 60 metros de cuerda, hasta completar los metros adicionales del largo. Me parecía la opción mas apropiada y rápida y creo que así fue; Fran estaba de acuerdo en ese momento y también opinó a posteriori que le había parecido la mejor opción y que gracias a eso solventamos bastante rápido este largo extralargo.

Me toca de primero. Salgo y recorro los 60 metros de longitud de las cuerdas fácilmente, pues es terreno muy fácil (I y algún puntito de II). Me dirijo hacia la parte baja del hombro, pero me doy cuenta que hay que dirigirse bastante más arriba. Solo he puesto un seguro para guiar un poco las cuerdas, lo que no ha sido fácil dado lo roto del terreno. Ahora que se ha acabado la longitud de la cuerda coloco como puedo un segundo seguro para salir en ensamble con más seguridad.

Iniciando el largo 3
Se acaban los 60 metros de cuerda y monto un seguro para seguir en ensamble


Cuando ambos estamos listos seguimos ya en ensamble. Yo empiezo a trepar dirigiéndome a la parte alta del hombro, que ya tiene pasos de II/II+. Fran va por la parte fácil del inicio, prácticamente de andar, así que tiene que aguantarse un poco e ir al ritmo al que yo voy trepando por esta zona que ya requiere emplear las manos continuamente.

Me iba para la parte baja del hombro pero ya me he dado cuenta que hay que ir hacia la parte alta que se ve casi saliéndose de la foto por arriba. No obstante, ahí no está la reunión sino que hay que trepar todavía otro resalte más en el que aumenta ligeramente la dificultad hasta III. Si donde estoy yo ya son 60 metros, ya se aprecia que la longitud de este "largo" alcanza fácilmente los 100 metros.

Fran iniciando su andadura en este largo

Llego a la parte alta del hombro y asomo por la cara oeste. Se ve el refugio de Vega Urriello, y el patio es sobrecogedor. 

Al coronar esta parte alta del hombro no veo ninguna reunión y viendo a la siguiente cordada en la siguiente reunión que calculo que está a más de 60 metros ya deduzco que la reunión que busco tiene que estar un poco más arriba, para lo que hay que trepar otro resalte del hombro y llegar más alto. No obstante, aprovechando que están ahí, les pregunto a los de la cordada precedente y me confirman que la reunión está más arriba.  

Trepo este último resalte, que además de ir por el filo del hombro tiene una dificultad algo mayor, quizás con algunos pasos de III, aunque como no tiene un recorrido fijo, también puede depender un poco de por dónde vayas.

Al coronar este último resalte ya veo un clavo y monto reunión con el clavo y un friend, aunque luego me daría cuenta que un pelín más arriba había un segundo clavo con el cual completar la reunión sin necesidad de recurrir al friend.
 
Fran se para unos instantes mientras monto la reunión y coloco el asegurador para ya asegurarle desde ella y cuando le tengo listo continúa hasta que nos juntamos.
 
Fran llegando a la reunión, con un patiazo a su derecha y un estupendo paisaje de fondo

Nos hemos metido ya en la fría sombra de la cara norte y nos despedimos del sol que ya no nos daría hasta la cima... debe ser una buena vía para hacer en pleno verano. Sin embargo ahora la roca está un tanto helada, y especialmente si, como yo, tienes que irte descalzando en todas las reuniones para poder aguantar los pies de gato durante toda la escalada. Por otra parte, el ambientazo de paredón se empieza a acrecentar rápidamente.

Recién metidos en la fría sombra y con vertiginosas vistas hacia el oeste
Estamos relativamente cerca de la mítica vía del "Pilar del Cantábrico"... palabras mayores

Vemos asomar una cordada abajo por el filo del espolón. Parece evidente que están haciendo la "Regil", larga pero interesante vía que intentamos hace unos años y que las circunstancias nos obligaron a abandonar en los primeros largos... ¡qué lástima! (ver Naranjo de Bulnes. Vía "Regil" (abandono) y vía "Directa de los Martínez"). Esa vía se une a la "Pidal Cainejo" en el hombro, así que ahora vamos a ser compañía. Como ven que tenemos la reunión ocupada se lo toman con calma y se acoplan en el solecito a esperar relajadamente.


Una cordada aparece por la "Regil" en este estupendo paisaje


Largo 4 (V): Muro con unos cuantos "pasitos" y bastantes clavos

Le toca a Fran de primero. Los chicos de la cordada precedente me han dicho, al hablar a gritos con ellos hace un momento, que este largo tiene muchos clavos. La verdad es que desde la reunión tiene apariencia de fácil, en la reseña que tengo yo le pone de  IV+ y si encima está plagado de clavos que además de protegerte te van guiando... Pero no es precisamente así, como se verá.

Empieza Fran y va remontando el largo. La verdad es que veo que le va costando más de lo que aparenta y que tarda más de la cuenta. Veo que en unos momentos la cuerda circula rápido, pero en otros se frena y tarda bastante en ir avanzando poquito a poco. Me extraño cada vez que miro para arriba y le veo mucho más cerca de lo que me pensaba que debía de estar... O Fran está escalando con una tranquilidad pasmosa o aquí hay gato encerrado.
  
Fran iniciando el largo 4
Fran, un poco más arriba. Una cosa negra que se ve más arriba ya en la chimenea es uno de los de la cordada precedente acometiendo la verdadera "panza de burra", la del largo 6. Justo debajo de él se aprecia el resalte del largo 5

Después de un buen rato y cuando ya no veo a Fran le pregunto intrigado por el walkie que cómo va la cosa... Me contesta que ya está montando la reunión... menos mal, pues ya estaba con la mosca detrás de la oreja de que pasaba algo raro. 

Cuando me avisa que ya puedo subir empiezo a remontar el largo y a descubrir el misterio. El largo es mucho más vertical de lo que aparenta visualmente, pero engaña por dos razones: una porque las paredes de arriba tras el largo desploman y hacen que la percepción de la vertical se distorsione; y otra porque el largo va intercalando algún pequeño descansillo entre los tramos verticales y la sensación del conjunto es de menos verticalidad.

El largo es bastante largo, unos 50 o 55 metros, y en él efectivamente hay unos cuantos clavos. Según voy remontando me voy encontrando varios pasos sueltos que me sorprenden un poco ya que yo diría que al menos alguno que otro más que IV+ rondan el V. Luego he visto que efectivamente en muchas reseñas a este largo le dan el V de dificultad máxima al largo, con lo que yo estoy de acuerdo. En este largo es cuando uno se empieza a dar cuenta de la magnitud de la proeza de Pidal y de Cainejo allá por el año 1904... y con aquellos medios y aquellas incertidumbres.

Los últimos metros ya son un poco más tranquilos y llego a la reunión juntándome con Fran.

En la reunión nos damos un pequeño respirillo tras este notable cambio en la dificultad de la vía, y nos comemos unas gominolas, mientras miro hacia arriba el siguiente largo y pienso: "Si lo anterior viene como IV+... ¿cómo será el siguiente largo que lo dan de V (en el croquis que llevo) o V+ (en muchos otros croquis) y que me toca a mí de primero?"... en teoría ahora me toca el primer resalte desplomado.
 
En la reunión 4, unos instantes para beber y reponer energías.
Observando el siguiente largo que me toca atacar, en teoría la primera "panza de burra"
 
 
Largo 5 (V/V+): "Apretando" un poco nos metemos en la grieta Pidal

Me toca de primero. Ya el inicio del largo se ve un poco explosivo, pero no quiero pensármelo mucho y enseguida me lanzo a por él, para lo cual casi tengo que pasar por encima de Fran ya que el largo sale justo encima de la reunión.
 
Como unos cuatro metros por encima de la reunión ya teníamos fichado un clavo que me serviría para colocar mi primer seguro de este largo, que además serviría de reenvío; pero Fran me dice que mejor ponga el reenvío en un clavo de la propia reunión... ¡Fran, qué poco te fías de mí!, je, je, je... es broma, y me parecen perfectas todas las precauciones que se puedan tomar, así que en la reunión queda puesto.

Iniciando el quinto largo

Tras el pequeño apretón inicial, creo recordar que hay unos pasitos algo más tranquilos antes de meterse en el verdadero apretón del largo, que es el resalte ligeramente desplomado.

Fran me había perdido de vista, pero al ir a atacar el resalte recuperamos la visión directa entre nosotros y me pregunta qué tal va la cosa; le contesto que voy apretando pero que va saliendo relativamente bien.

Ataco definitivamente el resalte. Algún clavo permite acometerlo con relativa sensación de seguridad en cuanto a la protección de una caída y eso da una cierta tranquilidad dentro de la que puedes tener en este largo. Además de clavos también hay un puente roca con un cordino blanco.

Voy jugando con oposiciones de fuerzas y posturas, con la seguridad de los seguros que he comentado,  y al final salgo más fácil de lo que pensaba por arriba del resalte. Muchas reseñas le dan V+ a este largo. Quizás simplemente di a la primera con la combinación de posturas y movimientos más adecuada, pero a mí me pareció que su grado es V. También me comentó Fran que le sorprendió lo rápido que hice este largo. En cualquier caso este largo me ha hecho flipar todavía más con respecto a la proeza de Pidal y Cainejo.

Tras superar el resalte, aunque sigue muy empinado hay unos metros que tumban un pelín, antes de ponerse otra vez muy vertical en una chimenea que finaliza en la auténtica "panza de burra" que describieron Pidal y Cainejo.

Justo al piel de esta vertical chimenea veo un clavo cuya posición no parece que sea para asegurar un paso sino más bien para montar reunión. Sin embargo el lugar es un tanto inhóspito como para montar reunión... me entran dudas: ¿Y si lo que he superado no es el resalte desplomado marcado en el largo 5, sino que es lo que veo más arriba?... la verdad es que el resalte que he pasado, tampoco es que tuviera forma de "panza de burra", como marcan algunos croquis, o al menos no tan evidente como la que se ve arriba... Además no llevo mucha longitud de largo... pero calculo que de donde estoy hasta superar la "panza de burra" de arriba habrá unos 30 metros, así que no tengo claro que me llegue la longitud de la cuerda para superarlo... y entre medias sí que no se ve ningún sitio medianamente decente donde hacer reunión y estaría un poco vendido... pero tengo una forma de saber si llego con la longitud de cuerda a coronar la "panza de burra" de arriba: si calculo a ojo que hay 30 metros desde donde estoy hasta coronar lo de arriba, entonces lo único que tengo que hacer es preguntarle a Fran si ha pasado ya la marca de 30 metros que tengo hecha en mi cuerda y así sabré si lo que llevo de largo son más de 30 metros, y por tanto entre los dos tramos sumarían más de 60 metros y no me daría para superar lo de arriba, o menos, en cuyo caso sí que podría... bueno, voy a preguntar a Fran por el walkie...

Encima, al walkie le da por funcionar solo cuando le viene en gana... ¡siempre se rebelan las cosas en los momentos más inoportunos!... Se produce alguna situación cómica, ya que como no me funciona el walkie le hablo a Fran a gritos, y al cabo del rato de pegar gritos de repente oigo a Fran por el walkie que me dice: "Oye Javi, ¿por qué no me hablas por el walkie?"... Sin comentarios.

Bueno, el caso es que parece que ya podemos hablar por el walkie y le pregunto a Fran sin en mi cuerda ha pasado ya la señal de los 30 metros, ya que no tengo muy claro si la reunión es donde estoy ahora mismo. Como la cordada de la "Regil" ha llegado a la reunión 4, donde está Fran y el chico que la capitanea ha oído mi pregunta y lo conoce, me dice que si estoy justo debajo de la segunda "panza de burra" entonces sí que es la reunión. Simultáneamente me doy cuenta de que hay un segundo clavo que por despiste no había visto al principio, así que habiendo dos clavos bastante juntos y paralelos se resuelven mis dudas y monto reunión de pie en un sitio incomodísimo. Además, luego me diría Fran que estaba justo más o menos en la marca de los 30 metros, así que llevaba 30 metros de largo y por tanto la cosa iría muy justilla para llegar a superar la "panza de burra" de arriba.

Cuando está todo listo aviso a Fran para que suba. Mientras sube, me doy cuenta que en el pequeñísimo nicho que hay poco más de un metro más arriba hay un puente roca con un cordino gordo, lo que por un lado confirma de nuevo que efectivamente esa es la reunión y por otro que me voy a poder meterme en un sitio un pelín más cómodo... pero tengo que trasladar la reunión de los dos clavos al puente roca, y mientras está subiendo Fran no puedo hacerlo, así que tengo que esperar a que llegue.

Fran va subiendo. Yo no le veo, pues desde la reunión solo se ven los metros finales de llegada tras superar el resalte, pero al cabo de un rato le veo asomar. La cuerda recogida la he ido colocando como he podido para evitar que estorbe tanto ahora como en la maniobra de traslado de la reunión que voy a hacer.

Fran, asomando tras superar el resalte del largo 5

Fran llega a la reunión, bloqueo la cuerda, Fran se ancla y hago la maniobra de traslado de la reunión con la ayuda de una exprés para estar asegurado en todo momento. Con ello puedo subirme al nicho... joder... vaya mierda de reunión, si prácticamente ni quepo con la mochila, casi no me puedo mover y por tanto ni están las cosas como para andar quitándome la mochila ni tampoco tengo un sitio claro donde colgar la mochila una vez quitada... pues nada, no hay más remedio que tensar el cabo de anclaje y quedarme medio colgado. Fran no tiene más remedio que quedarse de pie donde estaba yo inicialmente.

Me comenta Fran que la cordada de la "Regil" viene como una moto, de hecho vienen prácticamente tras él. Me comenta Fran que lo mejor es dejarles pasar. Además la roca está congelada y de escalar los dedos se te quedan "tiesos", así que Fran también necesita unos instantes de parada en la reunión para recuperar la temperatura de los dedos antes de seguir escalando.

Vamos a estar un poco incómodos en esta reunión mientras ellos pasan, pero me parece bien, y sobre todo después de ver cómo sube el primero de la cordada de la "Regil". Son un chico y una chica; el chico va de primero todo el rato y lleva un ritmo endiablado, pues se ve que tiene una soltura impresionante... de hecho se hace este largo casi sin poner seguros, a pesar de que Fran le indica la presencia de algún clavo, a lo que el chico contesta con un "da igual".

Efectivamente el chico llega y le comento lo de los dos clavos de abajo por si quiere hacer reunión ahí, pero decide continuar y empalmar con el siguiente largo... Bueno, parece que conoce la vía y que sí que debe dar la longitud de cuerda para empalmar estos dos largos, aunque debe de llegar bastante justa... me pregunto si no está evitando en lo posible el poner seguros para asegurarse de que llegue la longitud de cuerda para empalmar los dos largos.

El caso es que se ha ventilado el largo 5, sin poner casi ningún seguro, chapa en el puente roca de la reunión en la que estoy y sigue a toda máquina para arriba. Mientras tanto nosotros esperamos, pero no tarda mucho en avisar a su compañera de cordada de que ya puede subir. La chica sube un tanto apurada, intentando ir rápida por no entretenernos mucho, pero intentamos sosegarla para que no le dé importancia y preste la suficiente atención a la escalada, aunque vaya de segunda.

En la incomodísima reunión 5. Las cuerdas que se ven pasar son las de la cordada de la "Regil"
Las cuerdas de la cordada de la "Regil" suben bastante directas ya que apenas les han puesto seguros
Vistas de los descensos de Vega Urriello a Pandébano y a Camburero desde la reunión 5


Largo 6 (V/V+): La auténtica "panza de burra"

Le toca a Fran de primero. Nada más pasar la chica y darle unos metrillos de ventaja sale Fran... estábamos deseando salir de esta incomodísima reunión 5, aunque a mí todavía me toca aguantar un buen rato en ella mientras Fran resuelve el largo 6.

Desde donde estoy no puedo ver a Fran, ya no solo porque no puedo prácticamente moverme en esta reunión sino porque tampoco tengo visión directa.

Fran va resolviendo el largo, pero no se nada de él; tan solo le oigo algún comentario de escalar en "X" la "panza de burra" que lo dice en tono jocoso ya que otras veces hemos bromeado con eso de escalar en "X". También le oigo de vez en cuando echarse el aliento en los dedos, en un intento de que éstos recuperen algo de temperatura.

Fran hace una foto hacia abajo justo antes de intentar superar la auténtica "panza de burra"... Imaginarse que en este mismo sitio, bien encaramado en una chimenea vertical o incluso algo desplomada y en oposición, estaría más o menos así el Marqués de Pidal cuando se le subiría a los hombros el Cainejo, pone los pelos de punta.

Al cabo de un rato le oigo que ha hecho reunión. Cuando va a recuperar cuerda le aviso para que no lo haga muy bruscamente ya que la cuerda la tengo recogida un poco abajo (por lo del traslado de reunión tras el largo anterior) y si se me descuelgan bucles hacia abajo podría llegarse a engancharse. Un poco después me avisa de que que ya puedo subir. En ese mismo instante se me dispara el resorte del culo... ¡por fin voy a salir de esta odiosa reunión!

Empiezo a remontar la verticalísima chimenea, para lo cual efectivamente va bastante bien escalar en "X". La chimenea se va complicando por momentos. Llega un punto ya cerca de la "panza de burra" propiamente dicha que hay que superarla, mejor un poco por la izquierda. Hay algún paso durete en el que casi tengo la sensación de "irme", pero sale finalmente. A este paso de la "panza de burra" en otras zonas de escalada yo le hubiera dado un V+, pero como aquí en Picos los grados son algo "caros" se podría aceptar dejarlo como un V; por eso en el encabezado de la descripción del largo lo he señalado como V/V+.

Y yo sigo flipando cada vez más con Pidal y Cainejo, pues ya solo me faltaba imaginármelos superando la "panza de burra", el Marqués de Pidal malamente sujetado en oposición en la chimenea justo antes de la panza y mientras el Cainejo subiéndosele por encima...

Tras superar el paso de la "panza de burra" necesito unos segundos para respirar. Mientras tanto, Fran que ya me tiene a la vista, me dice que está en una reunión incomodísima... remonto los escasos pasos que me separan de él para confirmar que afortunadamente es una broma y se trata de una amplísima reunión.

Recobrando el aliento tras superar la "panza de burra"
Unos pasitos ya sin dificultad y me incorporo a esa amplísima reunión

La reunión es tan sumamente amplia que puedes quitarte los gatos y la mochila y dejarlos en cualquier lado. Además es muy horizontal y lisa, de tierra, resultando tremendamente cómoda. También necesito unos minutillos para recuperar la temperatura de los dedos antes de meterme en el siguiente largo.


Largo 7 (V/V+): El largo engañoso.

Me toca de primero. Creíamos que ya habíamos superado todos los pasos complicados, pues según la reseña que tenía este largo venía de IV+ y la apariencia visual de lo que venía a continuación no tenía pinta de excesivamente complicado.

Sin embargo, la realidad era bien distinta y realmente todavía nos quedaba un buen toro por torear.

No obstante, nosotros en ese momento no somos conscientes y ya tenemos el pensamiento en que la vía va a aflojar y nos vamos a poder relajar un poco.

Empiezo. Desde la reunión hemos avistado un puente roca con un cordino blanco y parece bastante fácil llegar hasta él, por lo que mi primera intención es colocar en él el primer seguro. Los primeros tramos son fáciles, pero luego el puente roca pilla un poco más alto de lo que parecía en la reunión (ya que la parte de abajo de la chimenea quedaba tapada visualmente) y no es cuestión de arriesgar ya que esto está muy vertical, así que coloco un Alien azul en una hendidura y así ya puedo subir más tranquilo.

Alcanzo bastante bien el cordino del puente roca para chaparlo. Hasta aquí es bastante evidente, pero ahora ya empiezo a mirar a un lado y a otro para buscar la mejor forma de paso, ya que esto está muchísimo más vertical de lo que parecía desde la reunión y la cosa pinta algo más complicada de lo que nos pensábamos.

He chapado en un puente roca de un bloque empotrado y ahora busco a un lado y a otro la mejor forma de progresar

Al poquito del puente roca, veo un clavo en la pared de la derecha. Me llama un poco la atención su ubicación, en la pared de la derecha en lugar de en la propia chimenea, pero no le doy mayor importancia. Lo chapo y continúo.
 
Vista desde la reunión

Poco a poco voy progresando y, como en el largo anterior, cada vez se va complicando un poco más.

Un poco más arriba

A la vez que se va complicando la cosa, yo cada vez rebusco más en busca de agarres y formas de progresión.

Un zoom. Busco agarres por todos los lados para intentar descubrir la mejor forma de paso

Me encuentro un clavo viejo casi de casualidad, pues casi ni se ve y eso que lo tengo en las narices. Es el único clavo en mal estado que debe quedar en la vía... ¡qué raro que se lo hayan dejado sin renovar!... Bueno, más vale eso que nada, así que lo chapo. Un poco más arriba ya veo un clavo en buen estado, consigo llegar a él y lo chapo. Decido recoger la exprés que chapé en el clavo viejo y que todavía tengo a mano, la verdad no recuerdo por qué motivo la retiré, pero en cualquier caso ya me encontraba bien asegurado por el clavo de arriba.

En ese punto ya me quedan muy pocos pasos para salir por encima del resalte, pero no encuentro una forma "decente" de progresar. Al igual que los otros resaltes, la salida desploma un poco. Los agarres que hay son muy romos; incluso hay unos por la derecha que están superpulidos y tienen un tacto como si les hubieran aplicado polvos de talco para que resbalaran más. Fran me dice que me salga por la derecha, que se ve mejor, pero tampoco se ve nada fácil salirse a la derecha por aquí, entre otras cosas por esos agarres "con polvos de talco"...

Peleando con la parte final
Un zoom

Empiezo a entrar en problemas cuando me quedo un poco encasquillado en una postura de avance por el lado izquierdo y en la que no consigo coger nada decente para auparme hacia arriba... noto que me estoy petando poco a poco y aunque creo que puedo aguantar bastante en esta postura, evidentemente no podré estar indefinidamente... no es excesivo problema porque el clavo de antes, que se ve bastante sólido, me protegería perfectamente de una posible caída, pero a nadie le gusta caerse... así que hay que buscar soluciones. Busco la postura y los agarres menos malos de los posibles y tiro para arriba a ver si hay suerte y consigo subir... ¡¡Aupa!! Y ya está; como siempre el cuerpo es capaz de hacer más de lo que te dice la mente ... jolín, menos mal que "iba a aflojar la dificultad", pues he pasado el momento más tenso de la escalada, aunque tampoco es que haya visto peligrar mi seguridad.
 
Un apretón y por fin consigo superar el resalte
Una vez superado el resalte. Aquí se puede apreciar un poco mejor la verticalidad del largo. También se ve la cómoda reunión 6 donde está Fran

Tras el resalte se encuentra la comodísima reunión 7, en la que incluso tienes para sentarte cómodamente. Monto la reunión y aviso a Fran para que suba, no sin antes avisarle, aunque ya me ha visto pelear con el largo, de que en la parte de arriba va a tener que pensarse los movimientos. Él me contesta que yendo de segundo no va a tener que pensar mucho y que ya veré cómo enseguida se va a plantar en la reunión en la que estoy.

Fran empieza, y cuando veo que la cuerda llega un momento que se frena y que le cuesta mucho tiempo avanzar deduzco que no le está resultando tan fácil como presuponía, aunque fuera de segundo, con lo que no puedo evitar que se me dibuje una amplia sonrisa en la cara. 

Finalmente Fran consigue superar el resalte y llegar a la reunión. Me cuenta que él finalmente ha recurrido a subir en oposición con la espalda y la mochila apoyada en la roca. La verdad es que, ya por curiosidad, no he conseguido imaginarme exactamente cómo lo ha hecho, viendo la morfología de la chimenea.

Fran llegando a la reunión
Comodísima reunión 7...
... y con magníficas vistas


Este largo, al igual que al anterior, yo creo que le cotaría de V+, aunque siendo Picos podría aceptarse como V. En cuanto a comparativamente, no sabría decir si el paso más fuerte de la vía (con la salvedad de lo que comento en los párrafos siguientes) es éste o el del largo anterior; a mí me ha costado más éste que el anterior, y así he visto que opina mucha gente, pero también creo que en parte todo depende de si das más o menos fácilmente con la combinación de movimientos más adecuada para superarlos.

En cualquier caso este largo me ha parecido muy lejos de poder considerarse un IV+ como pone la reseña que he llevado. En contraposición, he visto unas cuantas reseñas que indican que este paso o este largo es el más difícil de la vía... ¿Cómo se come eso? ¿Por qué hay tal disparidad de opiniones?... 

Me daba en la nariz que aquí había gato encerrado, así que al volver a casa me puse a investigar un poco sobre este largo y enseguida di con la clave:

La cuestión es que he visto que mucha gente hace este largo saliéndose a la pared de la derecha a la altura del cordino blanco del bloque empotrado, tras el cual hay un clavo en la pared de la derecha. De hecho ese clavo está curiosamente situado en la pared de la derecha como indicándote o preparado para que salgas por ahí. Esto no solo lo he leído en reseñas, sino que he localizado incluso alguna foto en la que se ve al escalador salirse a la pared de la derecha:

Foto obtenida de internet en la que el escalador se sale de la chimenea por la pared de la derecha para progresar más fácilmente y saltarse las dificultades
Foto hacia abajo que hice según me estaba metiendo en pleno meollo. En la pared de la derecha (izquierda en la foto) se aprecia el clavo al que hago referencia y que parece que quiere llevarte a la pared de la derecha. Como se ve, se sube a la parte alta de la pare de la la derecha y luego por ella se debe progresar mucho más fácilmente. Desde donde estoy yo esto ya no es posible de una forma medianamente fácil.

Asimismo,  también he consultado la guía de Raúl Lora y confirma lo mismo, pues hablando de este largo dice literalmente:

"Alcanzar un puente de roca y después un clavo; una vez superada esta zona, es mejor desplazarse unos tres metros a la derecha para continuar por un diedro poco inclinado en lugar de dirigirse directamente por el fondo de la chimenea hacia dos clavos que hay unos metros mas arriba en una fisura vertical".

Misterio resuelto; y ahora que cada cual cuando le llegue el momento escoja entre la alternativa "fácil" o la "emocionante", teniendo en cuenta que en la "emocionante" también tiene un flamante clavo en la parte alta que te va a proteger perfectamente.


Largo 8 (IV): Por fin la cosa afloja y se acaba esta larguísima chimenea

Le toca a Fran de primero. El largo 8 ya sí que de verdad parece que va a ser fácil. Además se ve corto. Hablamos Fran y yo de qué estrategia seguir, de cara a la posterior trepada. No tenemos claro lo que nos vamos a encontrar después, tanto de dificultad como de posibilidades de montar reunión, así que acordamos que haga el largo y vaya viendo lo que hay después y vamos decidiendo sobre la marcha. También decidiremos sobre la marcha la forma de realizar las trepadas hasta la cima: largos, ensamble o desencordados.

Empieza Fran. El largo es fácil, solo algún pasito de IV, así que no tarda mucho en coronarlo y llegar a la trepada. Tras eso le pierdo de vista, así que espero sus noticias por el walkie.

Fran a punto de coronar el fácil último largo

Enseguida me avisa Fran por el walkie que, según lo que ve, cree que lo mejor es apurar el largo. Continúa y cuando le aviso de que se acaba la cuerda para y monta reunión con friends. 

Yo remonto el largo propiamente dicho rápidamente y llego a la parte de nuestro largo en la zona de trepadas. Allí hay que ir con cuidado ya que las piedras se caen solo de mirarlas y eso te obliga a trepar despacio, especialmente porque piedrecilla que sueltes es piedrecilla que cae recorriendo toda la grieta Pidal con el consiguiente peligro para las cordadas que vengan por ella.

Por cierto, no lo he comentado, pero la caída de piedras es relativamente frecuente en esta vía, así que hay que tener muchísimo cuidado especialmente a partir del largo 4 tanto por lo que te pueda caer de arriba como por lo que puedas tirar tú o el movimiento de tus cuerdas a los que vengan por abajo. Lo que se caiga por la grieta Pidal, al ser muy vertical la recorre hasta abajo, pasando directamente por el recorrido de los largos que la remontan. En más de una ocasión pequeñas piedras pasaron silbando junto a nosotros, haciendo un zumbido con el aire como si fueran proyectiles, zumbido que inquietaba mucho. Mucha precaución con eso y continúo el relato.

Llegando a la reunión la canal se bifurca en dos: una tira más o menos recto y otra por la izquierda. Fran ha optado acertadamente por la que sigue más o menos recto porque le parecía la más lógica. Aunque supongo que por la otra también se acabará llegando más o menos bien a cima.

Finalmente me junto con Fran en la reunión.


Trepada final (pasos de III): Al lorito con descuidarse

Deliberamos brevemente sobre cómo vamos a afrontar las trepadas finales hasta cima. A la vista del panorama consideramos que podemos hacerlas desencordados, aunque con muchísima precaución, tanto porque aunque el terreno tumba un poco sigue existiendo peligro de caída en una zona en la que hay trepadas de grado III y roca un poco descompuesto, como por el riesgo de tirar piedras a las cordadas que vengan por abajo. Por otra parte, el hecho de ir desencordados evita el altísimo riesgo de tirar piedras hacia abajo con la cuerda.

Vemos que las trepadas, sin ser complicadas son algo delicadas y expuestas, así que decidimos continuar con los pies de gatos puestos y creo que es lo más recomendable.

Vamos trepando poco a poco, muy despacio para no tirar piedras, lo cual es complicado ya que hay muchísima piedra suelta. En algún punto parece que vas a acabar ya, pero al coronarlo descubres que todavía siguen las trepadas un poco más.

La dificultad de las trepadas enseguida va bajando a II, pero cuando ya estás bastante arriba hay pequeñas pedrerillas resbaladizas por lo que parece recomendable en la parte ya final salirte por las placas de la derecha.

Por fin nos da de nuevo el sol, ¡ya lo echábamos de menos!, y en breves instantes nos plantamos en la cima del Naranjo de Bulnes, ya que esta vía va a dar prácticamente a la cima. 

Cima

La otra vez que hice cima en el Naranjo no estaba la imagen de la Virgen de las Nieves, así que me hace ilusión que esta vez sí que esté. Nos felicitamos Fran y yo por la escalada y rápidamente nos hacemos las fotos cimeras, antes de quitarnos mochilas, pies de gato,... ¡¡qué ansiosos!! Bueno, también es que vemos que están llegando otros escaladores y preferimos hacernos las fotos más tranquilos antes de que lleguen.

Foto cimera
Con la emblemática imagen de la Virgen de las Nieves

Soltamos las mochilas y nos cambiamos los pies de gato por las respectivas botas (yo) o zapatillas (Fran). También nos quitamos la cacharrería del arnés, pero no el arnés que lo vamos a necesitar para bajar por los rápeles.

Nos tiramos un buen rato en la cima contemplando el paisaje, sacando fotos y bebiendo y picoteando para reponer fuerzas. Al rato vemos llegar por la salida de la Pidal-Cainejo la cordada que llevábamos por debajo en la vía y que venían de la "Schulze". 

Hacemos más fotos y se está de miedo en la cima contemplando el paisaje... dan ganas de quedarse todo el día aquí. Pero llega un momento en el que hay que decidirse a bajar.


Descenso y regreso al coche

El descenso me lo conozco bien así que no hay problema. No obstante hay escaladores para arriba y para abajo que en caso de duda acabarían descubriéndote el recorrido a seguir.

El descenso consiste en un tramo de cresteo hasta el destrepe del anfiteatro de la cara sur, el propio destrepe del anfiteatro a los rápeles y los tres rápeles que te dejan al pie de la cara sur.

Escaladores por la cresta de camino al destrepe del anfiteatro.

No voy a enrollarme contando el descenso hasta el pie de pared, pues ya está contado y con fotos en la entrada «Naranjo de Bulnes. Vía "Regil" (abandono) y vía "Directa de los Martínez"» (pincha para ver), y en esta ocasión apenas hicimos alguna foto encaminándonos a la Canal de la Celada.

Solo comentaré el problema que tuvimos en los rápeles... ¡que parecemos principiantes!: Hacemos el primer rápel sin haber tenido la buena costumbre de "pasar" completamente ambas cuerdas para evitar rizos y bucles, así que cuando vamos a recuperar cuerda vemos que se atasca. Como tenemos la cuerda del mismo color Fran y yo lo achacamos a que nos hemos liado o despistado y hemos tirado de la cuerda que no era y se ha atascado el nudo en la instalación de rápel. Hay unos escaladores arriba del rápel así que les pedimos a gritos que nos miren a ver qué pasa. Nos dicen que hay un nudo y nos lo solucionan para que podamos recuperar las cuerdas.

Seguimos en el siguiente rápel. Una de las cuerdas me la lanza Fran muy hacia la derecha, por indicación de otro escalador que hay en la reunión de la cordada que está rapelando por delante nuestra, y como Fran no conoce el rápel le hace caso pensando que hay que rapelar en esa dirección. Cuando rapelo (voy yo primero todo el rato, ya que llevo sistema autoblocante y puedo ir parando a descolgar los tramos de cuerda que pudieran haberse quedado enganchados al lanzarla) me toca hacer un buen pendulazo por la pared en un punto para conseguir desenganchar un tramo de cuerda que se ha quedado enganchado en canalizos bastantes metros a la derecha.

Cuando rapela Fran y vamos a recuperar la cuerda nos vuelve a pasar lo mismo.... ¡no puede ser!, ¿estaremos tan tontos de habernos equivocado otra vez con la cuerda de la que hay que tirar?... Tras costarnos bastante comunicarnos a gritos para que nos vuelvan a ayudar los de arriba, ya que ahora nos separan casi 60 metros y no tenemos visión directa, baja uno de ellos y nos dice que el problema es que se hacen nudos porque llevamos las cuerdas muy rizadas. El que ha rapelado ayudándonos ha ido pasando un mosquetón entre nuestras cuerdas para irlas soltando y mientras tanto nosotros hemos tenido que tirar a lo bestia de la cuerda hasta que hemos conseguido recuperarla.

Descubierto el problema nos entretenemos en desrizar una de las cuerdas pues la otra ya la hemos ido descolgando algo en el siguiente rápel y pensamos que con eso será suficiente y así no tenemos que recuperar y pasar la otra cuerda. Cuando rapelo yo, tengo mucho cuidado en intentar no rizar las cuerdas, pero cuando estoy a punto de tocar suelo, en unos desplomes, veo que la cuerda vuelve a estar muy rizada por abajo, así que me entretengo unos cuantos minutos colgado como un chorizo en intentar resrizarla un poco. Finalmente aterrizo en el suelo y termino de desrizarla mientras rapela Fran. Aterriza Fran y el esfuerzo que me he tomado en desrizarla da sus frutos ya que, ahora sí, recuperamos la cuerda sin problemas.

Recogemos cuerdas y ya hacemos el camino de vuelta por la canal de la Celada, sin dejar de mirar de vez en cuando el Naranjo según lo vamos rodeando.

Pared de la cara sur, que se desciende en tres rápeles tras haber destrepado el anfiteatro
Una foto a los inicios de nuestra aventura de hoy. La vía comienza casi a media altura y un poco a la derecha en la foto.

Saliendo ya de la canal de la Celada hay un desvío que lleva directamente al camino de bajada a Pandébano. Se me ocurre que podemos dejar allí los bultos e ir descargados al refugio a por agua y el resto de nuestras cosas y volver aquí para continuar hacia abajo. A Fran le parece bien, pero antes decidimos darnos un pequeño festín de comida. Algunos escaladores que pasan por allí entablan conversación con nosotros.

Al acabar este festín dejamos las cosas y subimos solo con mi cantimplora hacia el refugio. El cielo está "aborregado" con pequeñas nubes presentando una estampa curiosa. Llegamos al refugio, bebemos y cargo la cantimplora, aunque no mucho porque no creo que vayamos a necesitar mucha agua. Hacemos alguna foto al Naranjo desde el refugio, recuperamos el resto de cosas y vamos al inicio de la Canal de la Celada donde hemos dejado las mochilas de escalada.

Una curiosa estampa del cielo "aborregado"

¿Cuantas veces habremos hecho esta misma foto y cada vez que se pasa por aquí se vuelve a hacer?

Llegamos a donde las mochilas de escalada y allí echamos un ratillo componiendo la mochila completa para la bajada. Los frontales los dejamos a mano porque nos va a coger la noche de bajada.

Cogemos el sendero que enlaza con el de bajada a Pandébamo y tiramos hacia abajo. Bajamos a un ritmo bastante rápido. Se nos echa la noche y encendemos el frontal. Vamos bajando a toda pastilla, pero llegado un momento hacemos una parada para quitarnos la mochila para beber y quitarnos el jersey ya que tenemos calor... ya no hace el fresquete de allí arriba. Finalmente llegamos al coche, habiendo tardado menos de hora y media.


Vuelta a casa

Llamamos varias veces a un compañero del club de montaña  ya que están en Sotres y podemos quedar para tomar una cerveza, pero no conseguimos contactar con él y cogemos el coche.

La primera idea era trasladarnos en coche a dormir al pie de una interesante vía ferrata, para intentar hacerla antes de que descargaran las lluvias que estaban previstas para el mismo domingo por la mañana, pero entre que vemos que las previsiones han empeorado y que Fran no anda con muchas ganas decidimos tirar hacia casa con la idea de continuar mientras me note bien conduciendo y parar si me veo cansado.

Voy bien conduciendo y nos ha caído algún chaparroncillo de camino. Pero ya llegando a Aguilar de Campoo empiezo a notar los primeros síntomas de sueño, así que le digo a Fran de parar en un pueblo en cuanto pasemos Aguilar de Campoo y vivaquear allí, pues hay que tener muchísimo cuidado con eso de dormirse conduciendo y arruinarlo todo en simplemente tres segundo que cierres los ojos.

Veo un pueblo con una llamativa iglesia con pinta de tener soportales, así que nos metemos en el pueblo... pero los soportales, que efectivamente tenía, estaban cerrados con una verja y candado, así que al final nos acoplamos en la explanada de hormigón a la entrada de una nave, ya que las zonas de césped estaban mojadas. Allí cenamos y nos dormimos.

A las 3 de la madrugada empieza a llover y despierto a Fran, que estaba tan profundo que lo mismo se hubiera despertado a la mañana sin haberse enterado. Nos cobijamos, pero vemos que no para, así que decidimos continuar en coche hasta localizar algún sitio dónde dormir cobijados.

En el pueblo siguiente localizamos una parada de autobús cubierta cerca de una rotonda y allí que nos echamos a dormir, a pesar de pasara algún que otro coche por la rotonda de vuelta de alguna juerga. A la mañana siguiente, nos levantamos, desayunamos y ya rematamos nuestro viaje hasta casa.


2 comentarios:

  1. Enhorabuena por la vía.
    Es de obligada escalada por todo lo que supone y por ser verdaderamente consciente de lo que hicieron el Cainejo y Pedro Pidal aquel entonces...
    Me alegro de que el croquis os fuera de utilidad.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Diego. Ya comento que vuestro croquis es, sin duda, el mejor de los que he visto. La vía ciertamente es una maravilla... un imprescindible, tanto por la vía en sí, como por la enorme carga histórica que lleva. El que no haya hecho esta vía no puede ser plenamente consciente de la increíble hazaña de el Cainejo y Pidal (yo también pongo delante al Cainejo, todo un héroe y verdadero protagonista), y el que la haga se sorprenderá, como nos hemos ido sorprendiendo todos al hacerla.
      Saludos!

      Eliminar