lunes, 9 de diciembre de 2013

Mascarat. Vía "Llobet Bertomeu" (250m, 7 largos, V+)

Mascarat. Vía "Llobet Bertomeu" (250m, 7 largos, V+)
Año 2013. Participantes: Fran y yo.

Después del exigente Diedro UBSA de ayer en el peñón de Ifach (Peñón de Ifach. Vía "Diedro UBSA" (250m, 8 largos, V+)), no sabíamos que tal de pilas nos íbamos a levantar hoy, pues la vía es menos mantenida que la de ayer pero también tiene su cierto grado de exigencia.

Se trata de una vía con una roca excelente, como la del Puig Campana, con los largos 1 y 3 claramente más fáciles pero el resto muy mantenida. Muy recomendable.


Empezamos (pincha sobre las fotos para verlas a mayor tamaño):

Datos
Longitud de la vía: 250 m.  Nº largos: 7.     Dificultad máxima: V+
Características: Vía muy disfrutona, con una roca excelente, al estilo del Puig Campana. Muy vertical, especialmente desde el cuarto largo. Espectaculares tanto el diedro del quinto largo como la travesía del séptimo largo.
Material: El normal: juego de fisureros, juego de friends y demás.
Equipamiento: Reuniones semiequipadas (frecuentemente chapas, en algunos casos viejas, y cordinos en puentes-roca). Chapas o clavos en bastantes puntos intermedios. Algunos largos están más o menos equipados, pero otros no tanto.
Pasos clave: Sin duda el diedro del quinto largo, afortunadamente protegido con chapas. En la última chapa de dicho diedro hay un paso cuya dificultad podría rondar el 6a.
Posibilidades de escape: Aparentemente no son fáciles y ademas pasarían por abandonar cintajos o algo de material...
Tiempo de escalada: unas 4 horas.
Tiempos de aproximación desde el coche y regreso: La aproximación a pie de vía se hace andando por la carretera en unos 10 minutos. El retorno son unos 30 minutos de descenso y otros 15 de andar por la carretera.
Cimas: No.

Croquis: 
  


Fecha:  24 de noviembre de 2013


Aproximación

El día anterior habíamos realizado el Diedro UBSA en el Peñón de Ifach (picha aquí para ver) y dormido junto al parque natural. Esta noche habíamos dormido de lujo en nuestra "suite", quizás también por el cansancio del día anterior.

Por experiencia, no sabíamos si la exigente escalada del día anterior nos iba a pasar factura hoy y nos iba a pillar de bajón, pero la verdad es que los dos nos despertamos con ganas de meternos en esta vía.

Tras la rutina habitual de desayunar y recoger todo nos trasladamos en coche al barranco del Mascarat, a la urbanización "Maryvilla" donde dejamos el coche.

Ahí, sacamos todo el tenderete y nos preparamos. Salimos andando de la urbanización y cogemos la carretera en dirección sur hacia el inicio de la vía. No sé si habrá otro sitio mejor para dejar el coche por el otro lado de los túneles; es posible, pero la verdad es que ni me molesté en mirarlo, ya que las reseñas que había leído indican todas dejar el coche en esta urbanización.

Recorremos la carretera por la cuneta, existiendo aceras cuando se pasa en viaducto y en túnel. Enseguida nos encontramos a pie de vía, muy fácilmente reconocible por la caseta que tiene al lado. 


Desarrollo de la escalada

El reparto de los largos estaba condicionado por el largo del diedro, el quinto, que estaba adjudicado a Fran, el fanático de los diedros. También es el largo de mayor dificultad, que se compensa con que le tocan también los de menos dificultad. A cambio me tocan todos los largos de V, es decir, una escalada muy mantenida de grado. Los dos estamos de acuerdo y por tanto a Fran le tocan los largos impares y a mí los pares.

Dicho esto, tengo que indicar que antes de hacer la vía, teníamos una idea distinta de donde estaban las reuniones y cuales eran los largos, idea que tenía a través de las reseñas que había leído, pero luego nos encontramos una realidad distinta.
 

Largo 1 (IV): fácil, de precalentamiento

Comienza Fran el primer largo. En teoría hay una inscripción que pone UBSA al inicio de la vía, pero ni nos damos cuenta de buscarla, pues la vía se ve bastante evidente: hay que ir hacia una valla metálica que se ve desde el incio de vía, y allí se monta reunión en la propia valla. 

Fran empieza y sube rápido. El largo es tán fácil que se tira hacia donde parece un pelín más vertical, para hacerlo más entretenido. Allí encuentra una chapa, lo que indica que ha acertado al ir por ahí. Algún pasito sin mucha complicación lleva a una repisilla y a la izquierda de ésta se encuentra la valla donde hace reunión.
 
Fran atacando el primer largo

Mientras tanto yo me encuentro asegurándole a pie de via, y a la vez contemplando mis pies de gato con la puntera totalmente despellejada... necesitan un urgente recauchutado, pero espero que hoy todavía se comporten como siempre. Adelanto que no me fallaron.

De repente nos encontramos con un pequeño problema: cuando intento hablar por el walkie con Fran se oye como el sonido de un tren. Como justamente en ese momento estaba pasando un tren, lo primero que pensé es que el tren nos estaba metiendo interferencias. No obstante, cuando la situación persiste, me doy cuenta que los walkies se nos han quedado sin batería. Tenemos la opción de usar las pilas de los frontales, pero en ese momento pienso que en mi frontal solo hay 3 pilas y necesitamos 6: no me doy cuenta que Fran en su frontal también tiene otras tres pilas. En resumen, la escalada de hoy nos toca hacerla sin walkies ya que ayer nos pulimos la batería que cada vez dura menos; no es un gran problema, pero es un incordio cuando ya estás acostumbrado a ellos.

Cuando Fran ha montado reunión, empiezo a subir. Como es un largo fácil, solo algún pasito de tirar un poco de brazos, nos lo ventilamos rápido.

Repisilla final de llegada a la reunión


Largo 2 (V): Muro vertical con inicio delicado, para entrar ya en faena

Me toca de primero. El largo 2 ya es otra cosa. El inicio se ve cañero y me obliga a estudiarlo bien antes de iniciar el largo.
 
Enseguida veo un par de chapas que marcan la trayectoria a seguir. Sin pensármelo mucho más me lanzo a por él y lo voy resolviendo poco a poco.

Iniciando el largo 2
En el largo se alternan algunos pasitos más de pensarlos con otros más fáciles, pero en general es mantenido y bastante vertical. 
 
Trabajándome el largo

No obstante, no es un largo de muchos metros y se lo va ventilando uno bien, de forma que cuando uno quiere  darse cuenta ya está arriba del espolón al que va encaminado el largo.

Llegando arriba del muro

Llegado arriba, enseguida se ve un cordino a la izquierda donde se monta la reunión, que se puede reforzar con otro puente roca donde es posible que anteriormente hubiera otro cordino, pues había leído reseñas de que la reunión tenía dos cordinos, y lo mismo estaba en mal estado y alguien lo ha quitado. No obstante, en este tipo de roca se puede uno sacar de la manga una reunión relativamente fácil, pues abundan grietas, lajas fácilmente lazables y puentes roca. Y aprovecho como consejo no fiarse mucho de cordinos viejos; es mejor reforzar; y sobre todo no confiar la reunión a un único anclaje: las reuniones son la base de la seguridad de cualquier escalada.

Fotografío a Fran desde arriba del muro. A la izquierda se ve la caseta del inicio de la vía
En la reunión 2 estoy encima de la carretera

Largo 3 (IV): Arista horizontal + tramito fácil

Le toca a Fran de primero. El largo se inicia con un tramo de arista en horizontal, que se hace andando sin problemas. Le sigue otro tramo ya de escalada, muy facil, con algún pasito de IV. 

Tras este tramo, se encuentra un cordino donde poder hacer una reunión. Fran la salta e intenta llegar hasta el inicio del siguiente largo, en un tramo que prácticamente es una explanada que se va andando como el que va de excursión. La cuerda, de 60 metros, se queda un pelín corta, así que opta por volver al punto anterior donde montar reunión, cosa que hace sin problemas porque es un tramo totalmente de andar. Nos ha costado un pelín entendernos sin los walkies, pero al final nos hemos entendido. Allí monta la reunión
 
Fran en la reunión 3
Fran, desde la reunión 3, me fotografía en la reunión 2
Un zoom. Abajo a la izquierda se ve una valla antidesprendimientos: parece que vamos con red, como en el circo.

Según me avisa que ya puedo subir comienzo a remontar el largo. Como es muy fácil, enseguida me junto con él.

Cogemos las cuerdas como están y nos trasladamos andando al inicio del largo 4.
 

Largo 4 (V): Muro mantenido

Me toca de primero. El inicio del largo es fácilmente identificable por una inscripción "UBSA" en la pared, inscripción que también se encuentra al inicio de la vía y en la reunión 4.

Inscripción "UBSA" en el inicio del largo 4

Desde el inicio del largo hay que afinar la vista hasta dar con un par de chapas. Éstas te indican el trayecto a seguir. El terreno no parece nada difícil a primera vista, pero cuando empiezas a subir compruebas que da algo más de guerra de lo que parece.

Subiendo el largo 4

A la altura de la segunda chapa, se alcanza un pequeño (por anchura) diedro. No hay que seguir por él sino que una vez chapada la segunda chapa enseguida subir el escalón hacia la derecha

Tras asegurar en la segunda chapa hay que subirse al escalón de la derecha

Tras superar el escalón, el terreno, al igual que antes, sigue relativamente vertical y los agarres y apoyos escasean algo, por lo que hay algunos pasos delicados que hay que mirárselos un poco. La presencia de algunas chapas confirman que voy por buen camino. Éstas en un momento las veo demasiado alejadas, pero luego me dijo Fran que es que me había saltado alguna que no había visto. En resumidas cuentas, que el muro del largo está bien equipado (chapas cada 5 metros más o menos), aunque como las chapas no están muy relucientes que digamos, si quieres aprovecharlas todas hay que estar más atento que yo. Algún tramo de esta segunda mitad del muro da su guerrilla y exige mirarse los movimientos que vas a hacer, pero luego se va haciendo bien. Fran al final del largo me diría "te lo has trabajado bien", y efectivamente ese es el término más adecuado: no es difícil pero hay que trabajarlo un poco. 

Trabajándome la placa de la segunda mitad del muro de este largo

Según la reseña que tengo, tras superar el muro sale una repisa a la derecha que hay que recorrer en unos 10 metros hasta llegar a la reunión. Cuando llego a lo que parece lo alto del muro y miro a mi derecha: no se ve claramente una repisa; o al menos yo estaba pensando en algo más acogedor. Lo que veo me hace dudar, pero observo que no hay otra cosa por la zona que encaje mejor con la descripción de "una repisa". Lo que hay es una especie de repisilla guarrindonga, estrechurria y rota, por lo que hay que ir con manos, y con algo de vegetación; es casi una travesía muy fácil, más que una repisa. La empiezo a recorrer y enseguida veo unos cordinos o algo así que me confirman que voy bien, pero, como ni he recrrido 10 metros ni hay pistas de que esté cerca el famoso diedro del siguiente largo, continúo un poco más. Efectivamente, unos metrillos más adelante hay una chapa y dos clavos tremendamente oxidados y más viejos que Matusalén. Refuerzo un poquillo esta reunión. La chapa parece preparada para guiar la cuerda hacia el diedro que no se vé pero se intuye que está apenas dos metros a la derecha, así que hay que dejarla para permitir el chaparla en el siguiente largo.

Tras montar la reunión, aviso a Fran y éste comienza a subir. Nos apañamos a gritos, aunque cuando pasa tráfico por la carretera resulta algo más complicado oirnos. Desde la reunión apenas le veo en algún momento, pero al cabo de un rato le veo aparecer por la "repisilla" y en poco más nos juntamos en la reunión. 

Fran a punto de coger la "repisilla" de camino a la reunión

Largo 5 (V+): La joya de la corona: el diedro

Le toca a Fran de primero. Es el largo del famoso diedro, el más esperado por Fran. Le va a tocar ponerse las pilas de cero a cien, porque pasa de los largos más fáciles que hasta ahora le han tocado de primero, a tener que currarse el más cañero del día.

Hay que salirse un par de metros en travesía a la derecha y enseguida tienes encima de ti el diedro. La primera impresión de Fran es: "¿y esto es tan difícil?". La apariencia es de ser bastante más fácil de lo que lo pintan. Pero en cuanto se mete en el diedro, se da cuenta que la realidad es otra y que verdaderamente es un V+ en el que se agradecen, y mucho, las tres chapas que tiene.

Desde la reunión 4 pierdo de vista a Fran, así que fotografío el entorno.
Magníficas vistas

Fran se va currando el diedro. Le veo asomar la cabeza por el lateral del diedro. Le hablo, pero apenas me contesta... Acaba el diedro y ya me explica que no me contestaba porque estaba apretando, pero bien.

A Fran le había indicado, que según las reseñas tras continuar subiendo unos metros después de salir del diedro había unos cordinos y puentes roca, que había que saltárselos y seguir un rato más hasta encontrar una reunión con dos chapas. Le insistí mucho, ya que le conozco... y vaya si le conozco, que en cuanto ve los puente roca ahí que monta reunión. El diedro le dejó tan absorbido, que cuando lo vio no se lo pensó demasiado; me comentó que si hubieran funcionado los walkies me lo hubiera preguntado, pero ante la falta de comunicación no se lo pensó mucho. No obstante, luego comprobaría que el hacer reunión aquí al final creo que fue un acierto, pues a mi parecer encaja mejor con la distribución correcta en largos del resto de la vía.

Cuando me pega el grito Fran de que ya está preparado todo comienzo a subir. Dos metros de travesía a la derecha y tengo la visión del diedro. La primera impresión es la misma que Fran: parece mucho más fácil de lo que me había imaginado. De hecho yo tenía en la cabeza un diedro completamente vertical y la visión que da desde aquí es que tumba un poco. No obstante, cuando empiezo a enfrentarme al diedro, me doy cuenta, como Fran, que las apariencias engañan.

El diedro se acomete más bien por su pared izquierda. El único agarre que tiene más o menos de contínuo es la grieta de la arista del diedro, pero esta pilla invertida, es decir, hay que meter la mano derecha con la palma hacia la derecha. Por la izquierda hay algún agarre que otro de vez en cuando y no muy bueno. No se progresa mal en el sentido de que tienes algún que otro punto en el que puedes pararte algo a refrescar fuerzas, bajar pulsaciones y pensar los siguientes movimientos; en ese sentido resulta más agradecido que largos como el principal del Gran Diedro del Torozo, en el que apenas puedes parar a respirar en todo el diedro, pero los agarres son bastante peores y mucho más escasos y los movimientos hay que estudiarlos un poco, a diferencia del Torozo en el que vás más a saco en oposición.

Más o menos se va resolviendo el diedro, pero llego a la parte más complicada del diedro que es donde está la tercer chapa. Aquí se ve bastante complicado, por ausencia de agarres. Hasta aquí apenas se ha usado la pared del diedro de la derecha, pero cuando ves que en la pared izquierda está chungo, en la derecha se descubre una mancha de magnesio en un agarre malo, pero agarre al fin de al cabo. Ataco. En una momentánea sensación de desequilibrio me cojo de la chapa, pero la suelto rápidamente como si estuviera envenedada: quiero hacerlo en libre; Fran me alecciona para que no me deje seducir por las chapas aunque ésta me esté pasando por delante de las narices mientras yo aprieto. Al final, con mucho esfuerzo pero salgo. El pasito no es fácil y puede que ronde el 6a.

Salir del diedro en esas condiciones es todo un alivio. Ya veo a Fran. Esta todo muy vertical; por aquí arriba la sensación de ambientazo es considerable. Me agarro bien y reposo unos segundos recuperándome del esfuerzo de antes. Nos cruzamos unas fotos.

Recién salido del diedro
Un zoom. "Todo OK ¡Vaya diedro!"
Fran me espera en la reunión 5

Voy para arriba. El terreno es muy vertical, pero ahora hay buenos agarres, así que la reunión se alcanza fácil.

Remontando hacia la reunión con una gran verticalidad y un ambientazo alucinante.

Cuando llego a la reunión, compruebo, como ya iba sospechando, que no era la que yo le había indicado a Fran. No hay problema; en ese momento según mis cuentas salían 8 largos: llevamos 5 y nos quedan el de llegar a la travesía, el de la travesía y el de la canal de salida. Pienso que así quedan mejor distribuidos tocándonos a cada uno el mismo número de largos de primero, así que pienso que no hay mal que por bien no venga.
 

Largo 6 (V): Mas diedro... pero mejor más a la izquierda (y así posiblemente IV+).

Me toca de primero. Se ve una especie de diedro bastante abierto por la izquierda. Salgo hacia una chapa y continúo directo hacia arriba... en lugar de ir un poco más hacia la izquierda en busca del fondo del diedro. 

Iniciando el largo 6. Me tendría que ir hacia la izquierda en lugar de tirar para arriba...

Me empiezo a encontrar bloques y lajas sueltos y la dificultad de esta parte yo tenía en la cabeza que era como mucho IV+, pero a mí me parece más alta, así que me empiezo a mosquear un poco. Sigo para arriba, hay pasos cada vez más delicados. Coloco el fisurero grandote en una buena grieta, lo que me da algo de tranquilidad.

Venciendo el cuerpo hacia atrás, a ver si consigo ver algo...

He leído por reseñas que la travesía a la derecha es en un punto que no resulta nada evidente, así que se me empieza a pasar por la cabeza si la reunión de la que he salido era la correcta y que enseguida había que tirar en travesía a la derecha. Estoy en un sitio muy malo, pero si continúo y no es por aquí iré empeorando la cosa, así que aunque el lugar no es para nada el propicio, me quedo colgando de un brazo mientras uso el otro para sacarme el croquis y las reseñas del bolsillo.

La situación es relativamente cómica, según me relataría posteriormente Fran que se partía de risa interiormente de verme colgado de un brazo y con el otro consultando el croquis. Yo me siento como un mono y no estoy nada cómodo, pero como digo seguir podría significar ir empeorando la situación. En mis "chuletas" tengo fotos, pero no encajan con nada... luego descubriría que las fotos estaban mal identificadas de dónde eran. Los croquis no me aclaran mucho, o más bien nada, así que hago una buena pelotilla, ya que mi situación no daba para plegarlos bien, y al bolsillo.

Sigo observando. Por abajo la verdad es que no parece que pueda ir una travesía, así que todo parece indicar que es hacia arriba, y encima arriba se intuye algo donde puede haber un nicho en el que podría estar la reunión. Decidido: tiro para arriba que es la opción más razonable y de momento en caso de error pienso que podría bajar aunque fuera abandonando un fisurero.

Supero algún que otro paso delicado más, pero rápidamente baja la dificultad y llego a donde se intuía el nicho... Y no es lo que me parecía que podía ser desde abajo, resultando que lo que me parecía un nicho era un saliente, pero afortunadamente había un nicho pegado a la derecha, algo escondido y mucho más raquítico de lo que uno se podía esperar. Al asomarme al nicho descubro dos chapas sin oxidar y una muy oxidada, así que me llevo una buena alegría al descubrir la reunión.

Una chapa vieja en la reunión 6 con un bonito paisaje de fondo

Como las chapas están un poco bajas, me da para sentarme en la repisilla. Pego un grito a Fran cuando tengo todo preparado y éste comienza a subir.

Cuando llega Fran me comenta que era mucho más fácil por la izquierda, por lo que sería el fondo del diedro, que por donde he ido yo. Él ha ido por ahí y ha subido bastante bien, y lo único es que le he obligado a desplazarse en un momento dado a la derecha a recuperar un fisurero y retornar a la izquierda. Afortunadamente para él, en todo el largo no había puesto más seguros que ese y la chapa de al poco de iniciar el largo que esa sí que le pilla de camino: es en esa chapa donde yo he tirado hacia arriba y había que haber tirado más a la izquierda.
  

Largo 7 (V): Espectacular travesía + canal final

Le toca a Fran de primero. La reseña que tenía yo decía que había que hacer la travesía, y al final de esta se encuentra la canal de subida, al principio de la cual se monta reunión, haciendo la canal de salida en el siguiente largo.

La verdad es que si no estás bien informado cuesta imaginar que hay que salir a la derecha en travesía, a poco más de un metro de alto sobre la reunión. Desde la reunión por ahí se ve... la nada más absoluta. Y tampoco se ve que por ahí se vaya nada fácil. Se ve una grietecilla más o menos horizontal así que sospechamos que es por ahí.

Fran se encarama y empieza a ir a la derecha. Hay un paso delicado. Lo pasa, se asoma y cuando ve al otro lado me confirma que hay una chapa, por lo que hemos acertado. No obstante se ve la travesía bajo una pared inaccesible, que se pierde en otro giro. Le indico a Fran que según la reseña hay que seguir hasta un hombro y que tras pasarlo ya se verá hacia arriba la canal de salida, y ahí se monta reunión.

Fran iniciando la travesía

Fran va recorriendo la travesía. Me pega un grito informándome lo que ve y que la travesía es una pasada y que la disfrute. Luego ya pierdo el contacto con él: tanto bordeo al pico hace que no nos oigamos ni a gritos.

Fran me hace señas tirando de la cuerda. Ha debido hacer reunión. Ha tardado bastante y ha ido chupando bastante cuerda, por lo que sospecho que se ha hecho también la canal de salida o al menos gran parte de ella. Se va llevando toda la cuerda. Me hace señas. Yo ante la duda no he dejado de asegurarle, pero después de las señas y tras observar que en un buen rato no tira de las cuerdas, entiendo que puedo empezar a subir.

Empiezo a subir y Fran empieza a chupar cuerda: nos hemos entendido bien. Me encaramo y empiezo la travesía. Tiene un paso delicado al inicio, que es el que da el largo la cotación de V. En un movimiento de cierto equilibrio se alcanza un agarre de esos que puedes coger con las dos manos y colgarte con los pies en el aire. Casi que eso es lo que hay que hacer para pasar al otro lado para continuar la travesía.

La continuación ya es más fácil... pero se trata de una travesía en adherencia con un patiazo de esos que quitan el hipo: sencillamente espectacular. Llega un tramo en el que vas con las manos por una grieta en la que te agarras en invertido a la altura de la cintura y los pies en adherencia.

La travesía es relativamente fácil, pero es de esas que quitan el hipo, por el patiazo
La misma foto en vertical da mejor idea del enorme vacío sobre el que va la travesía. Un patiazo de narices

En este tramo de agarres invertidos, Fran ha puesto un friend, tan bien puesto que no lo puedo sacar. Me cuesta horrores sacarlo y en este sitio tan aéreo me tengo que agachar a ver cómo narices lo ha metido: lo ha metido por un hueco más grande y deslizado unos 10 cm hasta un sitio más estrecho. Está un poco encajado y me cuesta mucho irlo sacando, con cuidado de no encajarlo más. En esos momentos estoy mentalmente rezando para que Fran no pegue un tirón de cuerda que me desequilibre.

Me cuesta 10 minutos de reloj el conseguir sacar el friend, pero por fin lo consigo. Avanzo hasta el hombro y tras pasarlo me encuentro una canal de subida. Esta canal está muy vertical: yo me la esperaba algo más tumbada ya. Las posibilidades de montar reunión por aquí son escasas, por no decir nulas si quieres un sitio medianamente decente, por lo que entiendo que Fran haya continuado. Todavia no tengo visión de Fran.

Unos pocos metros de escalada hacia arriba y de pronto ya tengo a Fran a al vista. Está al final de la vía, en una reunión colgada bastante incómoda, pero que supongo que esá así dispuesta por el tema de roces de cuerda. De todas formas Fran ha guiado la cuerda excelentemente en este retorcido largo y no tiene excesivos problemas de roce.

Ya tengo a Fran a la vista

Remonto estos últimos metros bastante verticales pero fáciles y llego arriba.

Fran en la última reunión


Descenso y retorno

Nos felicitamos por este fin de semana tan perfecto. Dedicamos unos cuantos minutos a picotear la comida que nos habíamos subido.

Trepamos un pequeño alto que hay tras nosotros, para contemplar las vistas y hacernos algunas fotos.

Fotos de las vistas, con el Peñón de Ifach de fondo

Junto a nosotros hay una corta pero afilada y aérea cresta, y Fran no se resiste a caminar de pie sobre ella desafiando el vértigo. El camino de retorno va por la continuación de ella, pero afortunadamente transcurre por una alternativa que va más abajo por su izquierda.

Fran, practicando sus dotes de funambulista.

Destrepamos otra vez, recogemos todo y emprendemos el camino de descenso. El descenso tiene una primera parte de recorrido en travesía. En este recorrido hay tramos algo expuestos y alguna trepada.

Tramos algo expuestos...
...pero muy fáciles
El retorno es entretenido y no se hace demasiado pesado
E incluye alguna trepada de usar manos

Superada la trepada ya toca bajar. Llega un momento que pasas por encima de la boca del túnel del ferrocarril. Desde aquí hay una caída tonta y vertical; me extraña que no haya al menos una valla antidesprendimientos.

Bonitas panorámicas en el descenso
El paso sobre el ferrocarril tiene una caida tonta

Seguimos descendiendo y vamos bajando poco a poco hasta llegar a la carretera. Una vez  en la carretera toda andar un rato por ella. Antes de llegar al inicio de la vía tenemos una magnífica vista de casi toda la vía que no nos queda más remedio que fotografiar.


Foto de la vista de la vía, que he usado para el croquis
Zoom de la parte alta

Pasamos el inicio de la vía y continuamos por la carretera hasta que por fin llegamos a la urbanización donde tenemos el coche. Allí soltamos toda la cacharrería y organizamos todo el maletero antes de iniciar el viaje hacia Madrid.

Partimos en coche. Pasamos Alicante y a la altura de Villena optamos por parar a comer, tomarnos unas cocacolas e ir al servicio. Tras eso ya continuamos de seguido el viaje hasta Madrid.


2 comentarios:

  1. Joer, que recuerdos me trae leer vuestro reportaje! No sabéis lo que disfrutamos abriendo ésta vía.
    Un abrazote!!

    Gustavo Llobet

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    1. Encantado de que te asomes por este blog, Gustavo, y más de que comentes. No sabes el regalazo tan tremendo que nos habéis hecho: no solo yo sino cualquiera con el que hable que haya hecho esta vía, habla maravillas de ella. Muchísimas gracias!

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